Scarlet

Autor: Lord kal-el
Formato HTML de Hukarovi Yanoki

Aclaración: Aclaración: Ranma 1/2 y todos sus personajes pertenecen a Rumiko Takahashi, yo solo los estoy usando por diversión.


Capitulo 1


Chotto hen
(Un chico extraño)

"¿¿¿Prometido???"

Las tres hermanas Tendo no podían haber estado más sorprendidas. Cuando su padre las llamo a todas que se reunieran en el comedor, ellas esperaban escuchar una gran noticia pero jamás el pensamiento de un prometido cruzo pos sus cabezas.

"Así es" Continuo su padre. "Un viejo amigo y yo hicimos un juramento hace muchos años de unir a nuestras dos familias, él ha estado entrenando a su hijo desde que nació y recientemente acaban de regresar de un viaje a China"

"China, vaya que interesante" Dijo Nabiki.

"¿Que tiene de interesante?" Dijo Akane, furiosa por lo que les había dicho su padre. "De seguro se trata de un chico tan pervertido como los que hay en la escuela."

Kasumi solo estaba sentada ahí escuchando a su padre y a sus hermanas, de todas las cosas que ella podía esperar de su padre, el saber que él había comprometido no solo a ella, si no a todas sus hermanas con un completo extraño las superaba a todas. Pero por ahora, ella necesitaba saber más sobre él, no estaba segura por que, ella solo... quería saber.

"Disculpe, padre. Pero ¿Cómo es Ranma? ¿Ha tenido oportunidad de conocerlo?"

Soun Tendo miro a su hija mayor con sorpresa por esa muestra de curiosidad. "Bueno, a decir verdad, yo nunca lo he conocido."

"¡¿Qué?!" La voz de las hermanas Tendo se podía escuchar por todo un manzano.

"Así es" respondió el patriarca Tendo tranquilamente. "La última vez que vi a Genma fue hace casi dieciséis años, nosotros nos separamos después de que hicimos el juramento de unir nuestras escuelas."

Las tres hermanas miraron a su padre incrédulamente, no pudiendo creer como su padre pudo haber hecho algo tan estúpido.

Kasumi decidió hablar otra vez. "Solo espero de que no sea muy joven, los chicos jóvenes son muy... jóvenes."

"Así que la que se case con este Ranma heredara el Dojo ¿No es así?" Dijo Nabiki. "¿Que te parece eso Akane? Una de nosotras se va a casar."

"¡¿Estas bromeando Nabiki?!" Dijo Akane a punto de explotar. "¿Qué clase de loca promesa es esta? No puedo ser que creas que vamos a seguir con esa tontería papá".

"Yo en verdad lo espero" Contesto Soun. "Las tradiciones de nuestra escuela deben pasarse dentro de la familia. Tú, como la única de nuestra familia que seriamente ha estudiado el arte, debería tomar en consideración la obligación de continuar la..."

"¡¡¡De ninguna manera!!!" Contesto furiosa Akane. "No puedo creer que tu hayas hecho algo así sin consultarnos a nosotras primero."

"Vamos cálmate Akane". Le dijo Nabiki. "Me pregunto si este Ranma será guapo".

"¿A quien le importa?" Dijo Akane. "Seguro debe ser tan pervertido como todos los chicos."

Nabiki miro a su hermana menor, ella sabía el porque de su reacción con la idea de tener un prometido, pero pensaba que talvez sería bueno para ella que le arreglaran un matrimonio con un completo extraño, eso sería probablemente la mejor oportunidad que tendría para casarse.

Su vista cambio después a la de su otra hermana, Kasumi había estado muy callada por los últimos momentos, aunque eso era muy normal, había algo muy extraño en ella esta vez, ella no estaba sonriendo. Siempre desde que ella tenía memoria, Kasumi siempre había estado sonriendo, era una variable que nunca cambiaba, aunque no estaba triste, Nabiki sabía que ella estaba bastante sumergida en sus pensamientos. Un lugar donde ningún mortal había ido jamás.

"Kasumi ¿Estas bien?"

"Eehh, oh lo siento Nabiki" Kasumi dijo con su sonrisa volviendo a sus labios

Nabiki dio a su hermana una esas miradas de no-me-estás-engañando pero pudo ver que no le sacaría nada a ella, de todas las personas en el mundo a las que ella podría sacar la verdad su hermana era la única que lograba ocultarla.

Por su parte Kasumi estaba bastante sumida en sus pensamientos, todavía preguntándose sobre la anciana que conoció, ¿Acaso habrá sido una adivina que sabía lo que iba a pasar? Ella deshecho a un lado ese pensamiento, por lo que ella sabía no existía tal cosa como la magia, pero si...

[Knock, knock]

El sonido de la puerta capto la atención de todos, Kasumi rápidamente se levanto. "Voy a ir a ver quien es"

Cuando llego a la puerta, Kasumi no pudo evitar escuchar una conmoción afuera como dos personas discutiendo, abriendo la puerta, ella no pudo ocultar su sorpresa. "¡Oh dios!"

Kasumi no sabía que esperar cuando abrió la puerta pero ver a un panda entrar a su casa cargando a una persona pelirroja, y la llevada hasta el comedor donde estaba el resto de su familia que también se sorprendió de los extraños visitantes.

"¿Pero que...?" Fue lo único que pudo decir Soun al ver al panda gigante.

"No me digas que este es tu amigo, papá" Dijo Nabiki mientras veía con asombro al panda.

"Cuidado Nabiki, puede ser peligroso". Dijo su Hermana menor aunque no sabía exactamente que hacer si en verdad se trataba de un animal peligroso, Pandas se supone que son inofensivos, ¿No es así?

"Ya oíste papá", Otra voz respondió. "Los estas asustando, ¡Bájame enseguida!"

La sorpresa de todos se agrando cando el panda bajo a la persona que tenía en su hombro, pero todavía la agarraba fuertemente en sus garras. Soun miro a la persona pelirroja por un momento antes de decir. "¿Eres tú...?

La figura hablo con un poco de vergüenza. "Soy Ranma Saotome, perdón por todo esto".

Kasumi continúo mirando, luego lentamente empezó a hablar. "Oh... dios! Él luce... exótico".

"Ni que lo digas hermana." Dijo Nabiki. "Aunque es bastante guapo."

"¿Huh?" La persona pelirroja las miro en confusión y Kasumi descubrió que tenía unos hermosos ojos azules. Ranma no era más alto que ella, pero había algo más que ella no podía identificar, algo extraño acerca de él.

"¡Por fin!" Soun ya estaba en lágrimas mientras daba a Ranma un gran abrazo de bienvenida. "¡Tú no tienes idea de cuanto he esperado este momento...!".

Todas las hermanas Tendo notaron el cambio en la actitud de su padre. El patriarca Tendo estaba tenso mientras tenía a Ranma en su abrazo. Sus manos empezaban a tomar medidas como si hubiera algo que no encajara. Luego puso a Ranma adelante y lo miro con una extraña expresión. Kasumi y Nabiki se acercaron para ver porque su padre actuaba tan extrañamente y notaron algunas cosas que no notaron con anterioridad. Nabiki llevo una mano hacía donde estaba un pequeño bulto en el pecho de su 'prometido'.

"¿Huh?" Exclamo Nabiki al notar que no era un bulto lo que estaba tocando, ella lo toco varias veces antes de decirse a si misma con seguridad de que era un par de senos lo que estaba agarrando.

"Podrías dejar de hacer eso." Ranma dijo con un poco de vergüenza en su voz.

Kasumi extendió su mano para detener a Nabiki. Ella al darse cuenta de lo que su hermana le estaba señalando, se detuvo y miro a su padre. "¡Papá, pensé que dijiste que Ranma era un chico!".

"Pe-pe-pero no entiendo" Dijo Soun todavía en shock. "Genma me dijo que él había tenido un hijo."

"Oigan" La voz de Akane se hizo escuchar desde atrás. "Chico o chica, ella sigue siendo nuestra huésped".

Escuchando la voz de su hermana, Kasumi se dio cuenta de que ella y dio un paso adelante y se presento con ella. "Konichiwa, mi nombre es Kasumi. Te pido disculpas por el comportamiento de mi padre y hermana. ¿Espero que no te haya molestado?".

"Uhm... no, no esta bien." Dijo ella. "Ya esperaba esa reacción".

Fue en ese momento que Akane se adelanto también y le extendió. "Hola me llamo Akane. Tú practicas Kendo, ¿No es así?"

Ranma pensó un poco antes de contestar. "Si, se puede decir que si, entre otras cosas".

"Bien" dijo ella. "Nosotras podemos practicar un poco si lo deseas".

"Pero..." Ranma quería decir algo pero Akane le tomo de la mano y la guió por la casa hasta donde estaba el Dojo.

Kasumi las miro irse con extrañeza, ella sabía que algo estaba faltando, pero no sabía que. Y por un instante ella se sintió decepcionada de que Ranma haya sido una mujer, aunque no sabía muy bien porque. Ella estaba a punto de acompañarlas cuando de repente sintió algo jalar de su vestido, dándose la vuelta, ella vio que se trataba del panda que Ranma había traído.

"Si, ¿Qué desea señor panda?" Kasumi pregunto con educación.

El panda se puso de pie y de la nada saco un cartel con algo escrito en el. [¿Me podrías dar un poco de agua caliente por favor?]

"Oh dios, pero que bien educado esta señor panda. Espere un momento por favor, enseguida le traigo su agua caliente". Contesto Kasumi mineras salía de la habitación dejando a su padre todavía en shock y a Nabiki preguntándose que rayos estaba pasando.

* * *

En el Dojo de la familia Tendo, ambos combatientes se preparaban para pelear, aunque Akane parecía la única dispuesta a pelear ya que era la única que estaba en una estancia de lucha.

"¿Estás lista?" Pregunto Akane preocupada por la razón por la cual Ranma no se estaba alistando.

Ranma asintió con la cabeza.

"Bueno, lista o no, aquí voy" Con esto Akane se lanzo adelante lanzando una serie de puños y patadas, los cuales, para su sorpresa, Ranma evadió fácilmente.

'Vaya, es muy buena. Tiempo de ponerse seria' Akane pensó, y empezó a aumentar la velocidad de sus ataques, pero Ranma los siguió evadiendo fácilmente, y más aun ella estaba sonriendo. "Vamos Ranma, pelea en serio".

Akane se lanzo adelante creyendo que podría darle, grande fue su sorpresa cuando vio que la pelirroja salto encima de ella y se colocaba detrás de ella. Akane se dio vuelta rápidamente, pero no pudo hacer nada al ver que el dedo de Ranma tocaba su frente mientras sonreía. "¿En verdad quieres que te ataque?"

Akane se dio por vencida al ver las grandes habilidades de su oponente, sonriendo de vuelta ella dijo. "¿Amigas?"

"Seguro ¿Por qué no?"

"Wow, en verdad eres buena" Dijo Akane mientras tomaba una toalla para secarse el sudor. "Me alegra de que no seas un chico".

"¿Lo estas?" La expresión en la cara de Ranma era de nerviosismo.

"Claro". Respondió Akane mientras salía del dojo y pasaba a Kasumi. "En verdad odiaría perder contra un chico".

"Oh" Ranma parecía decepcionado. "Eso es genial".

Luego noto que Kasumi estaba ahí en la puerta del dojo y que se acercaba a él con unas toallas en la mano.

"Ranma, si gustas puedes tomar un baño, por el estado de tus ropas puedo ver que has tenido un largo viaje y debes estar ansiosa de tomar uno."

"De hecho, si gracias Kasumi" Dijo ella mientras tomaba las toallas de Kasumi. "No sabes cuanto lo estaba deseando".

Señalándole donde estaba el baño, Kasumi vio a la pelirroja irse, aunque ella no pudo dejar de notar la tristeza en su cara, por lo que había alcanzado a ver de la pelea, Kasumi podía decir que ella era muy buena. Su tristeza se noto cuando su hermana hablo acerca de los chicos.

Sintiendo que había alguien detrás de ella, Kasumi se dio la vuelta y vio que era su hermana Nabiki.

"Kasumi de casualidad sabes quien es ese hombre que esta hablando con papá" Pregunto ella.

"No lo sé Nabiki-chan" Kasumi dijo con su calmada voz. "Él apareció poco después que le di al señor Panda el agua caliente que quería."

"Que extraño" Nabiki dijo mientras replicaba a la casa junto a su hermana, ambas notaron rápidamente que ambos hombres estaban llorando a cantaros. "¿Papá?"

Ambos rápidamente notaron a las dos damas en la sala, su padre se dispuso a hablarles. "Nabiki, Kasumi, permítanme presentarles a mi querido amigo Saotome Genma. Saotome-kun, mis hijas Kasumi y Nabiki".

"Mucho gusto" Dijo el otro hombre que estaba vestido con un Gi blanco.

Kasumi notó que algo faltaba en la sala. "Disculpe padre, Saotome-kun. ¿De casualidad saben que paso con el panda que esta aquí?".

"Ese en realidad era yo". Dijo Genma.

"¿Disculpe?" Pregunto Nabiki, visiblemente confusa por lo que había dicho "¿Acaso dijo que usted era ese Panda?"

"Si, yo estaba bajo una maldición que nos impidió que mi hijo y yo nos presentáramos adecuadamente en su casa." Dijo Él.

"¿Su hijo?" Dijo Kasumi. "¿Quiere decir que...?"

"¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡AAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHH!!!!!!!!!!"

Todos los que estaban ahí fueron sorprendidos por el repentino grito, y estuvieron más sorprendidos cuando vieron entrar a la mas joven de a las hermanas Tendo y alzar la mesa mientras su padre y su invitado alzaban sus tazas de té.

"Akane ¿Qué paso?" Pregunto Kasumi.

"Hay un pervertido en el baño" Dijo ella mientras trataba de llevar la mesa hasta allá. "Me vio desnuda".

"Entonces porque no lo atacaste ahí" Pregunto Nabiki conociendo el temperamento de su hermana.

Akane parecía un poco avergonzada de contestar. "Es... es porque me asuste ¿Está bien?".

"Disculpen" Una voz masculina interrumpió la escena, al darse la vuelta Kasumi pudo ver a uno de los chicos mas guapos que había visto, él no era muy alto pero tenía un aspecto rudo pero gentil a la vez, su pelo lo llevaba atado en una pequeña trenza.

Kasumi siguió viéndolo y noto que llevaba la misma ropa que Ranma tenía puesta, mirando más atentamente ella también noto que sus ojos eran azules como los de Ranma.

Esto no paso desapercibido, ya que Nabiki también noto la gran atención que su hermana le estaba dando a ese extraño, en toda su vida esta era la primera vez que ella notaba a su hermana fijar sus ojos en alguien del otro sexo, ni siquiera el doctor Tofu había recibido esa clase de mirada.

Finalmente, Kasumi se permitió hablar. "Oh dios. ¿Otro huésped? ¿Disculpa quien eres?"

"Mi nombre es Ranma Saotome" Contesto el joven con la misma vergüenza de la pelirroja. "Perdón por todo esto".

Por un momento lo único que hubo fue silencio, y el sonido de una mesa cayendo de las manos de Akane Tendo.

* * *

Treinta minutos después, toda la familia Tendo había escuchado el increíble relato de los visitantes, con todo y lujo de detalles, las tres hermanas Tendo lucían atónitas, bueno Nabiki lucía atónita, Akane lucía enojada, y Kasumi lucía... bueno ella lucía como Kasumi.

Soun se mantuvo reflexivo por un momento, finalmente hablo. "En verdad han pasado por las cosa mas terribles." Luego se dirigió a Genma Saotome. "Pero las buenas noticias es que todavía podemos cumplir nuestro juramento, ¿No es así Saotome?"

"Así es Tendo" Asintió Genma.

Soun entonces le hablo a Ranma. "Bueno hijo, aquí te presento a mis hijas: Kasumi, tiene diecinueve años, Nabiki, de diecisiete, y Akane, de 16, escoge a una, ella será tu prometida."

"¿¿¿QUÉ???"

Ranma-chan, él era chica gracias a una de las demostraciones de su padre, casi no podía creer lo que estaba escuchando, mirando a todas las chicas Tendo, el vio también vio la sorpresa en sus caras. "P-pero... pero..."

"No puedo creer que quieras que continuamos con esto papá", protesto Akane. "Que no ves que es un pervertido".

"¡¿Qué?!" Ranma grito. "Si yo no te he hecho nada".

"Tú me miraste desnuda en el baño".

"Tú fuiste la que entro mientras lo estaba usando"

Akane se puso roja. "Era por que creí que eras una chica."

"Padre, como soy la mayor, creo que yo soy la que debo aceptar el compromiso."

De inmediato todos los ojos se posaron en Kasumi.

"¿Q-que has dicho hermana?" Dijo Nabiki, visiblemente sorprendida. "Pero pensé que no te gustaban los chicos jóvenes."

Antes de siquiera contestar, su padre le dio un gran abrazo enorme a su hija, su cara envuelta en lagrimas. "Oh, hija mía. Tú pones a tú padre tan orgulloso, si tan solo tu madre pudiera verte".

Akane no podía creer lo que estaba escuchando. "¡Kasumi, como puedes aceptar estar comprometido con ese... ese... ese hentai!"

"¡Oye!" Protesto Ranma, luego girando su vista de nuevo a Kasumi, ella no podía creerlo, ¿Esa chica quería casarse con él a pesar de conocer su maldición? Él apenas si la conocía. "¿Estas segura de que quieres hacer esto?"

Kasumi asintió con la cabeza. Sus mejillas mostraban un ligero color rojo.

"¡Pero Kasumi!" protesto de nuevo su hermana menor. "Tú apenas si lo conoces, el es tan pervertido como los demás chicos".

"¡Ya deja de llamarme pervertido!" Protesto ranma. "¡Yo no te he hecho nada!"

"¡Tú me espiaste en el baño!" Grito Akane.

"Como si alguien quisiera verte a ti"

"¿Que has dicho?"

"Bueno" Dijo ella. "En esta forma yo tengo mejor cuerpo que..."

[¡¡¡Bammmmmm!!!]

Ranma nunca termino esa sentencia, ya que fue aplastado por la mesa para tomar té.

* * *

Varias horas después.

Ranma abrió lentamente sus ojos, lo primero que noto fue que estaba en una cama, era muy confortable, él no podía recordar la última vez que él durmió en una cama así, siempre durmiendo al aire libre con solo el suelo como cama. Lo segundo que noto fue que era hombre de nuevo y por último que su cabeza estaba vendada y que le dolía la cabeza.

"Esa marimacho si que pega fuerte". Él dijo en voz alta.

"Es mejor que no lo digas de nuevo, o enfurecerás mas a Akane".

Abriendo los ojos de repente, Ranma miro de donde venia esa voz, su mirada se fijo en la joven que estaba al lado de la cama, a pesar de estar un poco mareado, pudo ver que se trataba de Kasumi, la joven a la que supuestamente él estaba ahora comprometido.

Él la estudio por unos momentos, cuando él llego, todo pasaba tan rápido que no tuvo tiempo de observarla detenidamente. Él ahora podía ver que ella era bastante bonita, tenía unos hermosos ojos marrones que reflejaban su madurez, su largo cabello castaño estaba atado en una pequeña cola de caballo en su punta.

Pero lo más increíble en ella, era esa gran aura de serenidad alrededor de ella, Ranma jamás había visto a una persona con el corazón tan calmado, ni siquiera los monjes del Tibet tenían tal aura, claro esta que cuando los conoció su padre les estaba robando su comida. Pero aun así, él no pudo evitar ver lo hermosa que era.

"¿Te sientes mejor?" Pregunto Kasumi.

"Que... como... este" Ranma fue sacado de sus pensamientos por su voz y no sabía que decir, finalmente pudo aclarar su mente y responder. "Eh, si estoy bien."

"Me alegro" Dijo ella. "Ya estaba preocupándome un poco al ver que no despertabas, tendrás que perdonar a mi hermana, ella a veces se comporta como una violenta maniaca".

"No tienes que decirlo." Ambos rieron por este comentario. Cuando pararon de reír ambos se miraron a los ojos, en un momento que parecía durar eternamente.

Poniéndose roja en sus mejillas, Kasumi aparto la mirada. "Disculpa creo que tienes que descansar"

Volviendo a la realidad, Ranma vio que la había puesto incomoda. "Que... oh no espera, estoy bien, en serio".

Para demostrarlo, Ranma salto de la cama y empezó a hacer ejercicio por el cuarto, sorprendiendo a la muchacho de cabello café, que mostró una pequeña sonrisa por el comportamiento de su nuevo prometido.

Al ver que ya ella estaba mas relajada, Ranma dejo de moverse por todos lados, y miro la habitación en la que se encontraba, esta era espaciosa, aunque no contenía muchas cosas, el pudo ver un librero lleno de libros de medicina, una pequeño ropero lleno de Kimonos, aunque lo que mas le sorprendió fue ver lo limpia que estaba, a pesar de haber pocas cosas todo estaba ordenado y en su lugar. Alguien había puesto mucho cuidado en los detalles.

"Este es mi cuarto" Dijo Kasumi. "Te trajeron aquí por que aun no había arreglado el cuarto para huéspedes, espero que no te moleste."

"Uhmm, no, no, esta bien" Contesto Ranma todavía sorprendido al estar en el cuarto de una chica. Viendo que podía molestarla él decidió ir a su cuarto "Bueno, creo que será mejor que me vaya a mi cuarto entonces."

Kasumi asintió. "Tú habitación esta al final de pasillo, al lado el baño, espero que no te moleste".

"Eh, no, no, mas bien creo que es mejor así" Contesto el un poco apenado.

Por un instante ellos intercambiaron miradas nuevamente, ninguno sabiendo exactamente que decir.

"Bueno, creo que es mejor que me vaya" Dijo finalmente él.

"Ya lo dijiste" Le corrigió Kasumi.

Ranma se puso rojo de vergüenza. "Jejejeje, perdón por eso".

Sin decir mas el salio del cuarto, Kasumi no pudo evitar sonreír por lo que había pasado, en verdad él era alguien especial.

* * *

Akane Tendo estaba molesta. Muy molesta

Primero había sido su padre con esa noticia del compromiso del que ella no sabía nada, luego ese extraño chico vino y la venció tan fácilmente que ella no podía creerlo. Y lo que la molestaba en verdad es que lo haya un chico, de todas las cosas.

Ella sentía un poco de pena por el doctor Tofu, cuando se entere de todo el asunto del compromiso su corazón iba a estar roto completamente. Todo por culpa de Ranma.

Ella aun no podía entender porque su hermana había hecho todo esto, ¿Acaso le interesaba ese chico pervertido?

'No, por supuesto que no' Pensó ella, conocía lo suficiente a su hermana para saber que siempre ella pensaba lo mejor de las personas, de seguro era lo mismo ahora. Su hermana pensaba que él era una buena persona y no otro pervertido como Akane sabía que era.

Sin embargo otro pensamiento cruzo por su mente, por lo que ella sabia ese tal Ranma tal vez trate de aprovecharse de la buena y dulce de su hermana. No, eso no debía pasar, ella tenía que estar alerta y evitar que eso ocurra. El honor de su hermana estaba en juego.

Desde que su madre murió, Kasumi siempre había sido la que velaba siempre por su hermana y ella, ya era momento de que ellas la ayudaran también. Si ese tal Ranma intentaba algo malo, él se arrepentiría de haber escuchado el nombre Tendo.

Ella se encargaría de eso.

* * *

Ranma estaba en el techo de la casa Tendo mirando el firmamento en la noche, por suerte había una amplía ventana en su cuarto, y él pudo escabullirse sin ser detectado por su padre, él se preguntaba por cuanto tiempo ellos continuarían con todo esto.

Habían ya pasado menos de dos meses desde Jusenkyo y su vida había cambiado de una manera que nunca creyó posible. Primeros su maldición, luego esa chica que trata de matarlo, y ahora él estaba comprometido para casarse con una chica que apenas conoció hoy.

'Por lo menos ella era bonita' Pensó él.

Ranma se detuvo para pensar en lo que el había pensado, el no sabía de donde había venido eso. No era tiempo de andar pensando en chicas, pensaba, él aun era muy joven para casarse. A decir verdad, casarse nunca había estado en sus planes hasta ahora.

Lo que él no podía negar era lo sorprendido que estaba cuando ese Kasumi acepto ser su prometida, por un instante él creyó que ninguna de las chicas iba a aceptar estar comprometida con alguien con una maldición como la suya.

'¿Por qué habrá aceptado?' Él se preguntaba.

Dejando a un lado ese pensamiento, el se dirigió de nuevo a su habitación, para prepararse mañana, aunque no sabía porque, ya que era imposible que el siguiente día fuera mas extraño que este.

En la lejanía, un trueno resonó.

* * *

Mientras tanto, Kasumi aun se encontraba en su habitación preparándose para dormir, ella ya se había puesto su camisón blanco y se estaba cepillando su cabello en frente de su espejo. Su mente aún se encontraba pensando en el joven que ella había conocido hoy, ella apenas podía creer todo lo que había pasado, todo parecía sacado de uno de esos mangas que ella había leído con su madre.

"¡Vaya hermana, en verdad ese chico te gusto!"

Kasumi se sorprendió mucho al ver a su hermana Nabiki parada en la puerta de su habitación. "Oh, Nabiki no te note, perdón, pasa, ponte cómoda."

Nabiki entro a la habitación de su hermana sin quitar su mirada de ella. "Kasumi, ¿Quería preguntarte algo?"

"¿Que es Nabiki?" Pregunto su hermana en su tono calmado y alegre.

"¿Me gustaría saber por que quieres ser la prometida de Ranma? Por un momento yo pensé que podríamos pasar esa responsabilidad a Akane, como yo lo veo, ellos pueden ser una buena pareja, y además pensé que los hombres jóvenes no te entusiasmaban".

Kasumi miro a su hermana sin perder la sonrisa de sus labios, luego ella se levanto de su silla y se acerco a su tocador, respondiéndole mientras observaba una fotografía. "Lo que pasa es que alguien muy cercano me dijo que a veces nos da una oportunidad sin que nos demos cuenta y hay que saber aprovecharla".

"Uhm vaya, suena como algo que nuestra madre diría." Nabiki respondió casualmente. Sin notar la reacción de su hermana que continuaba mirando la fotografía.

"¿Ocurre algo Kasumi?" Pregunto Nabiki al darse cuenta que su hermana parecía no prestarle atención.

"No, nada. No ocurre nada hermana" Le respondió ella.

Encogiéndose de hombros, Nabiki decidió que era mejor dejar descansar a su hermana, hoy había sido un día con muchas emociones, y ella estaba casi segura de que mañana sería uno peor. Saliendo de su habitación, ella se despidió de su hermana. "Buenas noches Kasumi".

"Buenas noches Nabiki". Respondió Kasumi.

Dando una última mirada a la fotografía, Kasumi se dirigió a su cama, sus labios todavía mostraban esa sonrisa que la caracterizaba.

Y mientras ella cerraba sus ojos, ella murmuraba. "Tienes razón, hermana, eso es algo que nuestra mamá diría."

Desde su tocador, la mujer en la fotografía la miraba a ella con la misma sonrisa en sus labios que casi uno podía pensar que ella estaba sonriendo para ella.


Continuara...


Notas del autor:

Bueno, eso es todo por ahora. En el próximo episodio se comenzara a ver cuanto han cambiado las cosas. Comentarios y sugerencias son bien aceptados.