SAILOR MOON: INSURRECTION

Autor: Lord Kal-el
Formato HTML de Hukarovi Yanoki

Aclaración: Todos los personajes aquí presentados aquí están inspirados o sacados de diversos Animes y solo son usados por fines de diversión nada más.

Capitulo 8:

Isaac Asimov

Planeta Neptuno

"Bueno, ya estamos aquí" Dijo Jet mientras dejaba los controles de la nave.

Ellos ya habían descendido en el aeropuerto espacial de Neptuno, por suerte no hubo ninguna sospecha de parte de las autoridades del planeta y tenían el campo libre para trabajar.

Dirigiéndose hasta la puerta de desembarque, él pudo ver que ya todos se habían puesto sus disfraces, debido a los últimos acontecimientos la seguridad era muy grande en todos lados y tenían que pasar desapercibidos, era por eso que todos estaban vestidos como cargadores comunes, incluso Kenshiro. Las chicas por suerte no tenían que hacer tal cosa ya que ellas podían pasar como simple turistas que para ahorrar tiempo decidieron venir en su nave.

"Oiga, señor Jet" Dijo Touji mientras alzaba una de las cajas que había en su hangar. "Por que no nos ayuda un poco, estas cosas están muy pesadas."

"Cuando has visto que el piloto de una nave se meta en esa clase de trabajos, recuerda que tratamos de mantener las apariencias." Le contesto él escozando una sonrisa.

"Las apariencias, si como no." Mascullo Touji mientras proseguía su camino.

"Con cuidado Touji, vas a hacer que me caiga". Le previno Kensuke, pero infortunadamente sus advertencias no fueron escuchadas y ambos jóvenes cayeron de bruces al suelo.

"Mas cuidado muchachos" Les dijo Genryu mientras les ayudaba a levantarse con una mano mientras con la otra llevaba una caja sobre el hombro. "Vamos a necesitar estas cosas para nuestra operación."

"Ya lo sé" Respondió Kensuke un poco cansado. "Solo dile a ese tonto que deje de quejarse y que haga lo que se le ordeno."

"Ya deja de hablar y ayúdame a levantar esta cosa." Dijo Touji mientras alzaba la caja con ayuda de Kensuke y salían de la nave.

Genryu solo puso mover su cabeza en resignación mientras los acompañaba afuera. Atrás de él, Rouge, Coral, Nuku-Nuku y Rei lo seguían de cerca, todas ellas estaban vestidas de ropa casual y dos de ellas admiraban la vista ante ellas.

"¡¡Yupi!!" Dijo con alegría Nuku-Nuku. "Nuku por fin esta de nuevo en Neptuno, ya no puedo esperar para ver a Nygel-san y a Sylia-san de nuevo, y también jugar con Nene-chan y Linna-chan"

"¡Es increíble!" Exclamo Rouge impresionada por lo que estaba pasando. "Es la primera vez que estoy en otro planeta ¡Yo jamás creí poder volar por el espacio mucho menos poner el pie en otro planeta!"

"Y eso que no ha visto nada aun Rouge-san" Le dijo Coral. "Aunque debo admitir que entre todos los planetas de las Outers este es el mas hermoso."

"¿Pero como es posible?" Pregunto Rouge. "Por lo que sé, ningún planeta en nuestro sistema solar podía soportar la vida con excepción de la tierra."

"Eso es correcto". Contesto Rei. "La Tierra es el único planeta en el sistema solar que puede albergar vida por si sola."

"¿Huh?" Rouge no pudo entenderla exactamente lo que ella trataba de decir.

"Lo que Rei quiere decir" Prosiguió Shinji mientras salía de la nave cargando un pequeño maletín. "Es que los demás planetas usan una avanzada tecnología llamada 'Terraform' para que se pueda vivir en ellos."

"¿Terraform?" Rouge ahora estaba ahora mas confundida que antes.

"Así es" Dijo Shinji. "Gracias a ella, se han creado disruptores de gravedad, para que la enorme gravedad de lo grandes planetas no nos afecte y modificadores de atmósfera que crean oxigeno y calor a los planetas mas alejados del sol."

"Sin contar los hidro-reactores que son capaces de crear océanos como los de este planeta." Continuo Kensuke que había estado atento a la conversación mientras cargaba las cosas en un camión cercano.

"¡Es verdad!" Dijo Rouge. "Cuando estábamos sobre este planeta pude ver que parecía que estuviera cubierto completamente de agua."

"90% por ciento para ser exactos." Kensuke recalco y luego sus ojos dieron una expresión extraña como si estuviera fantaseando. "Pero este planeta esta lleno de paradisíacas islas, ahora estamos en la más grande y exótica de todas ellas, la isla de 'Las Sirenas', uno solo necesita ver las playas para ver por que se llama así, ahhh las playas, si viera la cantidad de hermosas chicas que hay ahí, solo espero haber traído suficiente material para grabar..."

Kensuke paro de hablar al darse cuenta de que hablaba en voz alta y que todos lo estaban mirando de una manera extraña, poniéndose rojo de vergüenza el siguió con lo que estaba haciendo.

"Bueno..." Dijo Genryu tratando de cambiar la conversación. "Creo que sería mejor que nos vayamos de una vez, nosotros iremos a las oficinas de carga para arreglar todo, y ustedes chicas deben ir a la terminal, no se preocupen, Rei se ocupara de todo para que nadie sospeche ¿Rei?"

Rei Ayanami asintió. "Ya tengo todo preparado Com... Genryu, antes de partir se me dieron todos los papeles para estas circunstancias".

Asintiendo Genryu subió al camión junto con los demás chicos mientras Jet Black se preparaba para conducir y luego se dirigió de nuevo a las chicas. "Entonces nos vemos después a la salida de la terminal."

Y con esto Genryu y los demás se alejaron, y las chicas siguieron su camino como se les había dicho, una de ellas todavía maravillada por todo lo que veía.

Ninguno de los dos grupos se percato de la otra nave que llegaba y que, como ellos, había llegado hasta ahí desde Júpiter para entregar una carga al cuartel de Pacificadores de ese planeta, pero que sin darse cuenta también llevaban a un polizón, una joven niña que sin saberlo se encontraba en un viaje que la cambiaría por el resto de su vida.

Mientras tanto, en un lugar en la ciudad de 'Las Sirenas'.

"¡¿Qué has dicho Sylia?! ¡No puedes estar hablando en serio!"

"Lo estoy." Respondió calmadamente Sylia Stingray a su exaltada compañera, aunque ella podía entender claramente los motivos de su reacción.

"Pero es ridículo" Dijo la chica de cabello rubio pálido, la mas joven del grupo de cuatro que estaban ahí reunidas.

"Es duro admitirlo pero Nene tiene razón, no estamos listas" Dijo otra chica de cabello castaño que estaba vestida con un uniforme de oficina.

"Lo sé". Contesto Sylia, "Pero no hay opción, si no lo hacemos pronto el sub-comandante Fuyutsuki podría revelar todos nuestros secretos."

"Ese no suena como algo que haría el Sub-comandante que conocemos" Dijo la chica de cabello castaño.

"Tienes razón Linna, el que conocemos jamás lo haría" Respondió Sylia con algo de pena en su voz. "Pero las Delmos pueden ser capaces de transformarlo en otra persona a la que puedan sacarle la verdad."

El humor del cuarto cambio rápidamente al todas entender lo que ella trataba de decir, los que eran apresados siempre volvían con su personalidad cambiada, si es que volvían, nadie sabía como lo lograban sin el Ginzuisho, por suerte nunca habían capturado a nadie importante antes, solo simples simpatizantes con su movimiento, pero ahora con la captura de su Sub-Comandante toda su organización podría colapsar.

"Y entonces ¿Qué esperamos?" Dijo la otra chica de cabellos castaño pero a diferencia de Linna ella lo tenía mas desarreglado. "Vamos por él de una vez, con Nene infiltrada ahí, nosotras podemos hacerlo, los trajes ya están listos y probados, ¿Qué mas necesitamos?"

"Necesitamos Tiempo, Priss" replico Nene. "Recuerda que soy nueva allá. Aun no estoy bien familiarizada con los sistemas, además sería de mi de la primera que sospechen si ustedes tratan de hacer algo."

"¿De que estas hablando?" Le dijo la chica llamada Priss. "Tu conoces todo lo que hay que saber de computadoras, es más tú misma te jactas a veces que podrías crear un mejor sistema de vigilancia del que ellas ahora tienen."

"Pero..." Nene no sabía exactamente que responderle a Priss, no importaba que le dijera solo bastaba verla a los ojos para ver que ella lo iba a hacer, en ese instante, ella sintió la mano de Sylia sobre su hombro.

"No te preocupes" Le dijo ella. "Te aseguro que nadie sospechara de ti."

"Si tú lo dices." Dijo Nene en resignación.

"¿Y como lo vamos a hacer?" Dijo Linna un poco preocupada. "No me gusta mucho ser la realista del grupo, pero no podremos hacer esto solas, los peligros son demasiados y nosotras muy pocas."

"No te preocupes por eso tampoco, Linna." Dijo Sylia. "Ya me han informado que ya han mandado desde Europa la ayuda que necesitamos."

"Que bien." Dijo Nene. "Y de quienes se tratan."

"Bueno, se trata de...".

Beeep, Beeeep.

Sylia paro de hablar y miro el Beeper en su cinturón, después de leer el mensaje que le enviaron ella sonrió y lo puso de nuevo en su lugar. "Me han informado que ellos ya han llegado a Neptuno, dentro de una hora llegaran aquí. Ahí ustedes podrán conocerlos."

Y con eso Sylia salió de la habitación dejando a las chicas con muchas sospechas, ellas conocían a Sylia y no era típico de ella decir cosas a medias, quien sea que estuviera viniendo para ayudarlas era obvio que ella no quería decirlo. Un escalofrió recorrió la espalda de una de ellas.

Su paso por los pasillos era firme y seguro, fiel reflejo de su personalidad, cada paso que daba era sonoro para que todo el mundo notara que estaba ahí, como debía ser, de entre todas en su ramo ella era considerada la mas audaz, la más hábil, eso era algo indiscutible.

Así es como debía ser Sailor Uranus.

El mas fino ejemplo de devoción y lealtad en todo el imperio, desde que tomo el manto de Sailor Uranus por primera vez en su antigua vida, ella supo que no habría nadie mas devota a la causa, claro con la excepción de Sailor Neptune. Ahora en su nueva vida, ella de nuevo tomo su manto con gran honor, jurando traer de nuevo la gloria del Silver Millenium, meta que logro después de grandes y crueles batallas al lado de sus compañeras.

Pero la gente de nuevo trataba de arruinar el tan perfecto paraíso que ellas habían creado, ¿Cómo puede existir gente así?, ella sencillamente no podía entenderlo, lo que si sabía era que ella los iba a detener a todos ellos, sin importar el precio.

Le hubiera gustado estar cuando la Neo-reina subyugo a esos rebeldes de Júpiter, ingratos, se decía ella, no merecían la compasión de su Neo-Reina, si hubiera sido ella, hubiera castigado a todos aquellos que hablaron mal de su Reina mandándolos a Urano donde su 'ayudante' se encargaría que sean útiles miembros a la sociedad.

Fue por eso que ahora, mientras caminaba por los pasillos de la fortaleza de su amada, su cara normalmente seria y fría mostraba algo que causaría sorpresa en muchos que la conocían.

Una sonrisa.

Y no era para menos, de todas las personas que habían sido capturadas en el ataque a la rebelión de Júpiter, ella jamás pensó que podrían capturar a uno de sus líderes. Sailor Pluto les había dicho a ellas que ella iba a encargarse de todo en Júpiter y por un tiempo ella sentía envidia de que iba a tener toda la acción para si sola. Ella realmente no pensó que tendría la oportunidad de encargarse de aquellos que se atrevieron a insultar a su Neo-Reina, pero la oportunidad se le había presentado y ella no iba a desperdiciarla.

Después de caminar por el largo corredor ella por fin se detuvo en frente de una de las puertas que había ahí, colocando su mano en el identificador que estaba al lado, la puerta se abrió ante ella.

"Vaya, veo que ya has saludado a nuestro nuevo huésped, Comandante Hagen." Sailor Uranus comento al entrar a la habitación y ver el panorama ante ella.

"Solo le mostraba nuestra hospitalidad Lady Uranus" Contesto la mujer de cabello plateado que se encontraba en la habitación.

"Y veo que lo has hecho en tu particular estilo, pero, ¿No cree que fue un poco brusca?" Remarco Sailor Uranus mientras veía a la otra persona en la habitación, se trataba de un hombre de edad encadenado a la pared, de su boca salía un pequeño hilo de sangre.

"No mas de lo necesario Lady Uranus." Respondió ella.

"Esta bien, confió en tus decisiones". Dijo la Sailor del cielo mientras se dirigía al hombre al que ella conocía como Fuyutsuki, por un rato ella contemplo al anciano hombre, en otro tiempo ella lo hubiera llamado enemigo, pero un enemigo es alguien a quien temes, a quien odias con todo tu ser, el hombre ante ella no era un enemigo, era solo un tonto, un tonto que había cometido la mas grande insolencia de todas.

"¿Qué ocurre anciano? Estas muy callado" Le dijo ella con burla. "No me digas que ya te has comido tu propia lengua".

Fuyutsuki no le dijo nada, solo continuo mirándola con su frente altiva, fue en ese momento que Neena dio un paso adelante y abofeteo fuertemente la cara del antiguo profesor.

"¡Lady Uranus te ha hecho una pregunta! ¡Por tu bien será mejor que respondas!"

Fuyutsuki no dijo nada, solo continuo mirando a Sailor Uranus sin perder nunca su compostura.

"No se moleste Comandante." Le dijo Uranus con una sonrisa. "Muy pronto el se dará cuenta que su resistencia es inútil una vez que le mostremos nuestros métodos mas 'sutiles' ¿No es así?"

La cara de la comandante Hagen comenzó a sonreír también al darse cuenta de lo que ella implicaba en sus palabras. "Será un placer, Sailor Uranus."

Sailor Uranus asintió. "Eso espero, pero me temo que tendrá que esperar, me han informado que Sailor Mercury viene para acá para hablar personalmente con nuestro 'invitado', así que creo que sería mejor que lo prepares para su llegada."

La comandante asintió. "No se preocupe Lady Uranus, yo me encargare de todo".

Beeepp, Beeep.

La conversación de las dos mujeres fue interrumpida por el sonido del Inter-comunicador que se encontraba en el cuarto, y fue la Comandante la que contesto.

"¡¿Qué ocurre?! ¡Pensé que había dado instrucciones precisas para que no me molesten!" Dijo muy furiosa la comandante Nena a la operadora.

"Lo siento comandante" Dijo la chica muy apenada, "Pero Sailor Pluto acaba de llegar y pide hablar con Sailor Uranus y Sailor Neptune inmediatamente."

'¿Sailor Pluto aquí? Eso es extraño.' Pensó Sailor Uranus mientras tomaba su lugar en frente del monitor. "Dígale que ya estoy en camino."

La joven operadora asintió y cerró la comunicación.

Uranus entonces se dirigió a la Comandante Neena. "Ya sabe que hacer Comandante Hagen."

"Así se hará Lady Uranus" Dijo ella mientras se inclinaba con respeto y Sailor Uranus salía de la habitación.

Una vez afuera, la cara de Sailor Uranus se puso muy seria, antes la llegada de Sailor Pluto no sería una sorpresa, casi siempre ella venía para informarles del estado de las cosas y la próxima misión que tenían que realizar, pero ella ya les había dado una misión, la de interrogar al cautivo líder enemigo, y ella nunca regresaba hasta que ellas hubieran terminado, el que este Sailor Pluto aquí y justo ahora solo podía significar una cosa.

Problemas.

Grandes problemas.

"Bueno ya llegamos"

Las muchachas salieron del vehículo que las había transportado y observaron el edificio, Rouge y Coral, que estaban ahí por primera vez, no sabían bien que estaban esperando, ellas sabían que iban a una base secreta, y se imaginaron que estaría oculta tras un negocio falso como la base de Europa, pero nunca ni por un momento llegaron a pensar que tendría un anuncio tan grande y menos que se trataba de una tienda de ropa inferior femenina.

El nombre de 'Silky Doll' tampoco la entusiasmaba mucho.

"¡Vaya, jamás creí volver a ver este lugar de nuevo!" Dijo Kensuke muy entusiasmado mientras sacaba su videocámara de la nada.

"Es mejor que guardes esa videocámara." Le previno Shinji. "Si es que quieres ver algo de nuevo".

"Tienes razón." Contesto Kensuke mientras guardaba su cámara con mucha pena.

"Ustedes pueden entrar, yo mientras tanto entrare por el garaje del otro lado del edificio para verme con Nygel." Jet dijo a los otros mientras encendía su vehículo y se alejaba conduciendo.

"Bueno, ya lo oyeron" Dijo Genryu y casi todos pudieron notar el nerviosismo en sus palabras, "Entremos."

Todos asintieron y entraron a la Boutique, Rouge no podía creer lo que estaba pasando, el lugar era en verdad una tienda de ropa femenina, ella pudo a ver a muchas mujeres y jovencitas mirando los productos, ninguna tenía exactamente la cara de ser una luchadora por la libertad, también noto que todas ellas estaban mirando hacía donde estaban, claro que no podía culpar su sorpresa, no todos los días cinco hombres entran a una tienda así, su cara estaba tan enrojecida de vergüenza que ella apenas noto cuando una mujer de cabello plateado se acerco a ellos, aunque no podía decirlo con certeza, era muy posible que se tratara de la dueña del establecimiento.

"¿Disculpen?" Dijo la mujer con un tono amable. "Ustedes chicos son de la compañía ¿No es así? Pasen por acá por favor."

Rouge vio como todos los chicos asintieron y empezaron a seguirla, ella ya iba a hacer lo mismo cuando una mano la detuvo, mirando hacía atrás vio que se trataba de una chica con uniforme de secretaria.

"¿Disculpe madame?" Le dijo ella. "¿No quisiera ver los nuevos modelos que nos han llegado? Le aseguro que le van a encantar."

"Lo siento no puedo ahora, tengo que..."

"Por favor" Dijo la señorita. "Yo insisto."

Rouge la miro bastante sorprendida, la chica tenía una mirada extraña y fue en ese momento que se dio cuenta de que no todo era lo que parecía en ese lugar.

"Vamos Rouge-chan" Dijo Nuku-Nuku tomando de otro brazo. "Es divertido ya lo veras, vas a poder conocer a todas las nuevas amigas de Nuku-Nuku y también a Nygel-san y a Mackye-chan que también son buenos amigos de Nuku-Nuku y la reparan cada vez."

Viendo que no tenía exactamente muchas opciones, ella finalmente se encogió de hombros y dejo que la llevaran hasta lo que parecía ser un ascensor que justo estaba al lado de las escaleras con Coral siguiéndolas de cerca, que parecía estar ya al tanto de lo que estaba pasando. Mientras las chicas se subían en el ascensor unas clientas del local se preguntaban el por que del trato preferencial a las recién llegadas.

Mientras tanto, Genryu y los demás caminaban detrás de la bella mujer por los pasillos detrás de la tienda, hasta que llegaron a una puerta especial, la chica de cabello plateado introdujo unos números en el panel que se encontraba al lado que abrió las puertas y todos pudieron ver las escaleras detrás de ella. Fue cuando ellos estaban bajando las escaleras, que la mujer se sintió lo suficientemente segura para hablar.

"Veo que trajiste caras nuevas, Genryu." Dijo ella. "¿Espero que ya hayan sido investigadas por nuestros agentes?"

"Tan precavida como siempre y siempre dudando de los demás, ¿No es así señorita Sylia?" Dijo él con una sonrisa "No se preocupe ellas son buenas... buenas amigas, si eso son."

Sylia lo miro por un momento antes de volver a ver adelante. "Y tu tan confiado como siempre, deberías ser un poco mas desconfiado, te ayudara a sobrevivir más tiempo. Pero el tiempo es corto, no hay tiempo para hacer un chequeo detallado, por suerte conozco a Ayanami por varios reportes que me entregaron, aunque nunca vi a esas otras mujeres antes, tendremos que confiar en tu intuición, por el momento."

"¿Tan mal esta la situación?" Pregunto Kensuke.

"Peor de lo que creen" Dijo ella. "He recibido un reporte hace poco de que las DELMO han desarrollado un nuevo sistema de armas, instruí a Nene para que encontrara más sobre ello, pero hasta ahora no ha podido encontrar nada, lo único que sabemos es que es muy poderoso."

"¡¡Rayos!!" Se quejo Touji. "¿Porque nunca nos tocan misiones mas sencillas? ¡¿Y porque siempre que pareciera que no pueden empeorar más lo hacen?!"

"¡Vamos Kensuke!" Le calmo Genryu mientras terminaban de bajar las escaleras y abrían otra puerta. "No puede ser tan malo como parece."

"¡¡¡Tú!!!"

"Yo y mi maldita bocota" Susurro Genryu al ver a la chica con ojos asesinos que estaba mirándolo directamente.

"¿Y bien que es lo que ocurre Pluto?"

Esa fue la pregunta de Uranus, que ahora se encontraba en sus oficinas con Sailor Neptune, ambas en frente de Sailor Pluto.

"Ha ocurrido algo malo." Dijo ella tratando de contener su furia, pero sin mucho éxito. "Algo muy malo."

Ambas Senshi la miraban con una poca de sorpresa, era muy raro ver a su amiga de esa manera tratando de mantener controlada sus emociones, ella por lo general era un témpano inquebrantable, si algo la puso de esa manera, ellas no se atrevían a pensarlo.

"¿Qué es lo que ha ocurrido Pluto?" pregunto finalmente Sailor Neptune. "Pensábamos que yo nos habías dicho todo lo que necesitábamos saber."

Tomando un poco de aire, la senshi del tiempo continuó. "Ya no tengo acceso a la Puerta del Tiempo".

El shock de las caras de ambas Outers fue inmediato.

"¡¡Pe... pe... pero eso es imposible!!" Dijo Neptune sin poder creer lo que estaba escuchando. "¡¡No puedes estar hablando en serio!!"

Sailor Pluto solo pudo asentir con pena.

"¡¿Como pudo pasar eso?!" Dijo Uranus con mucha rabia en su voz. "Responde Setsuna ¡¿Acaso es culpa del enemigo?! ¡¿Dejaste acaso que te hicieran eso a propósito?!"

Sailor Uranus callo al ver a Sailor Pluto que con su sola mirada de ira le hacía recordar que no estaba ante una de las Inners. "Aun no sé como lo hicieron" Dijo ella finalmente con una voz fría. "Pero de alguna manera lograron robar la Llave del Tiempo de mi Palacio sin que yo pudiera ser capaz de saber que eso iba a pasar y ahora la han usado para sellar la Puerta del Tiempo, ni yo que soy su guardiana puedo usarla más a menos que tenga la Llave nuevamente."

"Ya me parecía absurdo que hayas dejado que ellos destruyeran el palacio Caronte a propósito." Dijo Sailor Neptuno.

"Pero dinos" Dijo Sailor Uranus. "¿Tienes alguna idea de quien pudo haber sido el que ha hecho eso?"

"De hecho, Sé muy bien quien lo hizo" Le respondió ella. "Es por eso que vine a verlas, necesito su ayuda para encontrarlo."

Dicho esto, Sailor Pluto movió su cetro hacía ellas, usando sus grandes poderes ella empezó a compartir sus recuerdos con ellas, a pesar de que no podía usar la magia del tiempo, ella aun poseía poderes increíbles como Sailor que le permitían realizar su unión de mentes con las Outers Senshi.

"Él es el mago Clow Reed."

Imágenes de la primera vez que Sailor pluto lo conoció aparecieron en sus mentes.

"Él fue una vez un poderoso hechicero capaz de manipular las fuerzas de la naturaleza a su antojo."

Las Outers miraban intensamente a Clow en pleno uso de unas cartas mágicas y lo veían crear una tormenta de la nada sobre un área de cultivo obviamente afectado por la sequía, para luego esta desaparecer tan rápidamente como había llegado.

"Y aunque él murió a corta edad, reencarno como nosotras siglos después bajo el nombre de Elios a finales del siglo XX".

La imagen del joven Elios yendo a la escuela en el distrito de Tomoeda pasaba por sus mentes.

"Y como nosotras, él recordaba perfectamente su vida anterior y como usar los poderes de su pasado."

Las miradas de las Outers Senshi se ensancho al ver al niño en un traje de mago y rodeado por lo que parecían ser dos criaturas mágicas, una pantera alada tan oscura como la noche misma, y lo que parecía ser un demonio de forma femenina con alas de mariposa.

Fue en ese instante, que Sailor Pluto cancelo el link entre ellas, para luego terminar de hablarles. "Yo creí que había muerto durante la Segunda Era De Hielo, pero al parecer ha sobrevivido y se ha unido con los rebeldes, si es que no es su líder ya."

"¿Cómo es que recién nos dices de él?" Dijo Sailor Uranus bastante enojada. "¡Nosotras pudimos acabar con él desde hace mucho!"

"Es por que antes, él no era una amenaza" Dijo ella. "Ni él, ni su elegida fueron nunca una amenaza para el Cristal Millenium."

"¿Su elegida?" Pregunto Sailor Neptune. ¿De quien estás hablando?"

"Su nombre es Sakura Kinomoto". Respondió Sailor Pluto. "Ella vive en Hong Kong junto con marido y su hija, cuando era más joven, ella tomo posesión de unas poderosas cartas mágicas que creo Clow, mismas que ustedes pudieron ver en las imágenes que les mostré."

"¿Y no hay peligro de que Clow o su elegida usen esas cartas contra nosotras o la Neo-reina?" Fue la pregunta de Uranus que parecía estar muy molesta por el hecho de que no les habían dicho nada de eso antes.

"Ninguno" Con su amiga. "Clow ya no puede usarlas por que las cartas ahora están a nombre de la chica y solo la pueden obedecer a ella, y la señora Sakura no puede usarlas por el sello que puso la neo-Reina Serenity, pero ya basta de explicaciones ¿Pueden hacer lo que les pido, o no?".

Ambas chicas asintieron a la vez. "No te preocupes, lo haremos," Dijo Uranus. "Tus poderes son demasiado importantes para el Cristal Millenium para que los perdamos en este momento".

"Creo que Hong Kong será un buen lugar para empezar" Dijo Neptune. "¿Vienes con nosotras Pluto?"

"Me temo que no." Contesto ella. "Por mas que quiera unirme a ustedes ahora, me temo que otros asuntos me llaman, a los cuales tengo que acudir personalmente, y si me disculpan creo que es el momento de retirarme."

Dicho esto, ella se tele-transporto en frente de ellas, dejando a las dos chicas solas. Ambas Sailor se miraron por un momento, era obvio para ambas a donde había ido Sailor Pluto y que 'otros' asuntos eran más importantes que recuperar el control de su puerta en este momento, ahora dependía de ellas hacer lo segundo, y una sonrisa apareció en los labios de ambas Senshi.

Una vez más, la cacería empezaba.

"¡Me rehusó completamente!"

Silya Stingray permanecía impasible por la reacción de su compañera y empleada, Priss Asagari, era obvio que ella ya esperaba tal reacción de ella al enterarse de que Genryu Saotome iba a tomar parte en la misión de rescate del Sub-comandante Fuyutsuki.

"Vamos, calmate Priss." Linna dijo tratando de apaciguarla. "No es para tanto".

"¡No es para tanto!" Dijo ella furiosa. "¡¿Acaso estabas cuando ese par de cretinos entro y destrozo mi escenario en Venus?! ¡¿Acaso estabas cuando destruyeron mi motocicleta?! ¡¿Dime, acaso estabas ahí cuando casi acabaron con mi carrera?!"

"Oye, no hables como si lo hubiéramos hecho a propósito." Dijo Genryu un poco indignado. "Kenshiro y yo estábamos escapando de los Boomers de los Pacificadores y no sabíamos que la sesión de grabación de tu grupo estaba justo detrás de esa pared, además tu fuiste la que empezó a disparar contra ellos, por suerte nadie salió lastimado."

"¡Pero destrozaste todo el estudio y todas mis canciones que había escrito y grabado ahí se quemaron en el incendio!" Priss apenas podía contenerse de estrangularlo de nuevo. "¡Y para tu información te disparaba a ti más que a ellos!"

"¿Qué acaso no podía ella escribirlas de nuevo?" Dijo Kensuke al oído de Touji, infortunadamente lo dijo lo suficientemente fuerte para que Priss lo oyera.

En un instante el era sostenido por el cuello por la enojada cantante. "¡¿Disculpa?!" Le dijo ella entre dientes. "¡¿Acaso sabes cuanto cuesta hacer una canción uhmm?!"

"No." Respondió él con un poco de temor.

"¿Sabes cuantas horas de trabajo e inspiración son necesarias para escribir solo unos cuantos versos y lo difícil que es que vuelva a ti después?"

"Bueno, no" Dijo Kensuke mientras trataba de ganar un poco de aire y mentalmente rezando por su vida.

"Entonces es mejor que te quedes callado". Dijo ella finalmente mientras lo soltaba del cuello y siguió dando una mirada homicida a Genryu. Kensuke solo puso dar un suspiro de alivio al darse cuenta de lo que se había salvado.

"Vaya, veo que Genryu tiene la misma habilidad de su padre para hacer amigos" Dijo Rouge.

Coral solo pudo asentir por la escena ante ellas. Ambas habían estado desde hace un buen tiempo en la habitación, ellas habían arribado antes que Genryu y los demás y Nuku-Nuku las había introducida a todas ellas con el resto de las chicas, al principio a ella le habían parecido chicas normales, no de la clase que se une a una rebelión intergalactica, aunque claro esta que ninguno de los que había conocido hasta ahora le parecía ser feroces guerreros, con la excepción de Kenshiro y de su sobrino claro esta. Pero había algo más que la molestaba y decidió aclararlo de una vez.

"¿Disculpa Coral-san?" Pregunto ella en voz baja. "¿Me podrías explicar que es un boomer?"

A pesar de estar hablando en voz baja, su pregunta alcanzo los oídos de varias de las personas en la habitación.

"¿Disculpe Señorita Rouge?" Pregunto Nene Romanova. "¿Acaso no sabe que es un Boomer?"

Rouge se puso un poco roja de vergüenza, y luego contesto. "Si, yo, bueno, yo todavía no me familiarizo con varios términos que usan todos."

"¿Oye?" Linna dijo con sorpresa. "¿Dónde ha estado todo este tiempo? ¿En una cueva?"

"En una prisión criogénica, según lo que me dijeron." Contesto Rouge con un poco de pena.

"¿...?" Linna ciertamente se quedo sorprendida por su repuesta.

"Bueno..." dijo Kensuke mientras se arreglaba las gafas. "Con gusto le daré su respuesta señorita Rouge. Los boomers son robots altamente sofisticados que fueron desarrollados para esta nueva era, al principio fueron creados para que reemplazara al hombre en diferentes tipos de mundanas tareas y así este tuviera más tiempo libre, hay de todas las clases fabriles, domésticos, militares, aunque ahora se usan más los de uso militar."

"Los Boomers son más que simples Robots." La voz de Sylia estaba tan llena de ira que todos ahí podían sentirla. "Son aberraciones inhumanas que nunca debieron existir, bombas de tiempo que tarde o temprano explotaran nuevamente."

Un breve silencio invadió el cuarto hasta que Nene decidió continuar. "Lo que mi amiga trata de decir, es que los Boomers a pesar de su avanzada tecnología tienden a 'enloquecer' por así decirlo, en este estado tienden a destruir todo lo que hay en su camino."

"Pero eso es horrible". Exclamo ella. "¿Es que acaso nadie hace nada para detenerlos?"

"Oficialmente, no" Dijo Jet metiéndose en la conversación. "Ocultan los reportes al publico para que nadie se entere lo que esta ocurriendo en los otros planetas, y los pocos casos que salen a la luz son catalogados como simples accidente por fallas humanas."

Rouge no pudo evitar ver como el ex-pacificador se miraba su mano metálica mientras decía esas últimas palabras.

"Su sola creación fue un error. La neo-Reina esta jugando con fuerzas que ni siquiera ella comprende, y tarde o temprano todos nosotros pagaremos por ello." Sylia concluyo, todos los presentes se quedaron callados al notar el tono de su voz, luego después de tomar un poco de aire ella añadió. "Pero no venimos para hablar de los Boomers."

Genryu asintió. "Tiene razón. Es mejor que vayamos al punto."

Sylia asintió nuevamente y el ambiente del lugar cambio súbitamente no solo en la actitud si no también en el ambiente físico, la habitación se oscureció y una pantalla apareció detrás de Sylia.

"Vaya". Rouge no dejaba de asombrarse por las cosas que veía a cada momento.

"Bueno, creo que es el momento de comenzar." Dijo Sylia mientras tomaba un control y empezaba a apretar los botones, una imagen de lo que parecía ser una pequeña isla podía ser vista, aunque más bien parecía ser una roca en el océano, un aeropuerto y una gran torre eran los únicos edificios y ocupaban casi toda su superficie.

"Esta es la isla de Poseidon" comenzó Sylia. "Este es el lugar a donde se han llevado al Sub-Comandante, el gran Palacio de Triton, se encuentra a cincuenta millas de la costa y su único acceso es por aire, todo barco tiene prohibido navegar en un radio de 3 millas."

La imagen luego cambió para dar pasó a una serie de imágenes de lo que parecía ser el interior de los edificios, diversos sistemas de armas, vehículos marinos y aéreos como también boomers.

"Como pueden observar" Continuo Sylia. "El lugar es una autentica fortaleza, tiene un sistema bastante avanzado de radar y sonar que detecta cualquier nave este esta en el aire o bajo el mar y con suficiente poder de fuego para volar todas las cadenas de isla de este planeta. Esta dividido en varios niveles, y creemos que han puesto al Sub-comandante Fuyutsuki en el nivel nueve, aislado del resto de los internos."

"¿El resto?" Pregunto Coral algo confundida.

"Así es" Respondió Sylia. "Hay unos setenta internos encerrados en la isla y que se encuentran en otros niveles dependiendo, según su 'peligrosidad' por lo que hemos podido averiguar."

"¡¿Setenta?!" El número sorprendió a Genryu. "Pensé que había muchos más."

"Como dijiste 'había'" dijo Sylia algo apesadumbrada. "Hemos calculado que unas mil doscientas personas fueron llevadas allá hasta hora pero probablemente sean más, la mayoría sin ninguna relación con 'La Rebelión', de todas ellas solo a un par de cientos hemos visto que han sido liberadas con su personalidad 'cambiada', del resto nadie sabe nada, lo único que se conoce es que no se encuentran ahí, Nene ya lo confirmo, aunque puede ser que hayan sido llevados a otros lugares, Urano probablemente."

"¿Qué quieres decir con 'cambiadas'?" Shinji pregunto ya que eso había captado su atención.

"La personalidad de esos sujetos ha cambiado totalmente" Contesto ella, luego ella tomo un poco de aire antes de continuar. "Muchas de estas personas eran grandes soñadores con grandes ideas para el futuro, ahora lo único que hacen es hablar de lo maravilloso que es vivir bajo el Reinado de Serenity, y lo felices que están por que ella les ha dado una segunda oportunidad en sus vidas."

"Mi Dios..." Dijo Genryu captando lo que Sylia trataba de decir. "¿Es eso lo que planean hacer con el comandante Fuyutsuki?"

Sylia asintió. "Así lo creemos, y después de hacerlo obtendrán todos nuestros secretos fácilmente."

"¡Eso es lo de menos!" Dijo él con firmeza "¡Es la vida y libertad de un hombre la que esta en juego!"

Sylia no pudo evitar sonreír para si misma. Genryu en verdad no había cambiado nada de aquel muchacho lleno de ideales y de buen corazón que ella primero había conocido, y que siempre pensaba en los demás antes que en si mismo, ella solo se preguntaba cuanto más duraría así. Dando un profundo respiro ella asintió. "Es por eso que actuaremos esta noche."

Todos en la habitación se sorprendieron de lo que acababa de decir ella, incluso Genryu, pero fue Kensuke el que le gano a preguntar esta vez.

"Disculpe Señorita Sylia." Dijo él tímidamente. "¿Acaso dijo usted esta noche?"

"Así es." Respondió ella con la voz muy calmada. "Sé que todos están un poco sorprendidos por lo repentino del asunto."

"Ni que lo diga." Dijo Genryu. "¡Es una locura! ¿Recién hemos llegado y ya quiere atacar? No tenemos ni siquiera un plan, y es más que seguro de que todos los de esa isla estén en alerta máxima, y preparados a disparar primero y preguntar después."

"Tienes toda la razón." Le contesto ella.

"Pero igual lo vamos a hacer ¿No es así?"

"Así es".

"Bien." Dijo él con una sonrisa. "No puedo esperar por entrar en acción otra vez."

Sylia asintió y luego se dirigió a los demás. "Se que muchos de ustedes tienen sus dudas y preocupaciones y es muy probable de que estén en lo correcto, pero una oportunidad se nos ha presentado hoy y si no la aprovechamos ahora después será muy tarde para salvar al Sub-comandante Fuyutsuki."

"No te preocupes Sylia." Linna le contesto. "Estamos contigo."

"Siempre y cuando nos pagues bien." Dijo Priss.

"Eso si, estoy esperando un bono muy especial por lo que me estas haciendo hacer." Nene dijo con una sonrisa aunque era obvio que estaba un poco nerviosa.

"No se preocupe por nosotros." Dijo Kensuke. "Siempre estamos listos para cualquier misión, no es así Touji?"

"Así es Kensuke" Dijo el muchacho mientras ambos jóvenes mostraban su pulgar levantado en señal de su consentimiento.

"Vaya, pero que valiente son esos muchachos" Rouge no pudo evitar decir al ver el coraje que mostraba los muchachos.

"No es nada de eso" Le dijo Linna al oído. "En unos momentos va a descubrir cual es la verdadera razón".

"Bueno, como veo que ustedes de acuerdo. Es mejor que continuemos." Con esto Sylia siguió mostrando imágenes esta vez de personas, que de inmediato captaron la atención mayormente del público masculino de la sala.

"Como mucho de ustedes saben." Sylia se aclaro la garganta y luego continuó. "Las DELMO son la principal fuerza defensora del planeta Neptuno, el color de sus uniformes muestra su especialización, negro, son las de menor rango encargadas del funcionamiento adecuado del lugar, las de color azul son las pilotos de las diversas naves y también se encargan de la seguridad del lugar, las de color dorado, aunque pocas por el momento, pertenecen a un equipo elite especial encargado de seguridad, expertas en todo tipo de ataques, las de color blanco son las líderes de los distintos escuadrones, por lo que sabemos son muy hábiles en diversos campos como computación, artes marciales y uso de armas... Kensuke podrías guardar esa cámara por favor".

"Lo siento" Dijo el muchacho un poco entristecido por tener que hacerlo.

"Vaya." Esa fue la única palabra que pudo decir Rouge en estos momentos, sorprendida de ver a las supuestas 'soldados', las cosas ciertamente habían cambiado desde sus días, ella había vivido en una época bastante liberal y ella tenía que admitir que a veces usaba una ropa bastante reveladoras, pero al ver la clase de uniformes que esas muchachas llevaban, ahora realmente entendía el porque de la emoción de los chicos que ahora se encontraban babeando por las imágenes que les mostraban...

"La persona que esta aquí" Prosiguió Sylia mientras mostraba la foto de una hermosa mujer de cabello plateado pero con una mirada penetrante. "Esta es la mujer mas peligrosa de todo el planeta con la excepción de las Senshi, la comandante Neena Hagen".

"¡Kawaii!" Exclamo Kensuke un poco asombrado por la imagen de la mujer. "Es bastante hermosa toda una Femme Fatale"

"No podías estar más en lo cierto" Dijo la mujer de cabello platinado. "Esta mujer es la responsable por las cientos de desapariciones de este y varios planetas, por lo que hemos podido averiguar, ella trabajaba junto a su hermano Ledwig Hagen en varios proyectos para el imperio hace algunos años hasta que algo paso. Su hermano murió en un extraño accidente en Mercurio, aparentemente, el había ido ahí para investigar la situación del planeta tras el desastre, fue por este incidente que no se permite más que ninguna nave vaya allá."

"Después de esto, ella fue transferida aquí, donde tomo control de los Pacificadores, su fuerte carácter y capacidad de mando le ganaron reconocimiento de parte de las Senshi que le dieron permiso para formar a las DELMO y seguir con las investigaciones de su hermano."

"¿Qué clases de investigaciones?" Pregunto Genryu seguro de que no le gustaría su respuesta. "¿Tiene eso que ver con el arma de la que estabas hablando?"

"No lo sabemos con certeza, son el secreto mejor guardado de este planeta." Dijo ella. "Pero aparentemente uno de ellos fue recientemente completado, y solo las Senshi y las Delmo de alto rango han sido capaces de verlo, lo único que sabemos es que lleva por nombre clave 'Ortanato'."

"¿Ortanato?" Jet dijo con sorpresa.

"Sabe algo de eso Jet" Pregunto Genryu al ver la cara de su antiguo amigo.

"No estoy muy seguro." Dijo él mientras tocaba su barba. "Pero recuerdo una vez que escuche hablar a mis superiores del descubrimiento de un nuevo mineral en Titán, y que fue bautizado como 'Orfanato', pero supuestamente las muestras halladas mostraban que el tal mineral carecía de valor y su investigación fue abandonada."

"Eso es extraño." Dijo Linna. "En todas nuestras búsquedas jamás nos topamos con que algo así haya sido descubierto en la luna de Titán menos aun que ALGO haya sido descubierto ahí."

"¿Lo que significa...?" Dijo Genryu.

"Que por alguna razón muy importante, el Imperio decidió borrar cualquier información sobre ello." Termino Jet.

Sylia asintió. "Muchas gracias por su información Sr. Black, nos va a ser muy útil."

"No es nada" Dijo él. "Y por favor solo llámeme Jet, no me gustan mucho los formalismos."

Asintiendo, Sylia Stingray toco de nuevo otro botón, y la pantalla desaparecía por donde vino mientras las luces volvían y luego ella se dirigió de nuevo al grupo. "Eso es todo por el momento, en dos horas se les dará una información bien detallada de lo que se va a hacer, hasta entonces pueden disfrutar de nuestras instalaciones y descansar de su viaje."

Todos asintieron y comenzaron a salir del cuarto.

"Vamos Rouge-chan, Nuku-Nuku te va a presentar a Nygel-sane, el doctor de Nuku-Nuku." Dijo con una sonrisa la joven chica androide mientras tomaba la mano de la mujer.

"Un poco más lento amiga, voy detrás de ti." Contesto Rouge mientras salía del cuarto junto con los demás tratando de mantener el ritmo de su amiga cibernética.

"Una cosa más Genryu" Sylia dijo antes de que este saliera de su sala de reuniones.

"¿Si?" Pregunto él un poco confundido.

"Ten cuidado cuando te enfrentes a las Delmo" Le advirtió ella. "Ellas son bastantes diferente al resto de los Pacificadores del Cristal Millenium, ellas son peligrosas."

Genryu le dio una sonrisa y le mostró su puño con su pulgar para arriba. "No se preocupe, Genryu Saotome nunca pierde".

Ella lo observaba salir con una pequeña sonrisa tratando de ocultar la gran preocupación en su interior, no solo por él sino por su equipo y sus amigas, esta sería la primera vez que se enfrenten a la bestia directamente, solo esperaba que estuvieran preparados para ello y lo horrores que le seguirían.

Reiko tomaba otro sorbo de su refresco mientras seguía paseando por las calles de la ciudad de Las Sirenas, no era su primera vez en esa ciudad, ella había venido aquí antes de vacaciones con sus padres y su tía Tomoyo.

Una pequeña sonrisa melancólica asomaba por su rostro al pensar en ellos. Ella sabía que sus padres deben estar esperando su regreso a casa y que su tía Tomoyo estaba ahora pensando en una excusa para justificar su retraso en llegar a la tierra, conociéndola ella tenía por lo menos una semana antes de que a su tía se le acabaran las excusas o a su madre su paciencia.

Eso le daba suficiente tiempo para vivir la aventura que ella tanto deseaba.

Ahora, si tan solo pudiera encontrarla.

Era en estos momentos que sentía mas envidia de su madre, ella no tenía que buscar aventuras, eran estas las que la encontraban a ella, la búsqueda de las cartas Clow, el juicio del Guardián Yue, la batalla en Hong Kong, las pruebas de Elios y la captura de la última carta Clow. Su madre si que tuvo grandes aventuras junto con sus amigos.

Esto la hizo detenerse a pensar, y por primera vez Reiko se dio cuenta de la gran verdad que la rodeaba. Ella estaba sola.

No podía creer que ella se había olvidado de tan obvio detalle, ¿Cómo se supone que ella iba a combatir las fuerzas del mal sin amigos? Ella sabía que incluso las Senshi tenían problemas cuando se enfrentaban a un enemigo poderoso solas, así que era obvio que ella iba a necesitar ayuda. Ni sus padres, ni su tía Tomoyo eran una opción por el momento, sus amigas de la escuela no estaban interesadas en salvar al mundo, tampoco tenía guardianes mágicos como su mamá, todo lo que ella tenía eran las cartas Sakura.

Sus ojos se agrandaron más al darse cuenta de algo más, ella hasta ahora no había probado sus poderes, Reiko no podía creer que ella se haya olvidado de eso también, ella ni siquiera había intentado usar el báculo mágico de su mamá, ella rápidamente puso sus manos en su pecho y con alivio sintió el collar de su madre que aun se encontraba colgado a su cuello. Luego Reiko busco en su mochila y saco las cartas sakura, y las contemplo por unos momentos.

"Tengo que buscar un lugar para entrenar." Se dijo a si misma.

Viendo por todos lados ella comprendió que eso no iba a se fácil, la isla de Las Sirenas era una de las mas visitada por los turistas, así que sería muy difícil encontrar un lugar solitario y alejado donde practicar sin el peligro de que alguien pudiera descubrirla, una chica mágica debía mantener su identidad secreta después de todo.

Dando un suspiro de resignación, ella decidió que seria mejor esperar unas cuantas horas para que anochezca, así ella podría practicar en las playas que generalmente estaban desiertas a esa horas, también le daba tiempo para explorar los increíbles lugares y tiendas de la isla.

Con su plan hecho, ella continuó caminando, esperando ansiosa por la noche para poder usar su magia, una sonrisa pasaba por sus labios mientras se imaginaba volando por los cielos en el báculo mágico de su madre gracias a la carta del 'vuelo', no importaba lo que le dijeran después sus padres, aun si no encontraba una aventura, esta sería una noche que recordaría toda su vida.

Unas horas después.

"Vamos muevan esas naves" Ordenaba una Delmo azul. "Ella esta por llegar en cualquier momento"

La gran fortaleza-Palacio de Triton estaba más ajetreada que de costumbre, numerosos escuadrones se movilizaban alrededor de la pista de aterrizaje. La razón para tales acciones se debía a la llegada sorpresa de una de las Inner Senshi, esta visita era más que increíble debido a lo raro que era, las Inner generalmente se quedaban en la tierra como guardianes de la Neo-Reina Serenity, y generalmente solo se encargaban de asuntos en sus respectivos planetas y raramente iban a los planetas de las Outers en asuntos oficiales.

En el centro del mando de la Fortaleza, las diversas operadoras controlaban todas las acciones del lugar, coordinando todo perfectamente, ellas solo habían sido avisadas hace unos veinte minutos por sus superiores las Outers Senshi, un poco antes de que ellas partieran del lugar en un rumbo solo conocido por la comandante Hagen, la cual ya había hecho todos los arreglos para la vista que ella planeaba.

"Nene ¿Cuál es el informe del clima?" Pregunto la teniente Blanco encargada del lugar.

"Todo bien," Contesto la chica de cabello corto. "Hay algunas acumulaciones grandes de nubes, pero ninguna amenaza de tormenta."

"Bien" Contesto ella. "Llama al centro de control del clima, e infórmeles que no queremos ninguna esta noche."

"Enseguida teniente Blanco." Contesto Nene.

Mientras Nene preparaba su llamada, ella se puso en pensar en todo lo que estaba pasando, ella se había reportado a su puesto de trabajo hace una hora tal como lo había hecho por los últimos dos meses, aunque todavía no se podía acostumbrar a los uniformes, ella ya era reconocida por sus superiores por la calidad de su trabajo, y ella estaba lista para otro día de trabajo habitual, fue por eso que fue grande su sorpresa al enterarse de la gran visita de hoy.

'Rayos, ¿Por qué precisamente hoy?' Pensaba Nene, de todos los días que ellas tenían la visita de otra Senshi, justamente tenía que tocar su visita el día que ellas ejecutaban su plan.

Dando otro suspiro de resignación, Nene se dio cuenta de que ya nada podría hacer para evitar lo que sucedería esta noche, aunque aun tenía que informar a Sylia y Genryu de lo que estaba pasando a la primera oportunidad, por suerte la llamada que le ordenaron le daba la oportunidad que necesitaba. Y fue mientras lo hacía que Nene noto algo que apareció en su radar.

"Teniente, mi radar esta captando una pequeña nave que se acerca por el sector 235."

"Identificación."

Después de ver la información en su pantalla, ella le paso los datos a su superior "Nombre código Hermes supremus, es la nave que esperábamos madame"

"Bien" Asintió la Teniente Blanco y luego se dirigió al resto del personal. "Informen al piloto donde debe aterrizar y avisen al personal en la pista que se prepare"

"Si, madame" Exclamaron todas a las vez.

Una vez dada la orden, todo el personal de la base se preparaba para la llegada de la nave y su distinguida visitante. A diferencia de otros escuadrones, el escuadrón de las Delmos era diferente en muchos sentidos, su entrenamiento había sido supervisado por las mismas Outers Senshi que deseaban hacer de ellas un ejercito lo más parecido al que tenían en el Silver Millenium, sus esfuerzos habían logrado frutos, todas ellas no solo eran leales a la Neo-Reina si no también poseían la misma capacidad de sus antiguas tropas si no es que más, la lealtad que sentían hacía las Sailors casi se podía confundir con devoción especialmente en las Delmos Doradas.

Ahora, mientras la pequeña nave de la Senshi aterrizaba en la pista, cada Delmo ocupaba su lugar preasignado, cada una con su arma de combate en posición de saludo. La nave aterrizo sin problemas y una fila de Delmos negros se formo a un lado de su puerta de salida. Un momento después su puerta se abrió y la Sailor Senshi del planeta Mercurio salió de ella.

Poco había cambiado en ella, en el transcurso de los años, su figura aun permanecía juvenil, solo su cara había cambiado, reflejando la madurez y experiencia que poseía como también su inteligencia, pero sus ojos aun tenían la misma mirada llena de hambre de conocimiento que la caracterizaban. Esa mirada la tenía bien presente ahora. Su mente estaba llena de preguntas sin respuesta que solo un hombre podía aclarar.

"Bienvenida sea a Neptuno, Lady Mercury." La saludo la comandante Hagen con una reverencia. "Es un honor tenerla de vuelta en nuestras instalaciones."

"Muchas gracias Comandante Hagen." Contesto ella con una sonrisa y luego su mirada parecía estar buscando algo o mejor dicho a alguien. "Disculpe Comandante Hagen, ¿Dónde están Sailor Neptune y Sailor Uranus, pensé que ellas serían las que recibirían?"

"Mis disculpas Sailor Mercury." Contesto la comandante. "Pero al parecer algo ocurrió de improvisto y ambas se fueron a la Tierra hace una horas, dejándome a cargo de su total seguridad."

"No sabía eso" Dijo Sailor Mercury y luego pregunto con algo de preocupación. "¿Acaso ha ocurrido algo en Tokio de cristal?"

"No se preocupes Lady Mercury." La comandante Hagen respondió. "No ha ocurrido nada y estoy segura de que ambas le informaron de todo mas tarde."

"Ya veo." Contesto ella al parecer entendiendo, pero cualquiera podía ver que tenía ciertas duda. "Bueno, creo que después hablare con la Neo-Reina sobre ello, por ahora lo único que me interesa es hablar con el prisionero que tiene ustedes aquí."

La mujer de cabello platinado asintió. "Ya nos informaron de todo lady Mercury, y ya se han hecho todos los arreglos necesarios, si usted pasa por acá podremos ir de inmediato a conversar con él."

La joven Senshi asintió y se fue caminando con la comandante y un par de Delmos de seguridad, a pesar de que todo estaba saliendo bien hasta ahora, ella no dejaba de pensar de que había algo malo en el lugar en el que se encontraba, ella aun no podía indicar que era pero algo le decía de que no le iba a gustar la respuesta.