*** Tierra 0.000,0.000

Nabiki se encontró de pie sobre un promontorio rocoso, vestida con su uniforme gris, mirando abajo las olas del océano. Sus alrededores tenían como una bruma sobre ellos, y el cielo era de un pálido rosa y rojizo-anaranjado mientras el sol se posaba en el cielo occidental. Era una escena familiar para ella, pero su memoria era difusa en cuanto a por qué. La falda de su uniforme de la Academia se movía silenciosa en torno a sus piernas.

"Hola", dijo una voz detrás de ella. Ella se volteó lentamente, y la figura que vio detrás de ella apareció en un muy marcado contraste con la bruma de su entorno, de alguna manera siendo más 'real' que el resto del mundo. La cara sobre la figura era suya, y ella parpadeo al verla antes de rápidamente ver el resto de la imagen ante ella.

La otra Nabiki estaba vestida en un estilo chino, una camisa de seda suelta, de color verde claro, con lazos de madera adelante, y sueltos pantalones Gi negros con los tobillos atados fuertemente. Un sentido de músculos de atletas y figura esbelta estaba sólo parcialmente oculta debajo de las prendas de vestir. Sus pies usaban calzados parecidos a zapatilla de color negro. Su gemela se encontraba en una posición relajada, sonriendo mientas veía el sol poniente.

"¿Quién eres tú?" Preguntó Nabiki en sorpresa, aunque sus recuerdos extrañamente fragmentados de repente le dieron la respuesta un momento después de haber hecho la pregunta. Su doble bajó sus ojos que miraban el cielo a ella.

"Soy Nabiki Tendo, heredera de la Escuela de Artes Marciales de Combate Libre," La otra chica dijo, dando una ligera reverencia. "Encantada de conocerte."

"¿Qué?" Nabiki de repente se sintió confundida. Sus recuerdos eran un embrollos, y este sueño (Por ahora estaba segura de que se trataba de un sueño, pero no podía decir como lo sabía) es diferente a cualquiera que podía recordar tener. Ella había hecho algo antes de que ir a dormir, pero no sabía qué.

"Toma tu tiempo", dijo su doble y, a continuación, se sentó en el césped. "Yo supongo que estoy un poco más acostumbrada a rarezas como esta."

"El aparato de Ranma-kun," Nabiki finalmente recordó. "Me hizo algo a mí." Ella se apartó del borde del acantilado y se sentó frente a su duplicada. Un momento después, su postura se convirtió en un espejo de la versión artista marcial de sí misma.

"¿Te acuerdas?" Preguntó Marcial-Nabiki, sus manos descansando en sus rodillas mientras cruzaba las piernas.

"Yo lo active, y algo pasó." La cara de Nabiki mostró un ligero ceño fruncido mientras luchaba por recordar. "Me volví tú por un tiempo." Ella recordó cuan libre ella se había sentido, cuan gloriosamente libre. No regimentación de su vida, sin necesidad de ponerse un uniforme, su futuro sin planear hasta el último detalle, sólo ser capaz de abrazar todos los días como venían y vivir la vida a la máxima medida posible.

"Interesante", dijo su gemela, mirando con calma en torno a sus alrededores. Mientras miraba, imágenes de repente comenzaron a materializarse en el aire, fragmentos de recuerdos. Marcial-Nabiki los miró con interés, riendo de algunos, y mirando tristemente otros. Flotaban en el aire como burbujas, cada una mostrando sólo unos instantes antes de ser sustituidos por otro. Ninguna de las chicas parecía estar en control de ellos, y se hizo evidente cuando Nabiki comenzó a ver los recuerdos que ella sabía no eran suyos.

"¿Qué pasa?" Nabiki miro una imagen que parecía destacar más que muchas otras. Se volvió a mirar a la otra chica, y su duplicado frunció el ceño.

"No es nada de lo que necesites preocuparte," dijo su doble, poniéndose de pie. "Pero ese es el Valle de Jusenkyo. Un lugar que cambió mi vida, En más de una forma." Una imagen se reflejaba, como si viera una fuente de agua, apareció en otra burbuja de recuerdos. Esta imagen era de un apuesto joven vestido como su versión artista marcial, y había tristeza en su rostro.

"¿Quién es ese?" Nabiki pregunto, sus ojos brillantes mientras miró a su Duplicada. "Es guapo. ¿Es tu hermano o algo de tu mundo?" Ella se volteo para mirar la imagen por otro momento, antes de escuchar una risa amortiguada detrás de ella. Cuando se volteó, ese mismo joven que había en la burbuja de la imagen estaba allí.

"Sorpresa", dijo Nabiki-kun a una anonadada Nabiki. "He aquí el poder de Jusenkyo."

Todos los recuerdos de esa primera transformación en el maldito estanque del hombre ahogado repentinamente eran de Nabiki, y sólo pudo mirar en shock a la versión masculina de si misma. Nabiki-kun poso por un momento para Nabiki mientras ella sentía absorber los recuerdos de ese terrible momento.

Su duplicado de repente busco detrás de él y saco una humeante Tetera. Se vertió el agua sobre sí mismo y su forma perdió varios centímetros de altura, de nuevo transformándose en un duplicado de Nabiki, excepto por la ropa y el cuerpo más muscular.

"Eso fue asombroso", dijo Nabiki suavemente, sintiendo miedo de la maldición y una extraña fascinación por ella llenándola. Que sintiera tal fascinación era preocupante para ella, así que pensó en enterrarlo profundamente.

"Ha hecho mi vida más interesante", dijo la una vez de nuevo femenina versión alternativa de ella en un tono algo seco. "Hay veces que agradezco que pasó, pero ha hecho mi vida un infierno. Si no fuera por mi novio, Ranchan." Su voz de detuvo mientras ella lucía muy pensativa.

"Creo que es bastante especial, en todos los mundos." Nabiki sentía un extraño rubor cruzar sus mejillas. Ella cerro sus pensamientos con su voluntad de hierro, y el sentimiento se fue.

"Interesantes recuerdos que tienes del tuyo", dijo Marcial-Nabiki, su atención regresando a las burbujas de escenas colgando en el aire. La primera reunión de Nabiki con Ranma, sentir ese sutil toque eléctrico que abrumo su control por un corto tiempo. La chica de ropa china parpadeo y sonrió. "¡Wow! Eso fue algo más. Incluso tanto como me encanta mi Ranchan, nunca sentí tanta excitación esa vez con él."

Nabiki se sentía muy avergonzado de que su control demostró ser insuficiente durante ese incidente, la Perra de Acero derritiéndose por un breve momento en una explosión de pasiones inesperadas. Y ver tales emociones mostradas a su otro yo también era extraño.

"Me gusta, ¿Está bien?" Ella dijo, mirando a su otro yo reproducir cada uno de sus encuentros con Ranma. Sintiéndose vulnerable de los deseos que él había despertado en ella, y no gustando de la sensación, reforzó su fría desdeñosa actitud cada vez que lo veía. Burlarse de él tenía una desventaja por que se sentía muy infeliz ahora al ver sus recuerdos.

"Lo siento. No quise sermonear, pero puedo sentir cuánto parece importarte él en el fondo. ¿Por qué eres tan mala con él todo el tiempo?"

"Para mantenerlo a distancia, supongo", dijo Nabiki, sus ojos mirando algo a un millar de metros de distancia. "Es mucho mejor ser temida que ser amada, después de todo." Su voz se ahogaba de repente un poco, pero ella se recuperó rápidamente. "Ranma-kun no es nada especial. Ningún chico lo es."

"Claro", dijo su doble, clara incredulidad era evidente en su voz. En un intento de cambiar de tema a algo más fácil para hacer frente que a los hombres, dijo, "Hey, ¿Deseas probar unas cosas conmigo?" Ella pasó por una rápida secuencia de movimientos.

Para su sorpresa cuando los intentó, Nabiki fue capaz de duplicarlos exactamente, y su doble asintió. "Lo sabía."

"La lucha que tuve." Nabiki de repente recordó lo fácil que fue enfrentar a los dos rufianes, como si se hubieran estado moviendo en cámara lenta. "Tengo tus habilidades." Ella pasó por un kata, su cuerpo en movimiento con un poco más de gracia de lo que era capaz en la vida real, pero no por mucho.

"Parece que si", dijo su doble, sonriendo con un ceño en sus ojos. "He trabajado sudando sangre durante años siguiendo al Tío Genma alrededor de Asia para aprender todo esto, y tomas una siesta por un rato y puedes hacer lo mismo. Pero por lo menos mi cuerpo está en mejor forma."

"No estoy tan lejos detrás de ti", murmuró Nabiki de repente sintiéndose un poco defensiva junto a su otro yo en logros.

"No, creo que no lo estas", acepto su gemela, mirando a una de repente desnuda Nabiki, observando su cuerpo atlético formado por el entrenamiento de la Academia, y los callos en sus manos y pies. "Un par de meses de entrenamiento intensiva, y tu cuerpo debería subir a mi nivel. Las habilidades y reflejos son más de la mitad de la batalla, y ya tienes esos de mí."

Nabiki trató de poner algo de ropa sobre si misma, sintiéndose extrañamente avergonzada por su inesperada desnudez, pero todo lo que apareció fue un doble del conjunto que su otro yo llevaba, sólo que con una camisa roja. Ella se encogió sus hombros.

"Vamos a entrenar", dijo ella, subiendo sus manos en guardia. Su gemela le sonrió a ella.


Destinos Quanticos
Un fanfic de Ranma ½

Por Steven Thesken (quantumdestinies@cox.net)
Traducido por Lord Kal-el
Formato HTML por Hukarovi Yanoki

Ranma ½ y sus personajes son propiedad de Rumiko Takahashi. Esta historia se inspira en sus obras y las historias de algunos de mis compañeros autores de fanfics. Entre estos se encuentran el DB Sommer con "Shampoo ½", Jim Bader y su "Un aterrador pensamiento-aka-Nabiki ½ ", y John Biles con su serie Elseworlds. Toda C & C es aceptable.

Otros capítulos de esta historia se pueden encontrar en este sitio web, o puede e-mail al autor por los mismos:

La página principal de Destinos Quánticos.
Http://members.cox.net/quantumdestinies/

La Lista de los mundos que se repiten en este capítulo:

Lo que ha pasado antes en esta historia (o, al menos, lo que les ayudará a comprender lo que está ocurriendo):

En un Tierra paralelo que diverge de la norma de tiempo de Ranma quinientos años atrás, el Imperio del Japón gobierna casi la mitad del mundo y lo ha hecho durante casi un siglo. Con la Teoría de que uno puede viajar a [M1] Tierras alternativas al poseer a sus homólogos en ellas, un joven Científico llamado Ranma Saotome, mediante el uso de un dispositivo de su propia Invención, accidentalmente obtuvo los conocimientos y recuerdos de una versión artista marcial de sí mismo. Después de ver algunas otras vidas y hacer frente a algunas situaciones inesperadas, Ranma decidió intensificar su entrenamiento hasta el nivel de su homólogo. Fuyutsuki mencionó un misterioso plan en que participa Ranma y varios más. Mientras tanto, Soun puso la primera etapa de su plan para atrapar a Ranma, y Hinako aprendió algo del pasado de Ranma. Nabiki se metió en el laboratorio de Ranma, y logró activar su dispositivo, y contacto y duplico las capacidades de la versión alternativa de sí misma, que fue a diez años de entrenamiento con Genma en lugar de Ranma. Cambiada para siempre por la experiencia, Nabiki acabo con dos enemigos usando sus nuevas habilidades y decidió hacer una oferta a Ranma que será difícil para el chico científico de rechazar.


Capítulo 5 - Viajando por la ruta de un Verdadero Artista Marcial, Parte I

El camino de un verdadero artista marcial está lleno de peligro.

- Soun Tendo: Ranma ½


Nabiki rodó en su cama y se encontró mirando su reloj mientras parpadeaba tras abrir sus ojos. Sus sueños de la noche anterior se disipaban como el humo mientras leía la hora. '¿5:28 de la mañana?' Ella gruño mentalmente a la hora en su reloj, no era una persona mañanera, en especial no tan temprano en la mañana. Ella cerró sus ojos y trató de volver a dormir el tiempo restante hasta que su alarma se activara normalmente, pero fue en vano. Ella bostezo, se sentó en su cama y estiro sus brazos y espalda.

'Supongo que debería hacer mi sesión de la mañana,' pensó con un cansado suspiro. Ella lentamente se levanto de su cama y fue a su armario. Ella había estado viéndolo por unos minutos antes de hacerse una pregunta a sus propios pensamientos. '¿Sesión de la mañana? ¿Desde cuando hago ejercicios en la mañana sin mi madre?' Han pasado años desde la última vez que se levantó en la madrugada para hacer ejercicio.

Encogiéndose de hombros, continuó buscando en su armario y encontró su viejo gi atrás. Viendo que ahora era dos tallas demasiado pequeño para ella desde la última vez que lo uso, Ella la lanzo a su cama y siguió buscando otra cosa que usar. Ella hizo una nota mental de que tenía que comprar algo de ropa nueva que sería adecuado para entrenar en artes marciales. Aquella ropa de estilo chino que su homóloga artista marcial lució ayer se había sentido bastante cómoda de llevar para este tipo de actividades. Por último, se decidió por una camiseta blanca y pantalones de entrenamiento azul oscuro, que tendrían que servir por ahora.

Unos minutos más tarde, Nabiki estaba en la sala de entrenamiento de tamaño medio que estaba atrás de la casa principal. Sus padres habían recibido la casa como un regalo de bodas de los padres de su padre, y los padres de su madre habían pagado la construcción de la sala después de que su madre había abandonado el ejército imperial ordinario y pasado a la reserva. Originalmente, fue así que Kimiko podía mantener sus habilidades en combate, pero después la usó para enseñar a sus hijas su estilo de lucha y transmitir las tradiciones de honor que estimaba. Para Nabiki, ese entrenamiento comenzó cuando ella había comenzado a caminar y continuó, junto a sus dos hermanas, hasta el fallecimiento de su madre hace más de seis años.

Ella no había entrado al edificio con el propósito de entrenar en varios años, pero se sentía bien estar allí ahora, como si estuviera recuperando una parte de si misma. Los olores sutiles de la sala de entrenamiento lleno su nariz, dando lugar a una multitud de recuerdos de tiempos pasados. Ella recordó brevemente las muchas horas pasadas aquí bajo la paciente tutela de su madre, una niña entrenada para ser una Guerrera, como su madre antes que ella. Ese entrenamiento no había parecido importar más después de que su madre había muerto, una de las muchas cosas encerradas y deliberadamente olvidadas para evitar el dolor que evocaba, pero ahora lo hacía una vez más. Su madre había estado tan orgullosa de todas ellas, y sentía un renovado deseo de convertirse en la guerrera que su madre siempre le dijo que era.

"Mamá está muy orgullosa de ti, Biki-Bushi-chan", recordó a su madre siempre decirle con una sonrisa amorosa en la cara. "Tú sigue entrenando así, y algún día tú serás una gran guerrera."

"¿Al igual que tú, mamá?" Nabiki pregunto una vez mientras se había detenido a limpiar el sudor de su frente. Había tenido ocho años de edad en ese momento, pero la memoria aún vivía en ella como si hubiera sido ayer, ella cerró sus ojos y recordó. Esta particular memoria era una de las más preciosas para ella.

"Vas a ser una peleadora tan grande como yo lo fui, Nabiki-chan", su madre le había dicho más en serio. "Puedo verlo de alguna manera en tu futuro. Algún día, si eres muy diligente en tu entrenamiento, te convertirás en una magnífica guerrera, tal vez, incluso mejor de lo que yo fui."

"¿De verdad?" Su joven yo había preguntado, sus ojos llenos de gran sorpresa. Siempre pensó que Kasumi sería la guerrera en la familia, o quizás Akane. Su hermana mayor nunca ceso en su régimen después de que su madre había muerto, y ella todavía seguía entrenando durante dos horas cada día, incluso después de su reciente matrimonio. Y la más joven Tendo había hecho perfeccionar sus habilidades de combate como su propia religión incluso antes de ese momento. Nabiki, por el contrario, simplemente dejo de intentar. Sin su madre en torno para probarse a sí misma, simplemente no parecía tener mucho sentido.

"Por supuesto, Nabiki-chan", Le respondió su madre, ella toco su frente con un dedo y una sonrisa en la cara. "Pero no creas que puedas vencer a tu vieja madre en una lucha aún. Yo puedo ser de más edad y más lenta que tú, pero edad y astucia siempre estarán por encima de juventud y velocidad. "

"¡Vamos a probar eso, mamá!" Su joven yo había dicho, lanzándose a atacar, una amplia sonrisa estaba en su cara mientras empezaban a luchar.

Nabiki se inclino contra la puerta posterior y se dejo recordar otras cosas del pasado. Hay otros recuerdos que no se había permitido recordar durante tantos años. Ella se sorprendió de pronto al darse cuenta de la cantidad que todos ellos habían cambiado después de la muerte de su madre. Su padre se había retirado casi por completo en su trabajo, y el hombre alegre que recordó de su infancia evoluciono casi de la noche a la mañana en un tipo mucho más frío, un puro profesional. Sabía que ella había estado emulándolo con el fin de obtener la aprobación del único padre que le quedaba, una aprobación que ahora se preguntaba si podría haber pagado un precio demasiado alto para sí misma. Los recuerdos de su homóloga le dieron a ella una rara oportunidad, la oportunidad de volver a examinar el camino que había seguido y pensar en las decisiones que habían tomado.

'En esa otra vida, yo soy el centro de atención, amada por algunos, odiada y temida por otros, y respetada por muchos,' pensaba ella mientras su mirada merodeaba alrededor de la sala de entrenamiento. 'En esta, se me conoce como la Perra de Acero de la Academia Imperial, una persona tanto temida y respetada, y una verdadera Heredera de las formas de mi padre.' Ella suspiró suavemente, como el sonido de un alma que se ha dado cuenta de cuan perdida estaba por primera vez. 'Tal vez no es demasiado tarde para cambiar, pero a cambio ¿Qué? No soy esa otra yo, y tampoco quiero esa caótica vida, pero tal vez algo de su actitud podría ser útil para tomar mis propias decisiones.' Era algo en lo que pensar.

Nabiki pensó que hablar con Kasumi ayudaría. Su hermana mayor había pasado por cambios casi tan grandes como su padre. Antes de la muerte de su madre, la hija mayor de los Tendo había sido un ser inocente, popular con los chicos y aparentemente sin un solo pensamiento en su cabeza para el futuro. Después, ella se convirtió en esta tranquila presencia en la casa, proyectando como una región Zen de calma a su alrededor como si fuese una Buda a la que se le dio forma mortal femenina y vino a vivir con ellos. Ella también comenzó a estudiar medicina y artes marciales con igual fervor, y nunca más salio en citas, para la extrema decepción de un sin número de chicos de la zona.

Kasumi también comenzó a ayudar a su anterior ama de llaves, una vieja señora que fue amiga de Kimiko, manteniendo limpia la casa y ayudando con la cocina. Nabiki no había intentado participar en esas actividades, y Akane demostró ser absolutamente incapaz en hacer cosas como cocina y limpieza, al igual que su madre había sido. Por lo menos su hermana mayor siempre parecía disfrutar hacer la mayor parte de la cocina, y Nabiki le agradecía a ella por eso. Ella sería la primera en confesar que ella extrañaba la presencia reconfortante de su hermana en la casa. Simplemente no era lo mismo sin Kasumi canturreando alrededor de la casa con uno de sus libros médicos en la mano o cocinando en la cocina.

'Ahora a ver cuánto trabajo tengo delante de mí,' pensó Nabiki con una leve sonrisa. Sabía que estaba con buenos músculos y entonada para una chica de su edad debido a su necesaria formación física en la Academia, pero su homóloga fácilmente tenía varios kilos de más sólido músculo y estaba en una mejor forma. Igualar la figura de su duplicado le iba a tomar algún tiempo, mucho esfuerzo y sudor. Ella tenía fuertes sospechas de que Ranma también habían descubierto la misma cosa acerca de su contraparte. También dedujo que, sin duda esa era la razón por la que seguía con su riguroso plan de entrenamiento, a pesar de lo que ella había oído acerca de su actual nivel de rendimiento en atletismo. Ella había visto su régimen de entrenamiento un par de veces, y lucía brutal.

Ella caminó hasta el centro de la sala de entrenamiento y se sentó en la fría madera, la sensación activando aún más recuerdos de los tiempos felices en su vida. Era un poco frío tan temprano en la mañana, pero el frío era tonificante para ella mientras comenzó a hacer un ligero calentamiento y un régimen de ejercicios. Ella estiro sus piernas de la forma más amplia que podía y se complació en señalar que ella era casi tan flexible como su homóloga mientras se doblaba hacia abajo, un don de su intensivo entrenamiento hecho en su juventud. Ella agarro su pie derecho y se apoyo a sí misma contra la pierna. Luego repitió el proceso en la otra dirección.

'Quizá debería ser voluntaria en participar en el entrenamiento de Ranma-kun con Takami-sensei,' se dijo a si misma bajando y subiendo sobre su pierna extendida, extendiendo los músculos tanto como ella podía. 'Voy a necesitar un mucho más intenso programa de ejercicios si espero mejorar para tener una figura igual a la de mi contraparte. Yo podría también usar un buen compañero de entrenamiento para perfeccionar mis reflejos y habilidades, y yo apuesto mi dinero a que Ranma-kun es, sin duda, la persona perfecta para ello.' Mientras ella ponderó tales cosas, continuó estirando el resto de los grandes músculos de su cuerpo, tratando de aprovechar al máximo su flexibilidad. Ella sonrió cuando ella finalmente terminó de estirar la última zona y se puso de pie lentamente.

Parada allí por unos momentos, Nabiki se pregunto brevemente acerca de cómo era Ranma en esa otra vida, la vida en el que había recibido sus nuevas habilidades de artes marciales, y como era su análoga en su mundo. 'En la vida de mi contraparte, soy la mejor artista marcial de toda Nerima,' pensaba con una medida de orgullo tomado prestado. 'Hay un Ranma ahí que es, en el mejor de los casos, un segundo en lucha contra la capacidad de mi homóloga. ¿Me pregunto cuán buen luchadora soy en el mundo en el que habita la contraparte de la que recibió sus habilidades? ¿Es que ese Ranma también entreno en el estilo de Combate Libre?' Ella hizo una nota mental de hacerle estas preguntas, junto con muchas otras que había para el joven científico.

Ella se puso en una posición y comenzó a realizar un kata, dejando que su cuerpo se moviera lentamente a través de movimientos medio familiares. Ella sonrió ligeramente mientes se sintió desplazar en una forma significativamente menos perfecta y se centró en eliminar muchas de las imperfecciones como pudo. Se sentía muy oxidada en las actividades, pero eso no la sorprendió cuando se detuvo a pensar en ello. Las habilidades de su homóloga tomaría tiempo de absorber, en el supuesto de que sea una permanente parte de sí misma como sospechaba que podrían ser. Ella se empujó aún más duro, tratando de recuperar la fluidez de la moción que había experimentado el día de ayer. Un brillo de sudor comenzó a acumularse en su cuerpo, mojando su camiseta blanca, a pesar del frío aire de la mañana.

'Esto es tan increíble,' Nabiki pensaba mientras seguía empujándose más y más duro, aumentando su velocidad lo más que pudo. Era extraño, pero mientras menos pensaba acerca de los movimientos y se dejo a si misma moverse como su cuerpo quería, mejor lo hacía. Ella a propósito dejo ir su mente a otras cosas mientras su cuerpo continuaba en movimiento a través del régimen que ella misma se había fijado para esta mañana. Mientras lo hacía, la postura de su cuerpo lentamente cambio a una casi igual al de su otro yo, y sus movimientos aumentaron en gracia y velocidad. Ella cerró los ojos y abrazó la libertad.

Después de una media hora de eso, ella paso a la pesada bolsa que colgaba de una gruesa cadena a un lado de la habitación. Era uno de un par en la sala, algo desgastada por los esfuerzos de sus hermanas durante sus propios entrenamientos a través de los años. Ella se puso en frente a el por un momento.

"¡Hiyah!" Nabiki gritó de repente, llevando su puño al grueso cuero negro. Este respondió al retroceder ligeramente con el impacto y se escucho el traqueteo de su pesada cadena, y ella inmediatamente lanzo otro golpe con su puño opuesto. Ella repitió esto sucesivamente, golpeando la pesada bolsa un centenar de veces con cada puño, sintiendo el impacto en sus nudillos. Mientras hacía una segunda serie de golpes con cada mano, un dolor casi agradable lentamente se acumulaba en sus hombros y brazos, y había algo más bien satisfactorio en golpear la bolsa.

Cuando ella lanzo su último puño, ella comenzó a trabajar en sus patadas. Su pierna atacaba sólidamente la bolsa, moviendo de nuevo su cadena, y sintió el impacto del choque todo el camino hasta sus caderas. Una y otra vez, ella ataco la bolsa con sus patadas, llevándola para atrás. El esfuerzo traía un pesado sudor a su frente, y su camiseta ahora se pegaba mojadamente a su cuerpo. Ella casi hacía con su segunda serie de centenar de patadas cuando ella oyó una voz hablar detrás de ella.

"¿Qué haces aquí, Nabiki?" Akane preguntó desde atrás de ella. Nabiki dio una pausa y volteó, viendo a su hermana pequeña de pie en la puerta de la sala de entrenamiento en un muy usado gi blanco. "Yo pensé que escuche a alguien, pero nunca esperé que fueras tú."

"Sólo ejercitaba un poco antes de estar lista para conquistar el nuevo día, pequeña hermana", dijo Nabiki con una sonrisa, mientras jadeaba un poco. "Desperté temprano, y me sentí inspirada de ver lo mucho que recordaba del entrenamiento que Mamá nos dio." La mentira llegó con bastante facilidad a su lengua, pero siempre había sido asó. Akane sólo la miro en ligera confusión.

"Bueno, después de que haya calentado, ¿estarías interesado en hacer algo de practica?" Akane sonrió de repente. "Sin Kasumi, extraño tener a alguien con quien practicar. ¿Crees que puedes tomar el entrenamiento de nuevo?"

Nabiki debatió el asunto en sus pensamientos. '¿Me pregunto si podría acabar con mi hermana pequeña en una practica ahora?' Ella sintió unas súbitas y más bien inesperadas ganas de intentar y asintió. Su hermana lucía complacida.

"¡Esto es grandioso!" Akane dijo, sonriendo incluso más brillante. "Con mi ayuda, estoy segura de que podrás ser una gran luchadora. No es que no me guste ser tu guardaespaldas, por supuesto."

"Déjame saber cuando estés lista." Nabiki dio su espalda a su hermana antes de empezar a golpear la bolsa una vez más. Ella se esforzaba más en cada patada, una suave sensación de quemado lentamente se colocaba en los músculos de sus piernas.

Poco tiempo después, Akane le dijo que ya estaba lista. Nabiki se dio la vuelta con una sonrisa, respirando dura y profundamente para reponer su fuerza rápidamente mientras comenzó a acercarse más. Vio a la chica de pie al otro lado en medio de la alfombra, moviéndose ligeramente de un lado a otro. Para el momento en que ella llegó a la mitad de la alfombra, su respiración se había calmado hasta casi volver a la normalidad. Su madre siempre le comento que ella siempre parecía recuperarse más rápido que su otras hermanas tras los arduos esfuerzos en el entrenamiento. Ella se sentía orgullosa de ver que sus habilidades en recuperarse se mantenían incólume.

"Lista cuando lo estés, hermanita". Nabiki se puso en una posición de combate.

Akane decidió ir fácil con su hermana mayor, al menos al principio. Ella sonrió cuando la otra chica bloqueo los primeras ataques con aparente facilidad. 'Supongo que Nabiki no ha dejado su entrenamiento tanto como pude haber pensado,' se dijo. 'Aún así, debería haberle dado por lo menos un golpe ya.' Akane siguió atacando, y su hermana siguió bloqueando o evadiendo cada puñetazo o patada. Sus constantes fallos estaban empezando a irritar a la joven Tendo.

'O bien ella va muy fácil conmigo, o que yo soy mucho mejor ahora después de mi experiencia en el laboratorio de Ranma-kun de lo que yo pensaba que era,' señaló Nabiki con leve placer mientras fluían alrededor de todos los esfuerzos de Akane de atacar. La reciente experiencia en su lucha con Hayate y Kena la última noche era poco, ella no había esperando hacerlo tan bien contra su hermana menor. Hasta el momento se había limitado a la defensa y se alegro de ver que la otra chica comenzaba a lucir frustrada por su incapacidad para conectar. Nabiki decidió subir el nivel un poco y con rapidez lanzo su propio puño.

'¿Por qué no me ataca ella?' Akane se estaba molestando. 'He estado dejando algunas aberturas en mis defensas con el propósito de que pueda explotarlas ahora. ¿Por qué no trata de golpearme?' El súbito golpe de su hermana irrumpió a través de su guardia un simple momento más tarde y le dio de lleno en la cara. Akane parpadeó por el ataque, más sorprendida que realmente herida. Ella ni siquiera lo había visto venir. '¡Wow! Nabiki es incluso más rápido de lo que pensé que sería.' La joven Tendo aumento el ritmo de su ataque, que salía con su natural agresividad.

"Buen puño, Nabiki", dijo Akane con una sonrisa de lobo en su cara. "Supongo que podrías ser algo de competencia para mí después de todo. ¡Muy bien, esta vez va en serio!" Ella azotó con una compleja combinación de patadas y puños que sólo había fallado en acabar con un oponente una vez, ese oponente era Ranma.

"Lo que tu digas, Akane-chan." Nabiki sonrió, una nota de burla en su voz. Ella paso a través de los potentes ataques de su hermana como humo, algunos de los golpes no conectaron por mera milímetros. "¿Creo que soy mejor de lo que esperabas?" Ella bloqueado una de las manos de Akane, la puso en una rápida llave de brazos, y después la levanto.

"¡Yeek!" Grito Akane en sorpresa, aterrizando sobre su espalda en la colchoneta de la sala de entrenamiento con un sonido sordo. Internamente ella se maldijo por dejar que su hermana la superara tan fácilmente y se puso de nuevo de pie. Una intensa furia la lleno, y ataco a Nabiki con toda su fuerza, pero sólo logró hacer un agujero del tamaño de un puño en una de las paredes de la sala de entrenamiento, en lugar de poner a su hermana en el tatami, inconsciente. Una ligero golpe de repente le dio de lleno en la parte de atrás de su cuello un momento más tarde, lo que habría sido un Knockout o incluso matarla si hubiera aterrizado con más fuerza, y ella parpadeo en sorpresa.

Akane retiró su puño del agujero en la pared y volteó, Viendo a Nabiki en shock. Su hermana mayor estaba allí en una casi casual postura, pero todavía lista para combatir aún más, una mirada reflexiva sobre su cara. Ella sacudió fragmentos de la madera de su mano, su rabia con la otra chica disminuyo un poco debido a la gran sorpresa. Su hermana mayor había estado de pie justo enfrente de ella, y luego ella de repente no.

"¿Cómo hiciste eso?" Pregunta con una mirada desconcertada, su sorpresa por la capacidad de combate de su hermana brevemente supero su ira. "Duramente te vi moverte. ¿Donde aprendiste a luchar así?"

"Es un secreto", dijo Nabiki, sintiendo una extraña necesidad de mantener el conocimiento de la invención de Ranma para sí misma. "Te diré al respecto algún día, ¿Está bien?" Ella sonrió, sintiéndose no bastante como ella en ese momento.

"Está bien." La repentina ira de Akane por su hermana se iba tan fácilmente que ya casi desaparecía, pero ella todavía se sentía dudosa. "Debes haber encontrado un nuevo maestro en algún lado por lo que parece. Estoy seguro de que no era nada parecido a las cosas que mamá siempre nos enseñó, o incluso lo que aprendimos en la Academia. Entonces, ¿Qué es?"

"Es un estilo de Kempo. Realmente no debería decir nada más sobre ello. ¿Estás de acuerdo? "

"Claro, Nabiki. Pero promete que me lo enseñaras algún día." Akane trató de duplicar uno de los bloqueos que su hermana había utilizado durante la lucha. "Se veía como un poderoso estilo". Nabiki simplemente asintió, sintiendo una extrañes en sus pensamientos.

'Oh sí, Akane,' Nabiki pensó mientras seguía asintiendo. 'Es un estilo bastante Poderoso. Uno del que nunca escuche hablar antes de mi experiencia de ayer, y lo conozco ahora, y sospecho que Ranma-kun también. Que extraño.'

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Casi al mismo tiempo en el hogar Kuno, Kodachi terminado de golpear la pesada bolsa de cuero en la sala de entrenamiento de la mansión. Los músculos de sus extremidades le dolían ligeramente por los intensos esfuerzos que dio, pero ella sabía por experiencia que su cuerpo se recuperaba rápidamente. En su vida original, ella no se había llevado a los verdaderos límites de lo que era capaz. En su vida presente, se mantenía presionando a lo que pensó eran sus límites más y más, y mantenía su cuerpo mejorando en fuerza y velocidad.

Ella sonrió cuando realizo un breve kata, disfrutando del poder flexible de su físico. Muchos años de intenso entrenamiento en gimnasia y danza dieron a su homóloga un cuerpo que era ideal para funcionar como artista marcial. Ligeramente muscular, tan rápido y grácil como un gato, y con una bien proporcionada forma femenina superponiendo todo eso, ella se sentía bastante confiada de que ella sería capaz de superar cualquier dificultad en su búsqueda por Ranma.

'Ah, Saotome-kun,' pensó con un suspiro agradable. 'Una vez que me ocupe de la molesta Akane Tendo el día de hoy, entonces tu y yo podremos explorar un romance sin igual en la literatura. Voy a probar la fuerza de mi amor por ti al totalmente acabar con esa pequeña buscapleitos en tu nombre.' Su puño derecho se salía con casi letal poder, los músculos de sus antebrazos se destacaban con gracia. Kodachi giraba a través de una rápida secuencia de ataques y bloqueos, cada movimiento hecho con precisión.

Cuando ella acabo, ella recogió su toalla y se quito el sudor de sus cejas. Su pecho se levantaba un poco con su respiración profunda, mientras sus pulmones buscaban oxígeno y rápidamente reconstruían su fuerza después de sus esfuerzos. 'Tengo que confesar que extrañare los combates con Saginomiya-san,' pensaba ella mientras cruzaba el piso con sus pies descalzos. 'Realmente no hay nada como hacer frente a un fuerte oponente en forma periódica para mantener los reflejos afilados. Tal vez pueda hablar Saotome-Kun sobre entrenar conmigo.' Esa idea envió una sorprendentemente agradable corriente a través de su cuerpo, una breve fantasía de yacer junto al victorioso chico de la trenza como una heroína de un Manga de romances y artes marciales corría a través de su mente.

Kodachi miró a su hermano mientras lo pasaba, un ceño fruncido cruzaba su cara por su anterior negativa de entrenar con ella. Ella le había pedido educadamente si podía, después de completar su calentamiento y estiramiento, pero se había rehusado. Era la única cosa que ella podía pensar para probar su fuerza con él, y su capacidad de cuidar de sí misma. 'Voy simplemente a intentarlo de nuevo mañana,' ella decidió. Una leve sonrisa apareció en sus labios. Quizás si ella le insultaba un poco la próxima vez.

Kuno miró a su hermana salir de la sala por la esquina de su ojo, el resto de su atención en la práctica de su estilo. 'Hoy es el día que tú caerás ante mí, Ranma Saotome. Mi inocente y tierna hermana no es para las crudo manos de la gente como tú, ni la dulce y virtuosa Akane Tendo.' Una breve pero vívida fantasía de una damisela Akane vestida con atuendo tradicional que lo saludaba con una reverencia mientras él regresaba a su hogar, llenaba su mente. La poderosa imagen de ella le dio nuevo determinación a darle una fatal visita a Ranma Saotome en las clases de hoy.

'Tal vez debería considerar el consejo de mi padre y transferirme a la Academia Imperial,' pensó él, rozando el aire con su arma. 'Eso me llevaría más cerca de la justa Akane, y el poderío de mi mano vigilante estaría siempre presente para defender a mi joven hermana de las garras lujuriosas de Ranma Saotome. Uno como él es totalmente incapaz de cortejar a mi hermana. Seria un noble sacrificio, pero necesario, pienso yo.'

Él corto a través de un blanco de madera con su bokken, y la mitad superior cayó al lado con un golpe seco, cortada limpiamente como si hubiera usado una navaja bien afilada. 'Cuenta las horas que te quedan, Ranma Saotome, antes de que enfrentas mi justa ira. Mi dulce hermana y la inocente Akane Tendo deben ser defendidas de tus deseos lujuriosos.'

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Poco tiempo después, Kodachi luchaba con su lazo mientras se observaba a si misma en el gran espejo de su cuarto. Este iba a ser su primer día en la Academia Imperial, y quería que todo sea perfecto. Se sentía un poco extraño el usar el modelo estándar, de lana y lino de una cadete de ciencias, al no ser capaz de obtener uno hecho por sastres a la medida para una de tan refinada crianza como ella en tan corto plazo. Así que, por un día o dos, simplemente tendría que renunciar a las finas telas y tolerar estas más plebeyas. Mientras terminado de ajustar su lazo, se encontró a sí misma esperando vestir a Ranma en sedas y satin como a su juicio él lo merecía.

Finalmente satisfecha con su apariencia, ella lanzo un seductor beso a su reflejo. Ella prácticamente omitió bajar las escaleras, impulsada por la felicidad su corazón. Ella rápidamente comió su desayuno, más que un poco impaciente por salir. Su padre había dejado la casa temprano para asistir a una reunión con algunos de sus compañeros Señores, dejando a su madre presidiendo la mesa del desayuno.

"Tú pareces más deseosa de ver a tu nuevo amante, Dachi-chan", dijo su madre en un tono de burla. Tatewaki quebró de inmediato los palillos en su mano a la mitad a mitad de su mordida. La cara de Kodachi se puso de color rojo brillante a través de sus mejillas.

"Madre", Dijo Kodachi en un tono tímido de voz, con un toque de vergüenza. "Le he dicho que no es nada por el estilo. Estoy simplemente deseosa de aprender lo que la Academia Imperial tiene que enseñar. Saotome-kun ciertamente no es mi amante." Ella comenzó a comer lo que quedaba de su desayuno más lento. 'A pesar de que él sería bienvenido a serlo,' Kodachi pensó descaradamente, abrazando un impulso que llevó otro rubor a sus mejillas.

Tatewaki gruñía en voz baja, cada vez más convencido de que los cambios dramáticos en su hermana se debía a la influencia de la moral corrompida del chico de la trenza. Sus pensamientos se llenaron con una latente ira en contra del joven científico. 'Cuando finalmente nos encontremos, Ranma Saotome, tú enfrentaras la furia desatada de Tatewaki Kuno, que es la quintaesencia de un supremo duelista de la moderna generación. En ese encuentro entre nosotros, sólo uno permanecerá de pie, y no serás tu, Ranma Saotome.' Él comenzó a comer el resto de su desayuno tan rápido como sus modales le permitían.

Después de que el desayuno acabó, su madre los vio a retirarse a la puerta principal, mientras que los sirvientes les entregaban sus útiles escolares. Tatewaki dio a su madre un breve beso en la mejilla, parte de su rutina de la mañana desde que tenía cinco años y fue el primero en dejar la casa para la escuela. Kodachi dio a su madre un suave beso en su otra mejilla un momento después. Su última vista de su madre fue de ella en su posición habitual, con una tranquila sonrisa de despedida sobre sus labios.

El paseo en la limusina fue tranquilo. Cuando el coche se detuvo frente a la Academia Imperial, Kodachi se apartó de su hermano con un brusco saludo. El regresó el saludo, sus manos descansando ligeramente sobre la empuñadura de su Bokken mientras su punta se posaba en el piso del vehículo. Ella cubrió sus ojos con la mano, ya que salió del interior de poca luz a la iluminada mañana.

Nuevamente dentro de la limusina, Kuno ponderó su curso de acción del día. La tentación de herir a Ranma Saotome lo antes posible le pesaba en gran manera, pero él decidió seguir adelante con su plan inicial de acción. Él toco la ventana e indico al conductor que continuara.

Kodachi tomó en una profunda aspiración del aire fresco de la mañana y lo dejo salir con un agradable suspiro. Ella llego temprano, por lo que se ocupo en ver a sus compañeros cadetes llegar mientras esperaba en la puerta a que su amado haga su aparición. Varios grupos de cadetes la miraban curiosamente, obviamente, señalando que ella era nueva, pero ella hizo caso omiso de ellos. Su ojos esperando a ese sólo hombre.

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Dando un paseo, Ranma estaba agradecido de haber logrado salir de su casa esta mañana sin tener que escuchar a su madre dar otra charla acerca de los placeres de un matrimonio. Era un día soleado, los pájaros cantaban en los árboles, y se sintió alegre de estar vivo. 'La vida sólo no puede ser nada mejor que esto,' él murmuro.

"Tienes un interesante destino aferrado a ti, muchacho", dijo una voz detrás de él, sacándolo de su buen humor. Ranma se detuvo y se dio la vuelta, parpadeando en sorpresa cuando vio a una pequeña figura vestida en túnicas de un errante monje budista, un sombrero de paja escondiendo su cara, y un gran báculo en una mano. El báculo era de madera con metal calzado en ambos extremos y estaba coronado por tres anillos de latón que tintineaban adjuntos a un círculo de metal en su punta.

"¿Qué?" Pregunto el chico de la trenza, un poco irritado por el inesperado evento. "¿Dijiste algo de mí, anciano?"

"He dicho que tienes un interesante destino aferrado a tu aura, muchacho," Dijo la voz con tono sabio. El levanto su sombrero, y un pequeño feo gnomo de monje lo miró a él. "Ha pasado tiempo desde que he visto algo igual. Un extraño y posiblemente oscuro destino te espera, joven." La voz se redujo a un tono intimidante al final.

"¿Quién diablos es usted, anciano?" Ranma preguntó, no sólo irritado por el inesperado retraso en su rutina de la mañana, pero también ahora más que extrañado por como lo acosaba este extraño individuo.

"Soy Cherry". La fea, pequeña y sabia figura lo miraba con calma. "Sólo un simple monje errante, y estudiante de la sabiduría arcana. Por si acaso, ¿tienes algo de comida extra contigo, por casualidad?" Cuando Ranma no respondió, él se encogió de hombros y señaló al estudioso de la trenza con su báculo, los anillos sonaban ligeramente. "Marca mis palabras, muchacho. Tu Destino te esta llamando, y yo soy un humilde heraldo de su llegada. Extraños Poderes y fuerzas se arremolinan en tu vida, y una gran tormenta se avizora en el horizonte de las cosas. Puedo ver claramente que has sido elegido para una gran tarea. Es el DESTINO." Ranma podía oír la capitalización de la última palabra por la forma en que el anciano hablaba.

"¡¿Qué diablos está balbuceando, anciano?!" Contestó el chico de la trenza, finalmente rompiendo el hechizo de breve extrañeza que el misterioso anciano había echado sobre él. El le dio la espalda a Cherry y comenzó a alejarse. "Yo no tengo tiempo para escuchar esas místicas tonterías".

"Entonces eres un tonto, Ranma Saotome. Me despediré de ti hasta que finalmente tomes conciencia." El pequeño monje gnomo vagó en la oscuridad de un callejón cercano mientras Ranma parpadeaba en sorpresa de que el viejo hombre sabía su nombre. El suave sonido del báculo del monje del personal resonaba en el callejón.

"¡Hey!" Gritó Ranma, dando la vuelta y dio dos pasos para encararlo en el callejón. Él parpadeo en sorpresa, el anciano se había ido, dejando tras de sí sólo se el eco del tintineo de los Anillos de su báculo. '¿Ahora donde demonios se fue ese anciano?' Se preguntó el chico de la trenza durante varios momentos. '¿Era algún tipo de maestro ninja o algo así? Él no pudo haber cruzado toda la distancia al otro extremo del callejón. Estuvo sólo fuera de mi vista por un segundo o dos. ¿Y cómo diablos le hizo para saber mi nombre? ¡Argghhh! ¡Yo no tengo tiempo para esto ahora!'

Él decidió dejar la exploración de sus preguntas para otro momento, Ya que él no quería llegar tarde a las clases de esta mañana. Escucho que iban a tener un nuevo maestro sustituto para su clase, en reemplazo de Tokimo-sensei mientras el se tomaba un largo año sabático. 'Espero que hayan encontrado a alguien con un poco más de personalidad que ese viejo retrograda,' pensó él.

El resto del tiempo dedicado a caminar a la Academia paso sin más extrañas ocurrencias, y eso alegro a Ranma. Él había experimentado muchas de esas cosas en los últimos días. 'Mi vida solía ser tan tranquilo,' pensó con un suspiro. 'Espero que después de que haga que Akane deje su fijación conmigo, entonces mi vida pueda volver a la normalidad. Un poco de emoción es una cosa, pero esto esta llegando a ser ridículo.'

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Nabiki y Akane caminaban juntas disfrutando de la mañana. Cada chica en sus propios pensamientos. La mayor analizaba la capacidad de lo que ella había adquirido de la noche a la mañana y se maravillaba de la bien que se sentía después de la sesión de la mañana. La joven fantaseaba acerca de su futuro en la vida al lado de Ranma como su esposa, amante, y mejor amiga.

La hermana menor estaba ahora completamente convencida de que ella, evidentemente, era la mejor opción para ser su esposa, y esperaba una larga vida de combates a su lado, en lo que estaba segura sería una aventura llena de artes marciales, y romances como en sus programas de televisión favoritos. Gran parte de sus imaginadas escenas se tomaron de uno de su serie de anime favorita, 'Jóvenes Guerreros.' Es una historia sobre un par de altamente dotados artistas marciales adolescentes, un chico y una chica, y sus aventuras alrededor del mundo luchando contra muchos nuevos y recurrentes enemigos. Brevemente saliendo de su fantasía, ella también esperaba con interés acabar brutalmente con su única rival por los afectos del chico de la trenza, Kodachi Kuno. 'Una vez que me ocupo de ese debutante perra rebuscona, entonces nada más habrá entre yo y mi destino con Ranma,' Akane pensaba, sintiendo una ola de felicidad llenándola. Ella cerró su mano derecha en un puño apretado y lo golpeo contra la palma de su otra mano. 'Voy a tener que hablar con mi papá acerca de organizar una reunión de matrimonio con los Saotome, pero eso no debería ser un problema. Luego Ranma será oficialmente todo mío. Apenas puedo esperar.'

'Akane-chan parece que está pensando de nuevo en Ranma-kun,' señaló Nabiki en sus propios pensamientos, observando los ojos con estrellas de su pequeña hermana. Desde la batalla del chico de la trenza con la joven Tendo, era un fenómeno común. Además, de vez en cuanto esta mañana su vista se oscurecía, y ella murmuraba implicaciones sobre Kodachi mientras ponía su mano derecha en un puño, y lo soltaba. No era un buen augurio para la joven aristócrata.

'Puede haber una lucha en mis manos después de todo, una vez que finalmente sea comprometida con Ranma-kun,' pensaba Nabiki con leve preocupación. 'Akane no iba a rodar y hacerse la muerta. ¿Y como es que Kodachi aparece así como así? ¿Cómo desarrollo de repente ella una atracción hacia él? Ella nunca tuvo ningún interés en él en ese otro mundo, y sin embargo aquí Kuno alega que Ranma estaba teniendo algún tipo de relación sórdida con su hermana. Parece que voy a tener que empezar a tomar medidas para hacer frente más inesperadas sorpresas que aparezcan en el campo de juego. La última cosa que necesito es tener que lidiar con más problemas en mi búsqueda de Ranma-kun.' Ella dio una pausa por un momento, poniendo su mano en un puño. 'Aún así, algo que vale la pena tener es algo por lo que vale la pena luchar, así que vengan todos, si se atreven.'

El par siguió caminando, llegando a la puerta de la Academia unos pocos minutos más tarde. Akane miro solemnemente a la nueva adición a la población de cadetes del campus con extrema aversión, una expresión que fue fríamente regresada por Kodachi. Nabiki miró a la chica Kuno con moderado interés, habiendo escuchado a Akane hablar en la cena acerca de que la chica estaba tramando robar a 'su' Ranma lejos de ella, ahora que había finalmente encontrado al hombre que había esperado tanto tiempo.

'Sin embargo, mientras que las dos se mantenían mutuamente ocupadas, puedo preparar todo lo necesario para ganar a Ranma-kun para mí sola,' pensó Nabiki con una breve sonrisa en su cara. 'Enfrentenlo, chicas. Junto a mí, ustedes dos están irremediablemente superadas. Sin embargo, quiero ver a todo el mundo feliz si puedo, y eliminar a un enemigo al llevarte sus razones para odiarte siempre es una buena estrategia. Su hermana menor quiere un guerrero, Kuno puede que sea insuficiente en su capacidad para vencerla. ¿Me pregunto si hay un Ryoga Hibiki en este mundo para que salga con una de ellas?' Mientras meditaba sobre esto, ella fue a donde estaba un pequeño grupo de sus habituales asociados, varios planes para hacer frente a todos estos nuevos acontecimientos pasaban por su mente.

Akane se separó de su hermana y se acercó a la joven Noble a un ritmo medido. Se detuvo a corta distancia de Kodachi, y se midieron la una a la otra. Ella cerró lentamente la mano derecha en un puño y la volvió a abrir, su respiración se profundizo ligeramente.

"Tendo-san", La saludo la otra chica con fría cortesía, asintiendo ligeramente su cabeza, su voz casi resonando con desdén.

"Kuno-san," respondió fríamente Akane. "No pensé que tuviera las agallas para presentarse, después de la advertencia que le di el día de ayer. Ranma no esta para salvarla de tener mi puño plantado en su cara en los próximos momentos."

"Tú en verdad eras de un tipo crudo y desagradable, ¿No es así, Akane Tendo?" observó la chica Kuno en un tono de voz de conversación. "Cómo una bruta bárbara como tu puede pensar que ese primitivo comportamiento atraería a una pacífica y refinada alma como Saotome-kun, es algo que no puedo entender. Sin embargo, si está buscando a una pelea, entonces estoy más que dispuesta a enseñarle algunos modales. Podría incluso llegar hasta el punto de decir que yo lo consideraría un gran placer."

"¿Por qué tú arrogante-" grito Akane, dejando su mochila. Ella se lanzó a la aristócrata con fuego en sus ojos, agarrando firmemente a la otra chica por el cuello de su uniforme con la mano izquierda y poniéndola contra la pared interior de la puerta. Kodachi voluntariamente siguió el movimiento, una leve sonrisa fantasma brevemente apareció en sus labios. Los cadetes comenzaron a luchar por una posición, con la esperanza de obtener una buena vista de la próxima acción.

Nabiki notó la repentina conmoción y comenzó a aceptar apuestas, de forma rápida instruyendo a sus ayudantes para que hagan lo mismo. Ella puso las apuestas a favor de Akane ligeramente, y tomando apuestas sobre cuanto durara la lucha y algunas otras opciones de apuesta. 'Ranma-kun de seguro las veras peleando por él cuando llegue,' pensaba ella al comenzar a hacer garabatos en los recibos mientras puños de dinero eran empujados a ella. 'Cómo reaccionara a eso será muy educativo. Voy a actuar como de costumbre por ahora. No deseo mostrar a nueva Nabiki demasiado pronto, después de todo la sorpresa es siempre una valiosa ventaja táctica en cualquier situación.'

"Suéltame, Tendo", Dijo Kodachi en tono muy helado, incluso dejo de pretender cortesía. Había pateado su mochila a un lado durante la repentina prisa de Akane. Ella envolvió su mano derecha en la muñeca de la chica Tendo y cruzaron sus miradas en una batalla de voluntades. Akane aumento la presión de su antebrazo contra el hombro de Kodachi.

"En un momento vas a aprender que no debes meterte conmigo, perra arrimosa," dijo Akane airadamente. Ella lentamente puso su mano derecha en un puño apretado mientras lo retrocedía y se preparaba. La multitud miraba en anticipación, pero mantenía una buena distancia de la pareja. Una lucha con la joven Tendo podía moverse muy rápidamente.

"¿Oh?" Kodachi pregunto amablemente, de repente llevando su rodilla al estómago de su agresor y alejando a la otra chica. "¿Y por qué es eso, Tendo?"

Akane luchaba por algo de aire, tomada por sorpresa por el golpe. La multitud hizo algunos apreciativos ruidos por la inesperada táctica, e incluso más dinero fluyó en apuestas a la chica Kuno para ganar. Akane redujo sus ojos en furia, y una rojo neblina parecía caer sobre su visión. 'Bien,' ella pensó oscuramente. 'Eso es lo que gano por subestimar a la perra debutante. Pero nadie me hace lucir como tonta.'

Al ver el movimiento, Nabiki decidió modificar las probabilidades a iguales.

Akane lanzó un furioso y poderoso asalto contra la otra chica, pero sus puños y patadas fueron hechos a un lado por bloqueos hábiles cada vez. Para contrarrestar esto, ella se volvió aún más fanática en sus ataques y se ocupo en dar incluso mas poder en cada uno de ellos, dando patadas girando todo su cuerpo para añadir más fuerza a ellas mientras saltaba en el aire. Contra oponentes anteriores había demostrado ser una devastadora táctica, dando impactos rompe huesos contra la parte superior del cuerpo y cara. En contra de su enemigo actual era mucho menos eficaz, y sus patadas no podían conectar mientras la joven noble eludía y giraba a su alrededor. El aire se llenó de sonidos de gruñidos esfuerzo por parte de las dos chicas y los comentarios y ocasionales aclamaciones de la multitud.

La chica Kuno contrarresto el asalto con un nivel de habilidad que era igual al de Akane. Donde su adversaria tenía clara ventaja en puro poder, lo compensaba con su gracia y velocidad. Uno de sus puños llego a la mejilla de Akane, pero la otra chica se encogió de hombros por eso. Para su sorpresa, la joven aristócrata se encontró gozando el desafío de la lucha, y las dos chicas se empujaron al límite de sus habilidades mientras se enfrentaban.

Yohko vio la lucha con interés profesional desde su posición junto a Nabiki, ella a menudo tomaba nota para añadirlas a sus propias técnicas al mirar la habilidad de Akane viendo la acción durante anteriores peleas. Un puño puede ser a veces lo único que se interpone entre la vida y la muerte para una Devil Hunter. Dentro, ella apoyaba a la hermana de su amiga, solo mostrándolo afuera con una débil sonrisa en su cara mientras trataba de mantener una conducta profesional.

Ella notó a Kyosuke en la multitud viendo la lucha, de pie junto a Gosunkugi. Otros cadetes estaban dando a los dos ex miembros del Instituto Mobius un amplio campo sin mirarlos como si estuvieran tratando de hacerlo a drede. Yohko suspiró, brevemente olvidando su irritación con su novio por mirar a esa chica Ayukawa. Sabía lo mucho que quería ser aceptado como un cadete de seguridad, pero el pequeño sello sobre su cuello parecía ponerlo para siempre al margen de lo seres humanos ordinarios. 'Quizás es el momento para que lo perdone,' se dijo, su atención brevemente sacada de la lucha.

'Akane-chan,' pensó Gosunkugi con un suspiro, glorificado por ver los flexibles movimientos de su diosa del amor. Él rápidamente saco una mini-cámara de su bolsillo y comenzó a tomar imágenes, una hazaña que sólo su senpai que estaba a su lado observo. 'Ella es tan grácil y fuerte. Oh Akane-chan, cada movimiento tuyo es como una sinfonía para mí.'

'¿Qué estás haciendo, Gosunkugi-kun?' Kyosuke preguntó mentalmente, dirigiendo sus pensamientos a su compañero Esper.

'Mis disculpas, Senpai,' pensó el joven chico con una leve coloración de vergüenza. 'Ella me encanta. Cada movimiento de su cuerpo es tan elegante y poderoso. Hay algo especial acerca de una mujer que puede moverse así.'

'Sí, lo hay,' pensó Kyosuke en respuesta, una breve memoria de algunos de sus momentos con Yohko lo acompañaba. '¿Algo de suerte en tus intentos de cortejo?'

'Ella ni siquiera sabe que estoy vivo, Senpai.' Gosunkugi pensó con una vibrante nota de miseria. 'Y ahora con Saotome en escena, yo no sé que hacer.' Él había confirmado los rumores que había escuchado, y una oscura depresión lo llenaba. 'Él se consoló a sí mismo al sacar otro par de fotos de la chica Tendo en acción.'

'¿Por qué no hablas con ella?' Pensó el Esper mayor con exasperación. 'Al menos déjale saber que estás interesado. Tú no me ves actuando con miedo por hablar con una chica, ¿Verdad?' Su pensamiento fue enviado con colores de orgullo.

'¿Ni siquiera Ayukawa-san?' Se burlaba el joven muchacho, con una breve sonrisa por el repentino ceño fruncido de su Senpai. 'Ella ha estado en su mente bastante los últimos días. ¿Estás pensando en dejar a Mano-senpai?'

'Mi vida privada en verdad no es de tu incumbencia, Gosunkugi-kun,' pensó Kyosuke con dureza, cubriendo sus recuerdos más profundos. 'Supongo que se podría decir lo mismo sobre ti y esa joven niña caza fantasma estudiando en el Instituto. ¿Cuál era su nombre?'

'Muy bien, Senpai, comprendo su punto,' el chico gruño, ignorando la cuestión y volviendo su atención de nuevo a las dos chicas peleando. Sólo unos pocos segundos habían pasado durante su conversación mental.

Kodachi se encontró estando a la defensiva, dejándose tomar las medidas de su adversaria, o al menos ese era el plan inicial. Ella intento mantener cierta distancia entre ella y Akane para dejarla usar sus potentes patadas, pero la otra chica era implacable. Su error fue usar las mismas estrategias que ella siempre había usado contra el Lirio blanco, y ella no se adaptó con la rapidez suficiente a las tácticas de una nueva oponente. Ella falló un bloqueo, y Akane sembró un duro puño en sus costillas, justo debajo de sus senos. La otra chica era una golpeadora fuerte, el dolor que eructó de repente de su pecho fue intenso. Ella se sorprendió, una vez más, por la gran fuerza detrás del puño de la otra chica. Ella retrocedió, un poco aturdido, y la chica Tendo rápidamente siguió con un golpe devastador bajo su mandíbula. Rojas salpicadas de sangre mancharon la pared detrás de ella, justo antes de que al joven noble se derrumbara contra ella, su cabeza girando.

Akane mantenía su ritmo, en realidad bastante sorprendida de que su enemiga había caído tan rápidamente de sólo un par de ataques. La joven noble no resultó ser mucho reto para ella como había vagamente esperado, y esto terminó demasiado rápido para su gusto. Ella frota su mejilla herida por la palma de la aristócrata con su mano, probando un poco de sangre en su boca por un corte dentro de su mejilla. Es una de las varias lesiones menores que había recibido en la cara y el cuerpo de la joven noble. Viendo que la otra chica no saltaba de nuevo a atacarla con la suficiente rapidez para adaptarse a ella, Akane comenzó a gritarle.

"¡Vamos!" Ella gritó provocándola, señalando brevemente con sus manos antes de regresar sus puños a una posición lista al frente de su cuerpo. "¡Levántate, debilucha! Todavía tengo bastantes cosas que enseñarte!" Ella círculo alrededor de la otra chica con cautela, aguantando sus deseos de apalear a la aristócrata mientras estaba abajo por pura fuerza de voluntad. Ella lo había hecho antes a otros retadores, llevando sus puños a los cuerpos indefensos de sus oponentes después de que ella los había noqueado, pero nunca le ofreció la misma intensa sensación de satisfacción de ir contra un fuerte enemigo que podía defenderse.

Kodachi recupero su aliento mientras ella se apoyó contra la pared y sonrió, sacudiendo la cabeza ligeramente para aclararla. Su adversaria tenía una gran fortaleza, y sus golpes eran poderosos. Sin embargo, ella ahora estaba segura de que ella era un poco más rápida que la otra chica, y seguía confiando en que sus habilidades aún prevalecerían, a pesar de la sangre que ahora degustaba en su boca. 'Esto ha llegado demasiado lejos,' pensaba con algo de mareo, mientras ella recuperaba el aire. 'No puedo permitirme el lujo de perder más tiempo con esta bruta. Estoy segura de que Saotome-kun me agradecerá por haber acabado con esta bárbara salvaje.' Ella se preparo, levantándose sobre la misma pared.

"¿Lista para más? ¡Bien!" Akane sonrió. La multitud vitoreó por Kodachi en unos pocos lugares dispersos que veían cómo la niña aristócrata se ponía de pie completamente. Akane fue corriendo con un ataque muy directo, más de poder que de habilidad. Ella no esperaba ver más pelea de la otra niña, por lo que sus defensas eran más débiles mientras iba en una ofensiva total.

Esa era toda la apertura que la joven noble necesitaba. Su pie izquierda explotó del suelo en un potente tiro que impacto duramente en el estomago de Akane. Rápidamente bajando su pie, lo utilizó como un pivote para una patada giratoria que lanzo al girar su cuerpo, centrando todas sus energías en sus caderas rápidamente levantando la pierna. La multitud vio con asombro como su talón derecho chocaba con la cara de la chica Tendo sonando como si un hueso hubiera explotado, mandándola a dar vueltas en una condición aturdida mientras sangre salió su nariz. Sin embargo, un repentino desenfoque en la visión de Kodachi cuando su pie toco de nuevo la tierra le impidió acabar con su enemiga en ese momento, mientras que la otra niña estaba aturdida y fuera de balance.

Nabiki dejo lo qué estaba haciendo en ese momento para ver el inesperado giro en la lucha. No tenía previsto que Kodachi diera a su pequeña hermana tal desafío, y durante varios segundos largos no hubo movimientos de ninguna luchadora. 'La joven aristócrata es mucha más amenaza de lo que inicialmente parecía ser, si puede ir contra Akane como lo ha hecho,' notó la mayor Tendo, cargando la información en su mente. 'No hubo trucos ingeniosos utilizados por esta versión de la joven noble, ni cintas de ejercicios o otras extrañas armas de Gimnasia Rítmica con que luchar. No, esta versión es más una bien entrenada combatiente sin armas, en un extraordinariamente alto calibre de habilidad. Esto parece que se va a poner más y más interesante. Me encanta un reto,' Nabiki pensó, sonriente.

Gosunkugi quiso ir a ayudar a Akane cuando una mano cayó sobre su hombro. Kyosuke sacudió la cabeza cuando el joven muchacho miró hacia él. '¿De verdad crees que ella quiere ayuda en una pelea?' Pensó el otro muchacho. 'Gane o pierda, debe ser por su propia mano. No interfieras con las dos mundanas, mi joven amigo. No ganarás su reconocimiento si lo haces. Ella es una chica de intenso orgullo.'

Asintiendo, los pensamientos del chico de ojos hundidos eran oscuros mientras miraba a la chica de cola de caballo que había golpeado a su diosa del amor tan brutalmente. 'Has hecho un enemigo de por vida el día de hoy, Kodachi Kuno,' el joven Esper pensó. 'No voy a olvidar tus acciones en contra de mi Akane-chan. Nunca.'

Sorprendentemente, para la multitud que había visto las patadas dar sólidamente en su cuerpo y cara, Akane tomó dos poderosos ataques y todavía permanecía de pie. De su boca lentamente salió sangre por una escisión de los labios, más sangre bajaba de su nariz, y sentía como uno de sus molares estaba algo suelto durante el impacto de la segunda patada de Kodachi. Ella probó el interior de su boca con la lengua por un momento para confirmarlo, y luego ella sonrió salvajemente. Más que contra Ranma o su hermana, ella no había tenido tanto desafío en un largo tiempo. Era una experiencia agradable encontrar una oponente con quien podía ir con todo.

'Yo no lo creo,' pensó Kodachi con molestia mientras la chica regresó a una postura lista después de varios momentos. 'Esa patada hubiera tirado al piso a algunos de los mejores combatientes de la Arena. ¿Es ella parte cucaracha o algo así?' Sin embargo, la joven noble también sintió una inesperada alegría salvaje que corría arriba y abajo de su cuerpo mientras su enemiga le dio una sangrienta sonrisa a ella en la luz brillante de la mañana. Toda su lucha con Asuka no la habían obligado a llegar tan profundamente como esta lucha lo había hecho, y ella tuvo que admitir que estaba extrañamente agradecida de encontrar tan digna oponente. Después de todo, cuanto mayor es el reto, más dulce la victoria.

Ella puso sus manos en una posición defensiva de nuevo, una sonrisa que era casi igual al de la cara de Akane. Las dos chicas caminaron entre círculos otra vez más, ambas mucho más precavidas al medir las capacidades de la otra que cuando la lucha comenzó. Cada una de ellas se dio cuenta de que ahora enfrentaban a una oponente que era más o menos su igual.

"¿Es ese tu mejor tiro, debutante?" Akane se mofo tentándola.

Los ojos de Kodachi se estrecharon airadamente, pero no se sintió con ganas de gastar su aliento en responder. Su mandíbula le dolía mucho, y sabía que iba a tener algunos moretones coloridos en todo el cuerpo después de que esto terminara. Ella no creía que alguno de sus huesos estuviera roto, y sospecho de que con la otra chica, los daños eran igualmente superficiales. Ella noto que su enemiga se estaba moviendo más lento, pero le sorprendía que la otra chica todavía fuera capaz de moverse. Acabar con la chica Tendo Abajo no demostraba ser tan fácil como tenía pensado primero.

"Vamos, princesa", Akane la reto, insinuando a su enemiga que se acercara a ella. Ella escupió algo de sangre, el dolor de sus heridas se tapaba con su máscara de odio a la otra chica. Sin embargo, ahora mezclado con el odio estaba un muy escaso respeto por un digno oponente. Ella círculo alrededor de la aristócrata, buscando cualquier debilidad en su defensas, mientras que su cuerpo recuperaba su fuerza. Ella sentía una alegría salvaje en su alma. Los combates siempre la hacían sentirse realmente viva, y ella esperaba el día más que nunca cuando enfrentaría a Ranma en un combate como este una vez más.

'Ella tomó un par de mis mejores patadas y no cayó,' Notó Kodachi con mirada clínica, tomando un momento para estudiar a su oponente mientras buscaba posibles puntos débiles en las defensas de la otra chica. 'Las habilidades de esta Akane Tendo en combate es impresionante. Mucho mejor de lo que yo preveía de ella. Ella es más dura de lo que parece.'

Akane rápidamente se canso de esperar a que la otra chica hiciera un movimiento, y ella lanzó de repente una serie de golpes, ataques con el codo, y patadas. Kodachi no tuvo más remedio que tratar de ver si podía hacer que unos de sus golpes pasaran la defensa de la joven Tendo mientras trataba de bloquear y esquivar el nuevo asalto. Sin embargo, por cada puño que le arrojaba, Akane regresaba otro a cambio. Se movían en el patio a través de una deslumbrante exhibición de habilidad de artes marciales.

Asuka Saginomiya vio la lucha desde un árbol cercano llena con envidia en su alma mientras era testigo de su archi-enemiga peleando con la chica Tendo, su inesperada nueva rival por el corazón de Tatewaki Kuno. No es que ella en realidad considerara a esa primitiva bruta ser una verdadera rival, sólo una molestia en su vida que pronto manejaría. Ella no se había dado cuenta antes de lo hábil que la chica Kuno realmente era, y le molestaba que su archi-enemiga de hecho hubiera estado ocultando su verdadera capacidad, como si ella, el Lirio Blanco de la Academia Blackhall, no fuera digna de enfrentar. Ella tomo una nota mental de contratar los mejores maestros que ella pudiera encontrar, a fin de poder mejorar sus habilidades suficientemente para acabar con su Némesis de una vez por todas.

Junto a ella estaba su mano derecha, Ayako Mitsui, fácilmente equilibrada en la rama del árbol sobre las bolas de sus pies. Asuka la miraba para ver que la otra chica no estaba siguiendo sus instrucciones, en su lugar estaba viendo a otra persona en la multitud. Ella siguió la línea de visión de la otra chica para ver que su amiga y compañera de entrenamiento estaba mirando y ella se sorprendió al ver una gemela idéntica de Ayako parada en medio de la multitud, junto a la hermana de la chica Tendo.

"Yohko", murmuraba Ayako, veneno llenaba esa sola palabra y suavemente escupió lentamente de sus labios. Ella notó a su líder mirándola y dio un rápido arco de la cabeza a su jefa presentando sus disculpas. "Lo siento, Milady. Se trata de una antigua cuenta familiar que debo tratar en un futuro. Por favor, perdóneme por mi falta de atención."

"No es nada, Mitsui-san", dijo Asuka con calma. "De hecho, me da a mí una excelente idea para una futura tarea para ti."

"Como siempre, Milady, mi honor es servirla a usted", dijo la otra chica con humildad. "Nombre la tarea, y será hecha".

"Pronto, Mitsui-san, pronto," Dijo el Lirio Blanco suavemente. "Por el momento, me contento con ver la paliza que Kodachi-chan está tomando esta mañana por esa bruta salvaje que lucha contra ella. Tú no sabes cuan agradable es ver a esa perra hermana de Kuno recibir ese castigo. Sólo deseo ser yo la que lo estuviera haciendo." Sus ojos brillaban con la del sol de la mañana que pasaba a través de las ramas de los árboles.

Más abajo, la cabeza de Kodachi se sacudió de nuevo con otro de los puños de Akane, y ella respondió con una rápida barrida que capturo el tobillo de su adversaria por detrás. Ella presionó su ataque y dio tres más duros, y rápido puñetazos a la cara y torso de la otra chica mientras su enemiga luchaba por recuperar su equilibrio. Una vez que lo había hecho, la niña Tendo dio un duro puñetazo a Kodachi en las costillas que dio lo suficiente fuera de su centro para evitar que varios huesos se rompan. La chica Kuno, ahora a la defensiva, se encontró a sí misma incapaz de superar la guardia de su enemiga sin dejarse mas abierta de lo que quería, por lo que rápidamente se convirtió en una batalla de resistencia. Las dos chicas intercambiaban golpe tras golpe, ya que ambas se negaban a ceder.

'Kodachi es una maravillosa oponente,' pensaba Akane, tomando una pausa por un momento para recuperar su aliento. 'Ella es fuerte, rápida, y hábil. Si la habilidad de Ranma es mayor que la suya o Nabiki, entonces tengo que ver como una lucha hasta el final es con él.' No podía dejar de sonreír ante la idea de su inevitable confrontación con él. Por esto era lo que ella vivía, el desafío de la lucha. Sin embargo, su temple deseo era seguir el ejemplo de su ídolo de la Arena, Shampoo, y concederse ante un fuerte hombre. Ella había llegado a considerarse a sí misma ser una amazona en el corazón, y esperaba llegar a descubrir si su hombre ideal era efectivamente Ranma.

El dúo intercambio puños y patadas una vez más, en otro aluvión de salvaje acción que las llevó hacia adelante y hacia atrás a través de la zona pavimentada delante de la Academia. Kodachi bloqueó un puño y contraataco con el mismo movimiento uniforme, su puño llevo la cabeza de Akane a la derecha. Pero la otra chica regresó con un ataque rápido como relámpago, su puño choco con la joven aristócrata en toda la cara. Ellas se separaron por otro momento.

'Yo estaba equivocada,' pensó Kodachi, limpiando una delgada línea de sangre que salió de su nariz. 'Akane es mucho más dura de lo que parece. Ella empezó esta lucha enojada, pero ahora me sigue sonriendo. ¿Qué hace que sigas sonriendo? ¿Piensas que has ganado?' Ella se detuvo y pensó en una manera de ganar. Todas sus estrategias habituales no habían acabado con la otra chica, y ella ha tomado mucho más abuso en esta lucha de lo que tomo en mucho tiempo. Ella no podría ser capaz de soportar mucho más de esto.

"El baile acabo, Kuno-hime", dijo de repente Akane. Ella podía sentir uno de sus ojos hinchándose, y el sabor de la sangre no había dejado su boca en ningún momento. "Ahora tú y yo vamos a ir en serio." Ella comenzó a avanzar, haciendo caso omiso de estas distracciones.

Kodachi se preparo a si misma. Sentía magulladuras en la parte superior de todas las magulladuras y a lo largo de su cuerpo, y ahora parecía que estaba luchando en barro, sus movimientos eran tan lentos. Sus lesiones le cansaban, pero parecía que la otra chic podía tomar aún más daño todavía. La idea de perder contra esta bruta adversaria era impensable para ella, por lo que no iba a renunciar voluntariamente. 'Sin retroceder, sin rendirse,' pensaba duramente para sí misma. 'Soy una Kuno, una samurai, ¡Y me niego a rendirme!' Su foco restaurado, avanzó con determinación a reunirse con su enemiga.

Los ojos de muchos observadores se ampliaron al ver como las dos chicas se reunieron en una última secuencia de ataques. Potentes golpes que hubieran sido esquivados o bloqueados fácilmente antes, se deslizaron a través de las defensas debido al agotamiento. Akane tomó un sólido puño de su mandíbula de Kodachi. Una fracción de segundo más tarde, la chica Kuno sintió el puño de su enemiga impactar contra su hombro justo en la unión, lo que dejo a todo su brazo izquierdo entumecido. La chica Tendo siguió con un rodillazo a su lado derecho, pero la joven noble logró burlar el daño del golpe al girar lejos en el último momento.

Su brazo izquierdo le colgaba, Kodachi logro ejecutar una patada lateral que le dio la satisfacción de escuchar a su pie impactar las costillas de su enemiga, pero no pudo saber si había roto algún hueso. Sin embargo, el esfuerzo de hacerlo le costo muy caro, y su visión se volvió borrosa. Ella también se sintió tropezar y caer de nuevo contra la alta pared de piedra y cemento detrás de ella, y lucho por permanecer de pie mientras sus rodillas cedían. 'Ella es tan fuerte,' pensó Kodachi mientras sus pensamientos se ponían borrosos. 'Ella es tan fuerte.'

"¡Uhn!" Akane gritó, tambaleante de nuevo de pies tras el último asalto de la otra chica, sus costillas ardían con agonía. Ella cayó a sus pies sobre el frío pavimento, envolviendo los brazos alrededor de su torso, su visión borrosa por agotamiento y dolor. Ella miró y vio a su enemiga tenuemente apoyada contra la pared por la puerta principal, su cabeza agachada. 'Yo n-no puedo perder,' Pensaba ella mientras luchaba por ponerse de pie una vez más. 'Mama no crió a una perdedora. Yo-yo soy una guerrera, al igual que ella.'

Ella consiguió lentamente llegar donde Kodachi y levantó la cara de la otra chica por el pelo para golpearla, pero ya había caído inconsciente. Sentía una poderosa emoción de victoria correr por ella al ver a su enemiga derribada. Incluso logró superar los dolores de los múltiples hematomas y otras lesiones que le estaba haciendo muy difícil a ella concentrarse ahora. Ella se sentó contra la pared, descendiendo junto a Kodachi, sintiéndose de repente muy cansada. 'Gané, Mama,' pensaba ella mientras sus pensamientos caían bajo una niebla gris. 'Ahora voy a descansar aquí y recuperar mi aliento. Nabiki me cubrirá de nuevo. Ella siempre lo...' el último pensamiento de Akane se desvaneció en la oscuridad mientras caía inconsciente.

Nabiki de repente dejó a sus asistentes para pagar las apuestas sobre Akane y corrió al lado de su hermana. Ella estaba justo detrás de Gosunkugi y unos pocos del no oficial club de fans de la joven Tendo en el campus. El pequeño chico Esper tocaba la muñeca de Akane, tratando de despertarla. Nabiki lo hizo a un lado, ganando una oscura expresión de él que duró sólo un momento, antes de ser sustituida por una de los habituales neutrales que el chico siempre le daba.

Ella examino a Akane, incluso abriendo cada párpado para ver cómo se dilataba las pupilas de su hermana, todo su entrenamiento en técnicas avanzadas de primeros auxilios se ponían a buen uso. 'Parece que mi hermanita esta simplemente desmayada,' pensaba ella con calma, estudiando los daños a la chica. No hay huesos rotos por lo que puedo ver, con la excepción de tal vez sus costillas.'

"Alguien vea a Kuno-san", ella dictó, y ella junto a Yohko recogió a Akane y la llevaron a la enfermería de la Academia.

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"Vamonos", dijo Asuka de repente, su voz neutral, sorprendiendo a Ayako de su observación de lo eventos mientras los cadetes se apresuraban al par caído. "He visto lo suficiente de esto. Ahora sé todo lo que necesito saber para lograr mi victoria sobre mi Némesis cuando la enfrente después. Ella evidentemente ha escapado de mis crecientes habilidades en combate, pero yo veré que se arrodille ante mí y reconozca mi supremacía ante todos en Blackhall, o acabare con ella igual que esa cruel chica Tendo hizo. Ahora es el momento para que yo entrene para mi destinado día de victoria." Una repentina y escalofriante risa salió de ella, y un momento después ella y su compañera se habían ido de la pared.

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Ranma llegó al campus unos minutos más tarde, mientras los cadetes seguían hablando de la lucha, pero no se detuvo a escuchar. Su mente ya estaba preocupada con pensamientos sobre el extraño caso que se había producido durante su caminata a la Academia. Él vagaba lentamente entre pequeños grupos de cadetes, inadvertido por todos salvo una única excepción.

Gosunkugi miraba al científico de la trenza con una mirada de odio fogosa dentro de sus ojos hundidos. 'Es por tu culpa que mi Akane-chan ahora se encuentra herida, Saotome,' pensaba el chico Esper con un profundo enojo que nunca sintió hacía nadie antes, incluso contra Kodachi. Él había muy rápidamente probado la mente de su hermosa diosa del amor mientras ella yacía inconsciente, y sus muchas ideas acerca de la razón por la que había luchado con la chica Kuno le habían conmovido profundamente. 'No fue suficiente para ti encantar a la dulce Akane-chan, al revelar tus habilidades como artista marcial. Ahora tú llamas a otra mujer que tienes atrapadas en tus redes a este campus, y esa demonio luchó con mi hermosa Akane-chan por ti. Si sólo tuviera el poder de destruirte, lo haría.'

Desconociendo el nivel de emoción dirigida a él, Ranma continuó al edificio principal. Fue sólo cuando estaba fuera de su clase que él se detuvo a preguntarse por qué Akane no lo habían atacado todavía hoy. Él como que medio esperaba que ella lo acechara en la puerta principal. Era un alivio para él que ella no estaba.

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"Explíquense."

Hayate y Kena se miraban nerviosamente el uno al otro, ambos ahora envueltos en más vendas que el día anterior. A un lado, Hiei llevaba una mirada de desagrado que de alguna manera hizo a su rostro aún más aterrador a los dos rufianes. Naka estaba con su bokken descansando sobre su hombro mientras estudió a sus dos compañeros, una brillante sonrisa en sus labios que por poco no llegaba a sus ojos.

"Fue-" el resto del discurso de Kena se perdió en un mascullar algo bajo para escucharse. Hayate, su boca cerrada con cable por su mandíbula rota, de alguna manera todavía lucía más miserable que antes.

Plantado encima de la zona al final de la sala, la figura de su jefe se movía en las sombras que prefería. Él pensaba que lo hacían lucir genial como líder al hacerlo, pero su enojo por esta nueva interrupción en sus planes lo venció. Él empezó a entrar a la luz y agarró a Kena por el cuello de su uniforme.

"¡Dime el nombre de quien hizo esto!" gritó el chico de ojos marrones mientras sacudía al herido joven por el cuello. "¿Fue de nuevo Ranma Saotome?"

"Yo-fue Nabiki Tendo". Los ojos de Kena se negaron a mirar a los de su Líder. "Ella rompió la mandíbula de Hayate y rompió mi nariz de nuevo. ¡Estoy tan triste, Kashuoh-san! ¡Jefe, dénos otra oportunidad!" Con una mirada de extremo disgusto, Kinnosuke soltó a su seguidor y lo dejo caer al piso.

"Nabiki Tendo", murmuró él, enderezando su uniforme azul de cadete. "Ella toma parte directa contra mí ahora, en lugar de dejar que otros sigan haciendo su trabajo sucio." Con una mirada solemne en su cara, el caminó de regreso a su silla. Poco antes de llegar a ella, se dirigió a la Manada y ordenó, "Déjenme pensar. Tengo que hacer nuevos planes."

"Sí, Jefe", murmuró cada uno de ellos, Hayate solo dijo unas pocas sílabas ininteligibles. Rápidamente ellos salieron de la sala, y Kinnosuke se inclino hacia adelante, una mirada molesta en su cara.

"¿Por qué soporta a esos cuatro idiotas, Kinnosuke-sama?" Preguntó una voz femenina detrás de él. Tres altas figuras femeninas salieron de la sombra cerca de él mientras las luces iluminaron la sala, todos estaban vestidas de estilizadas versiones del uniforme de cadete de Seguridad de la Academia: La que hablo, una pelirroja de cabello corto, llevaba una gorra militar como accesorio a su uniforme, una rubia con un mechón de su cabello que le tapaba un ojo, y una chica de pelo negro con lazos azul profundo atando sus trenzas. La ahora completamente iluminada habitación reveló a sus guardaespaldas personales, y la razón detrás de su control de hierro sobre los guerreros que constituían la Manada de Lobos.

Cada niña parecía estar en la parte final de su adolescencia, vestidas de versiones individualmente modificadas de un uniforme de cadete femenino de seguridad, con cortas blusas y chaquetas, dejando parte de su abdomen desnudo. Cada una era de aproximadamente uno punto siete metros de altura, la rubia era la más alta por un par de centímetros extra, y todos eran un tanto amplias en hombros para ser mujeres, atléticas y con un muy bien proporcionada figura. La confección de sus uniformes escondió poco de sus dotes en ese sentido.

Sus facetas más distintivas sin embargo, eran las dos puntiagudas orejas como gato encima de sus cabezas y sus ojos con pupilas estrechas, ambas facetas las marcaban como creaciones de la Corporación Genom. Aparte de estas dos no humanas características, todas ellas eran mujeres bellas en su forma. Cada uno era un prototipo experimental de Genom de tres nuevas líneas de liliths, Humanoides replicantes femeninos creadas para ser exóticas compañeras sexuales y guardaespaldas para los muy ricos, y estas unidades prototipo usaban el nombre de sus designaciones en serie. Ellos tenían por objeto seguir el gran éxito de la serie original Puma.

Al igual que las Pumas antes que ellas, estas nuevas modelos han recibido un fuerte condicionamiento mental y personalidades implantadas en ellas, y en el núcleo de su identidad, a las tres se les había dado dos principales motivaciones. Se les había impreso amar y ser fiel a su Maestro, sin duda, y todo lo hacían con pasión. Estaban ansiosas por complacerlo, dispuestas a hacer cualquier tarea que les daba, incluso si significaba morir en su nombre o matar en su nombre.

Para los tres prototipos, su maestro era Kinnosuke Kashuoh, el heredero de la Finanzas Kashuoh, entre las cuales se encontraba una participación de control en Genom. Debido a los deseos de sus creadores, cada uno de ellas era una adolescente físicamente, pero envejecerían y madurarían como un humano normal lo haría. El muchacho había recibido las tres catgirls como regalo de su abuelo, una marca de su ascensión a la virilidad.

"Estamos a la espera de sus ordenes, Kinnosuke-sama", dijo la pelirroja. Las tres mujeres jóvenes entonces se arrodillaron frente a él, con su mirada al piso hasta que se les diera permiso para levantarla. Cada una de ellas tenía sus orejas bien levantadas para escuchar su comando. Con una sonrisa fría en sus labios, él tomó un largo momento para estudiarlas.

La pelirroja de ojos verde-jade se llamaba Tiger, la semi-oficial Líder del trío letal de bellezas. Ella llevaba un par de pantalones largos que se recrudecían en las rodillas, estilo prusiano, antes meterse en sus largas botas, y su gorra de tipo militar se encontraba en un Ángulo entre sus dos orejas de gato. Ella también era la mayor de ellas, en cierto sentido, fue la primera terminada y entregada a servicio de Kinnosuke en las instalaciones de Genom. Su modelo poseía los mayores reflejos y habilidades en combate del trío programadas en su cerebro y nervios durante su creación. Además, también se le implanto con varias habilidades más allá del carácter estrictamente combativo.

La del centro se llamaba Panther. Era la fuerte del trío, su modelo diseñado para ser un poco más fuerte físicamente que las otras dos, pero ella también era un poco más lenta tanto física como mentalmente. Ella era la más agresiva de las tres catgirls, y ella había disfrutado de la tarea de golpear a los miembros de la Manada de Lobos por su maestro. Su largo cabello rubio era llevado suelto, y un mechón de el parecía perpetuamente cubrir uno de sus ojos color de acero, por lo general el de la izquierda. Al igual que Tiger, llevaba escondido el pantalón en sus largas botas, pero el suyo quedaba ajustado en contra de sus largas piernas durante todo su largo.

La última era Lynx. Ella era la más tranquila del trío, una atlética y delgada chica morena con ojos azules de cobalto. Su modelo era el más débil físicamente por un pequeño margen que las otras, pero su mente tenía una capacidad especial para analizar un adversario o una situación de combate con velocidad increíble. Y ella también era un poco más rápida físicamente que incluso Tiger. A diferencia de la forma en que las dos primeras estaban vestidas, ella vestía una falda corta que se rajaba a un lado de su cadera, exponiendo sus largas y bien formadas piernas. En lugar de botas, zapatos de moda se lucían en sus pies.

Kinnosuke consideraba a las tres como instrumentos útiles en sus planes mientras asistía a la Academia. Habían 'convencido' a cada uno de los miembros de la manada de Lobos para servirlo a él como sus agentes entre las masas al darles una paliza brutal para ganar su lealtad, pero esa acción ahora parecía ser un grave error. Dos de la manada de Lobos, escogidos por su supuesto alto calibre en habilidades de combate, ya habían caído ante totalmente inesperados adversarios, en primer lugar Ranma Saotome y ahora Nabiki Tendo.

'Nabiki Tendo,' el muchacho pensó con una mirada enojada, antes de meditarlo un momento después. 'Cómo añoro reclamarte para mí solo, doblegar tu voluntad de hierro ante mis deseos. Te tendré como mi consorte, poniéndote a mi lado como mi mujer. Si sólo te rindieras ante mi como tu maestro, como es mi derecho como hombre. Después de todo, YO debería ser el que gobierne esta Academia, y no una simple niña como tú. Las mujeres están hechas para servir a los hombres, y voy a ver a tu hermoso cuerpo doblegarse ante mí, incluso como mis tres bonitos juguetes hacen ahora. Pronto, serás mía para hacer lo que me plazca, y nada se interpondrá en mi camino. Tengo la intención de dominarte absolutamente, cuerpo y alma.'

"Levantaos, mis mascotas", él comandó. Los tres catgirls se pusieron de pie, todas lo miraban a él con adoración en sus ojos, sus oídos como gato parados con interés para escuchar cada palabra, ya que todas esperaban sus órdenes. Él les dio la espalda, regresando a su silla, antes de darse la vuelta hacía ellas una vez más. "Estoy muy preocupado por esta nueva evolución de la situación."

"Kinnosuke-sama", dijo Tiger, casi ronroneando en su voz, un coqueto sonido que parecía tener ningún efecto sobre él. Camino adelante y se puso detrás de el, sus manos levantándose para masajear sus hombros. "Permítame calmarlo, Amo." Sus manos comenzaron a suavemente masajear sus rígidos músculos. Las otras dos catgirls comenzaron a avanzar, pero una fría mirada de sus ojos las detuvo en sus lugares, y sus orejas cayeron en tristeza. Él aparto las manos de Tiger sobre sus hombros con un brusco movimiento de sus brazos, y ella bajo sus orejas como las demás, un claro barómetro de su ánimo. "¿Kinnosuke-sama?"

"No ahora, Tiger," reprobó Kinnosuke fríamente. Ella retrocedió un paso lejos de él. "Tengo que ir a mi primera clase ahora, pero tendré tareas para ustedes más tarde. Deseo que todas me esperen aquí, y volveré durante la hora del almuerzo." Él caminó hacia la puerta.

"Sí, Kinnosuke-sama", entonaron las tres, bajando sus cabezas mientras lo veían alejarse, sus oídos sollozando ligeramente. Una vez que se el se fue, ellas levantaron sus caras.

"Él estaba pensando en ella de nuevo", gruño Tiger, con un profundo ceño fruncido sobre su cara, sus orejas planas por su ira. "¡Cómo he llegado a odiar el nombre de Nabiki Tendo!"

"¿Por qué querrá a esa frágil mujer humana cuando él nos tiene a nosotras?" Preguntó Panther, ira en su voz. "Yo podría romper a la pequeña perra en dos con mis propias manos."

"Eso de seguro desagradaría a Kinnosuke-sama, si la matamos," Dijo Lynx, sus orejas tranquilas mientras pensaba sobre el asunto. "Él la quiere para sí mismo como consorte".

"Por eso mismo", se rió Panther. "Sólo nosotras tres somos adecuadas consortes para Kinnosuke-sama. ¡Cuando pienso en cuanto lo ha perjudicado su desafío a él, quiero matarla!" Ella flexiono sus manos en puños.

"Matarla no es una opción en este momento", dijo Tiger con una nota de pesar. "Sin embargo, ha revelado ser un luchadora con algo de habilidad. Esto abre otra opción."

"¿Tú tienes una idea, Tiger?" Rápidamente preguntó Panther, sus orejas giraban con interés para escuchar a su 'hermana'.

"Tal vez", dijo Tiger. "Hemos derrotado a esos cuatro tontos inútiles de la manada de Lobos con gran facilidad, incluso cuando lucharon juntos, y eran supuestamente los combatientes más fuertes en esta Academia, junto a Akane Tendo. Derrotar a una sola chica humana como Nabiki Tendo debería, por lo tanto, no se ningún problema para cualquiera de nosotras, y entonces podemos obligarla a arrodillarse ante Kinnosuke-sama y jurarle lealtad. Estoy segura de que tal cosa lo complacería mucho, pero por qué querría a una suave chica humana como ella cuando él ya tiene a tres consortes fuertes como nosotras, ansiosas por complacerlo, simplemente va más allá de mí entendimiento." El tono de voz de Tiger mostraba su profundo desprecio por todas las mujeres humanas.

"Pero hace tiempo que él no se ha encamado con ninguna de nosotras", dijo Lynx suavemente, su tono un poco lúgubre. "¿Será que no nos encuentra más deseables?"

"¡Cállate, Lynx!" Tiger gritó, su cara ruborizada igualaba el rojo de su pelo por sus propios incumplidos deseos de su maestro. "No ha pasado tanto tiempo. Él esta simplemente distraído por sus frustraciones con la perra Tendo. Ella es la culpable, ¿Me oyes? ¡Todo esto es culpa de Nabiki Tendo!"

"¿Qué hay de Saotome?" Lynx preguntó, haciendo caso omiso del arrebato de Tiger. Su suave voz era reflexiva, y una oreja se levanto con interés en dirección a la pelirroja. "Él podría actuar en defensa de ella. Como con la joven Tendo, después de todo."

"Si él interfiere, entonces lo destruiré", dijo Tiger como un hecho en su tono de voz. "El causo dolor a Kinnosuke-sama por atreverse a interferir con sus planes con la joven perra Tendo, y por ese solo hecho estaré feliz de romperlo en dos." Ella hizo puños con las dos manos e hizo pantomima de la acción, una feroz brillos se mostraba en sus ojos de color verde, las orejas a la cabeza estaban aplanadas.

"Suena como un buen plan, Tiger", dijo Panther. Ella pegó un puño en la parla abierta se su otra mano. "Lo espero con ansías. ¿Así que cuando lo ponemos en acción?"

"No estoy segura", respondió Tiger, sus orejas mostraban su perplejidad. "Yo sugiero esperar y ver por un tiempo. Es posible que seamos enviadas contra la chica Tendo hoy, y entonces podemos divertirnos un buen rato con ella antes de presentar su cuerpo maltratado a Kinnosuke-sama."

"Yo ya extraño a Kinnosuke-sama", Lynx sollozo suavemente. Sus orejas caídas en tristeza.

"¡Cállate, Lynx!" Gritaron las otras dos catgirls al unísono.

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La limusina llegó a los predios de la Academia Whitehall, y Kuno espero brevemente en el interior que el conductor abriera la puerta para él. Él tocaba la empuñadura de su bokken con dos dedos, y sus pensamientos eran oscuras mientras él se encontraba a sí mismo cada vez más afectado durante el corto trayecto hasta Whitehall por tener a su hermana tan lejos de él, su frágil inocencia sin vigilancia de las golosas depredaciones de plebeyos y nobles de menor rango que infestaban el lugar. El pensar en ella hablando con tipos como ese Ranma Saotome lo hacía apretar sus dientes.

'Este día será largo,' pensó él oscuramente, mientras salía del interior del vehículo. Vio a Mikado descansar placidamente en la parte frontal del jardín. Kuno hizo un breve saludo a sus compañeros duelistas del Whitehall, como los miembros del Club de Kendo eran más comúnmente conocidos. A su juicio, su apodo era apropiado, y se enorgullecía así mismo de ser conocido como el preeminente duelista entre todos sus nobles compañeros.

"Saludos, Kuno-kun", dijo Mikado, parándose y sacudiendo invisibles partículas de suciedad de su pantalón. "Veo que tu hermana no vino contigo."

"Ahora entiendo tu frustración, Sanzenin-kun, al tener que soportar los caprichos de una hermana menor," gruño Kuno. "Una hermana puede ser un dolor para un noble, especialmente cuando se vuelve contra su propio hermano por las melosas palabras de un infeliz canalla."

"Entonces, ¿Este hombre muerto caminando tiene un nombre?" Preguntó el otro chico con una extrañamente neutral expresión. Kuno lo miró y sonrió.

"-Sí, lo tiene." La mano de Kuno agarra con firmeza el mango de su arma. "Ranma Saotome. Tengo la intención de humillar al vil miserable en un combate ante todos los que estén allí para presenciarlo. Como guerrero que soy, deberá probar ser poco desafío para mi habilidad. Entonces, cuando este lamiendo el polvo en mis pies, después de que lo haya roto totalmente, yo intento mostrar a mi hermana que hombre débil y sin valor ha elegido su amor."

"Si por alguna casualidad fallas", dijo Sanzenin con un tono tan diplomático como pudo dar. "Yo lo retare también." Una luz brilló en sus ojos mientras hablaba. 'Nadie es digno de tu hermana, mi amigo, mas que yo. Con mucho gusto voy a ayudarte a hacer frente a este advenedizo de baja cuna.'

Kuno gruñó y asintió, agradecido de tener tan abnegado y leal amigo como Mikado para actuar como su segundo. "Será un glorioso el día de hoy. Acabare con el villano con mi fiel arma. Sin embargo, si de alguna manera fallo, entonces mi segundo tomará mi lugar en batalla, pero sólo un milagro divino puede salvar a este miserable de mi sorprendente y humilde habilidad. Marca mis palabras, gentil amigo, voy a derrotarlo, y se arrepentirá del día en que él escuchó el nombre de Kuno."

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Ranma se sentó en su pupitre y miro por la ventana mientras esperaba que llegara su nuevo profesor. Él acababa de escuchar las charlas de la lucha entre Akane y Kodachi de algunos de los otros cadetes en su clase, y la noticia le había dejado sintiéndose mal. 'Este día ya está empezando a lucir mal para mí,' pensaba él, sus ojos tras una nube en movimiento a través del cielo. 'Creo que sólo me voy a ocultar en mi laboratorio una vez que acabe este período.'

La puerta se abrió, todos los ojos excepto el suyo fueron a la puerta, y hubo algunos silbidos inmediatamente dados por varios de los cadetes masculinos. Ranma, desconcertado por los sonidos detrás de él, se volteó para mirar la puerta y a ver al nuevo profesor, una mujer de aspecto impresionante. Los profesores no estaban obligados a usar uniformes como los cadetes, y su traje revelaba más de lo que ocultaba su figura. Estaba vestida con un camisa negra que mostraba una cantidad moderada de escote bajo una chaqueta blanca, una falda gris que descansaba varios centímetros por encima de sus rodillas, y un par de tacones negros. Encima de todo esto estaba una brillante melena de cabello rojizo, que caía entre sus hombros como una oleada de fuego. Sus ojos barrían la sala con una mirada fría, y la calma se restableció rápidamente.

Como una unidad, la clase se levanto y se inclino en saludo a la nueva profesora antes de volver a sus asientos. Ranma, encontrando a la nueva profesora mucho más agraciada a sus ojos que el hombre que había estado antes, y esperaba que Tokimo-sensei estuviera lejos durante mucho tiempo. Ella cerró la puerta detrás de ella y camino la corta distancia a su mesa de trabajo, sus talones hacían un suave sonido de clic sobre el piso de madera dura. Ella puso su maletín en su escritorio y regresó para encarar a la clase, limpiando su garganta suavemente.

"Soy Ayaka Kisaragi, su nueva profesora titular", dijo en una voz clara. Ella se sentó en el borde de la mesa y cruzó sus largas piernas, y el sonido de varias gargantas de varones acompañó esa acción. Algunas chicas no parecían muy contentas con varios chicos en la sala. "Espero que escuchen lo que tengo que enseñar con respeto, y nos llevaremos bien. Crúcense conmigo, y lo lamentaran. ¿Nos entendemos?"

"¡Sí, Sensei!" Exclamo la clase, la voz de Ranma entre ellos.

"Bien," dijo Ayaka, descruzando y recruzando sus piernas en sentido contrario. 'Heh,' pensaba ella con gracia, dejando una sonrisa llegar a su cara. 'Esta será una tarea fácil.' Sus ojos barrían la habitación mientras asentía, complacida. Ella sacó su cuaderno de asistencia de su maletín y empezó a leer los nombres.

"Saotome", dijo por fin, después de leer los muchos nombres y escuchar las respuestas.

"Aquí, Sensei," Ranma exclamo. Ella le dio una muy enigmática sonrisa por un momento, antes de pasar al siguiente nombre. A continuación, volvió a admirar a la nueva profesora. Su preocupación por los acontecimientos de esta mañana se desvanecía en la parte de atrás de su mente.

"Ranma Saotome", de repente exclamo la profesora un poco mas fuerte que antes. "Por favor, repórtese con Fuyutsuki-sensei en su oficina de inmediato." Ranma se levantó, Ayaka asintió su permiso para salir, y se dirigió fuera del aula.

'¿Me pregunto que podrá querer conmigo ahora?'

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Akane lentamente regresó a la conciencia, y la primera sensación que tuvo fue la de dolor. Su cuerpo le dolía por completo. Ella suspiró y trató de relajar su espalda contra el blando colchón debajo de ella. Incluso una simple cosa como respirar dolía, por lo que le hizo tomar unas respiraciones cortas. Cuando finalmente abrió los ojos, lo primero que vio fue a Nabiki en una silla cercana, con una sonrisa en su cara.

"Veo que estás de nuevo entre los vivos, hermanita", Dijo Nabiki con complacida. "Al parecer, tragaste un poco más de lo que podías masticar esta vez. ¿Te duele mucho?" Ella examinó las vendas envueltas alrededor del pecho de Akane.

"Me duele todo", Akane gimió. "¿Cuan mal estoy, Nabiki?"

"No muy mal. Tiene algunas costillas golpeadas, unas contusiones moderadas, y algo de daño muscular menor. Por suerte, ninguno de tus órganos internos fue herido, y también lograste evitar una concusión de milagro. El médico dice que tú deberías estar bien en un par de días si lo tomas con calma." Nabiki se detuvo mientras miraba a su golpeada hermana. "Eso significa no luchar con Ranma-kun en ese tiempo, y nada de peleas matutinas conmigo. Así que, ¿Valió la pena?"

"Toda lucha vale la pena", dijo Akane, asintiendo ligeramente. "Un combatiente solo puede mejorar con desafiar y derrotar a oponentes fuertes." Es algo que su madre solía decir, una frase que adopto en su corazón a través de los años desde su muerte. Ella miraba a su hermana mayor directamente a los ojos. "Tú no conoces la emoción de combatir al igual que yo. Tú no puedes comprender lo que significa para mí el luchar."

'Oh, ya lo creo,' Se dijo Nabiki. 'O al menos estoy empezando a hacerlo.'

"¿Tendo-san?" Dijo la enfermera, mirando a su hermana mayor. "Fuyutsuki-Sensei desea hablar contigo. Akane necesita estar en descanso de todos modos."

"Está bien", dijo Nabiki. Ella le sonrió a Akane. "Tu cuídate, hermanita. Duerme. Ya te llevare a casa después del periodo de almuerzo."

En una cama similar a la que estaba descansando en Akane, Kodachi despertó al escuchar a las dos hermanas Tendo hablando, y ella de inmediato deseó no haberlo hecho. Su cara se sentía golpeada y dolía un poco, y su cuerpo tenía dolor en todo su largo. 'Eso es lo que gano por luchar con tanta arrogancia. Combatir con Asuka es una cosa, Akane Tendo, es otro nivel de amenaza por completo. Ella es mucho más fuerte en combate.' Ella se relajo de nuevo en la cama en la que estaba acostada. 'Eso es lo que gano por subestimarte, Akane Tendo. Sin embargo, la próxima vez que te enfrente será diferente.'

Ella miraba por la ventana, cuando un pájaro había empezado a cantar en el árbol de afuera. "Oh, Saotome-kun," suspiró ella suavemente, su voz sólo un susurro. "Voy a probarme a mí mismo digna de ti. Me entrenaré más diligentemente la próxima vez, y entonces Akane Tendo aprenderá que yo soy la mujer superior para ti. Nadie va a tenerte, mas que yo." Ella cerró los ojos y trato de dormir.

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Ranma estaba esperando en la zona fuera de la oficina de Fuyutsuki cuando Nabiki camino por la puerta. Cuando ella lo vio, un cálido aleteo pasó por su corazón que le sorprendió por su intensidad. Él le dio una mirada neutral, sus propios pensamientos bien escondidos en su rostro. Ella siguió caminando y se sentó frente a él en una de las otras sillas, su habitual aplomo frió regreso a ella. Ella cruzó sus piernas y se arreglo su falda. Una rápida mirada a sus ojos mostraba que estaba mirando a otro lado.

'¿Qué me pasa conmigo y con las chicas últimamente?' La breve vista de las musculares piernas de Nabiki parecía quemar un camino en sus pensamientos. Había algo diferentes acerca de la forma en que caminaba el día de hoy, él lo había notado, pero él no estaba seguro de lo que era. 'Probablemente nada importante', finalmente decidió. Para ocupar su mente, y evitar mirar su cuerpo de nuevo, él recogió una revista de la mesa y empezó a hojearla.

'Esto es tan extraño,' pensó Nabiki. 'Aquí estoy sentada cerca de él, y no puede pensar en alguna cosa que decirle. Después de todo, no es como si se pueda decirle, [Oh, por cierto Ranma-kun, sé todo acerca de lo que estás haciendo en tu laboratorio por que me metí en el anoche. He probado el aparato y ahora tengo todas las habilidades de una versión artista marcial de mí misma en mi cabeza.] Sí, claro. Eso realmente le gustara.' Ella cambió su posición en la dura silla de madera, los sentimientos de atracción que el chico de la trenza evocaba en ella una vez más la distraían, pero ella se sorprendió de que se estuviera produciendo a esta distancia. Casi dos metros separados de sus rodillas.

'¿Me pregunto qué está haciendo aquí Nabiki? Y en eso, ¿Por qué estoy yo aquí? Fuyutsuki-sensei ha tomado mucho más interés en mí durante los últimos días que en todas las semanas que pasaron antes.' Ranma cambió su posición, tratando de acomodarse en la silla y fallando. El sutil cosquilleo que había experimentado en torno a cada una de las hermanas Tendo, y ahora también con Kodachi, estaba ahí de nuevo una vez más. El olor de su suave perfume pasó a través de su nariz, pero él mismo se obligó a ignorarlo.

La puerta de la oficina de Fuyutsuki se abrió en ese momento, lo que altero la incómoda escena. Él les sonrió a ellos desde la puerta abierta y les hablo, "Por favor entren, tengo algunas cosas importantes para hablar con ustedes dos."

Los dos cadetes se pararon. Ranma dejo que Nabiki entrara primera, y él capturo otro toque de su tenue perfume que ella siempre parecía estar usando. Era a la vez estimulante y ligeramente tóxico para él cada vez que lo olía. Sin embargo, se estaba acostumbrando a ello, por lo que el efecto disminuía un poco de lo que había hecho para él en anteriores ocasiones.

Tomaron los dos puestos delante de la mesa de Fuyutsuki, ambas mucho más cómodas que las sillas de madera dura que estaban en el Área de espera. Nabiki cruzó sus piernas cuando se sentó, y Ranma robo otro vistazo a lo que dispuso su falda. Él retiró su mirada de manera rápida y regresó a su atención Fuyutsuki. La pareja fallo en notar la mirada que se habían dado el uno al otro cuando el otro no estaba viendo, pero no Fuyutsuki.

Las posibilidades de que sus acciones levantaban hizo mucho para justificar su reciente decisión con respecto a ellos. 'Es una pena que estaré perdiendo a la otra chica Tendo pronto,' pensó él, mirando la solicitud de transferencia que había recibido por fax una hora atrás. 'Pero parece que estos dos podrían ser todo lo que necesito. Y también está la chica Kuno a considerar. Juzgando por lo que vi de la lucha que tuvo con Akane antes, las habilidades de Kodachi son considerables también. Ella será una excelente reemplazo para la chica Tendo.'

Akane estaba siendo trasferida a la Academia Militar Furinkan mañana, un lugar llenó con varias décadas de tradición, que producía los mejores soldados del Imperio. Un anormalmente alto porcentaje de graduados pasó a llenar los pocos espacios disponibles cada año en los diversos programas de entrenamiento de las fuerzas especiales. La madre de Akane, Kimiko Tendo, anteriormente Kimiko Nakakami, era una antigua graduada de sus venerables salas. Fuyutsuki entendía que era algo como un Leyenda local, aún con varios records aun sin ser batidos. Por su parte, él pensaba que Akane se ajustaría bien allí.

"Supongo que se están preguntando por qué les he llamado a mi oficina," Dijo él gratamente. Se sentó en su gran silla plegable y puso sus manos junto a su escritorio, una paternal sonrisa apareció en su cara. "Se me ha pedido iniciar algunos cambios inmediatos en sus horarios de entrenamiento. Concretamente, en su entrenamiento físico."

Nabiki parpadeó con leve sorpresa, la coincidencia un poco discordante para ella. 'Me iba a poner como voluntaria para unirme a la clase de entrenamiento de Ranma-kun,' Pensaba ella, dando otra furtiva mirada al chico de la trenza sentado junto a ella. 'Esa puede ser la única razón por la que él y yo estemos aquí.'

"¿Qué tipo de cambio, señor?" Preguntó Ranma. Él notó el vistazo que Nabiki le dio a él por la esquina de su ojo.

"Takami-sensei y yo hemos consultado acerca de ustedes dos", dijo Fuyutsuki con calma. "Y hemos decidido que sería en el mejor interés de ustedes dos que Tendo-san se una a ti en tu clase extra de entrenamiento. Nosotros sentimos que daría a ambas partes la oportunidad de sobresalir al pleno límite de sus capacidades."

Ranma examinó brevemente a Nabiki, y dijo: "Pero ella es una chica. Ella no será capaz de mantener conmigo". Él parpadea. '¿Por qué demonios dije eso?'

"¿Qué dijiste, Ranma-kun?" Preguntó Nabiki, un grillo apareció de repente en sus ojos. "Vaya, estamos llenos de confianza, ¿No?" Ella se levantó y planto sus manos en sus caderas, su mirada fría lanzada hacia él. "¿Acabo de escuchar que me retaste a ser capaz de mantenerme contigo?" Desde lo más profundo de sí misma, ella sintió una casi innegable necesidad de competir contra él de repente salio hirviendo hasta la superficie. "Puedo mantenerme con cualquier entrenamiento que tu puedas, Ranma-kun."

"Lo dudo", se rió él, su ego masculino ahora peligrosamente fuera de control. Su nuevo sentido de orgullo machista absorbido de los otros Ranma acababa de tener plena posesión de su boca. "Los chicos son sólo naturalmente mejores al hacer cosas físicas." El la vio a ella levantar una ceja.

"Oh, ¿En serio?" La irritación de Nabiki estaba en aumento. "Sucede que puedo vencerte en cualquier cosa, pero ¿Qué tal las artes marciales?" Ahora era su turno de obtener una mirada divertida de su rostro. Él se puso de pie.

"Si piensas que puedes vencerme, entonces te invito a tratar", dijo Ranma, un poco irritado por el aire de certeza que Nabiki tenia de que podía vencerlo. "Yo nunca rechazo un desafío". Ambos ahora daban miradas similares, confianza que casi era arrogancia.

"Tampoco yo", dijo con firmeza ella, desplazándose para estar nariz a nariz con él, sus ojos casi a su altura. "¿Quieres someterlo a prueba?"

"Cuando quieras, Nabiki. No puedes ser tan dura como tu marimacha hermana, después de todo."

Por su parte, Fuyutsuki simplemente observaba, encontrando todo el intercambio ser simplemente fascinante. Él los miraba enfrentarse, sus posturas conciliaban la agresividad. 'Tan fuertemente competitivos espíritus en cada uno de ellos,' él musito con una sensación de placer. 'Esto sin duda sacara sus mejores esfuerzos. Sin embargo, parece un poco fuera de carácter para ellos, basado en los resultados de sus últimos perfiles psicológicos. Interesante.' Él escogió ese momento para interrumpir a los dos con un fuerte silbido.

Ambos adolescentes parpadearon, mirando a Fuyutsuki con miradas avergonzadas, y luego se sentaron rápidamente en sus sillas.

"Ahora que tengo su atención", dijo él con una sonrisa. "Me doy cuenta que ustedes dos tienen una diferencia de opinión que solucionar, por lo que propongo una prueba. A partir de hoy, Nabiki se unirá a ti en tu clase de educación física, Ranma." El chico de la trenza empezó a rezongar, y el hombre mayor alzaba una mano. "No he acabado de decirles la naturaleza de la prueba. Para empezar, los dos van a tener una pelea de entrenamiento todos los días por las próximas dos semanas, para ver quién es el mejor luchador, ya que ambos parecen estar tan convencidos de que el otro no lo es. Si ella logra derrotarte en al menos cinco de los doce encuentros, entonces tú dejarás tus protestas y trabajaras con ella en tu clase como compañeros."

"Eso no será un problema para mí, señor," dijo Ranma con confianza, escatimando un vistazo a la chica sentada junto a él. "¿Qué te parece a ti, Nabiki?"

"No es un problema para mí tampoco, Ranma-kun." Ella sonrió. "Tendré esas cinco victorias antes de la primera semana."

"Además", continuó Fuyutsuki con una voz calmada, antes de que los dos cadetes pudieran salir a golpes de su oficina. "Ella tendrá tu mismo régimen de ejercicios, Saotome-san. Al ver que ella es un año mayor que tu en su entrenamiento, estoy anticipando que eso será lo menos problemático de la prueba para ella."

"Un poco de competencia será bueno para ti, Ranma-kun," susurro Nabiki con ironía en una sonrisa, encontrando que disfrutaba el molestarlo de esta manera. '¿Me pregunto qué parte de ese inmenso ego es de él, y cuánto de su homólogo?' Por su parte, ella normalmente no era tan abierta competitivamente, y lo sabía, pero había algo en su excesivamente machista actitud hacia ella que le provoco un deseo casi primitivo de ponerse en su contra, similar al que había sentido esta mañana que la había inspirado en su lucha contra Akane. Ella sospechaba que algo de la otra personalidad de Nabiki se mostraba en ella.

"Si puedes mantenerte conmigo, Nabiki, entonces te invito a tratar", dijo Ranma, encontrando un extraño placer al pensar en un reto a su nueva capacidad. "No voy a ir fácil contigo."

"Ni yo contigo, Ranma-kun", dijo Nabiki con otra breve sonrisa. "Espero que seas tan rápido con tus puños como lo eres con tu boca." Lo dos ahora llevaban iguales sonrisas, cada uno subconscientemente reconociendo en el otro algo que sus homólogos nunca habían encontrado antes.

"Mi secretaria tiene sus nuevos horarios en su escritorio," dijo Fuyutsuki, mirando brevemente la interrupción de la contienda. "Recójanlos en el camino de regreso a sus clases."

"Sí, señor", dijeron ambos, casi en estéreo. Ranma se levantó y caminó a la puerta, seguido de cerca por Nabiki. Fuyutsuki sonrió a la puerta después de que se había cerrado tras de sí.

"Interesante", dijo a la sala vacía con una sonrisa en su rostro. "Será fascinante ver a dónde conduce esto." Él sacó un cuaderno y comenzó a escribir.

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Nodoka escuchó sonar el teléfono mientras estaba doblando la ropa de la lavandería. Ella rápidamente silencio el sonido procedente de la televisión con su remoto y contesto. Genma acababa de irse para dar sus clases de la mañana, por lo que tenía la casa para ella por las próximas horas.

"Hola. Residencia Saotome", dijo ella en el receptor.

"Buenos días", dijo una agradable voz femenina en el otro extremo. "Estoy buscando a Nodoka Saotome. ¿Tengo el honor de hablar con ella ahora?"

"Sí." Ella asintió ligeramente mientras hablaba. "Esta es Nodoka Saotome. ¿Con quién estoy hablando?"

"Mi nombre es Otsu Mitsuma", dijo la voz al otro lado del teléfono. "Su nombre se me fue dado a mí en una referencia. ¿Usted tiene un hijo con el nombre de Ranma Saotome?"

"Sí, lo tengo", respondió Nodoka, perpleja de a donde iba esto. "¿Qué es todo esto?"

"Este es su día de suerte, Saotome-san. El nombre de su hijo ha sido seleccionado para recibir un servicio casamentero donde yo trabajo, todo de forma gratuita para usted."

"¿Qué agencia es esta?" Nodoka se preguntó por su buena fortuna. Esto sonaba demasiado bueno para ser verdad para ella.

"Perdón, llamo desde Crisantemo, donde damos los mejores servicios para Parejas jóvenes del Imperio", dijo Otsu brillantemente. "Ofrecemos una línea completa de servicios de matrimonio, pero somos más conocidos en el servicio de formar parejas. Y me han autorizado a proporcionar información de nombres y portafolios de tres mujeres jóvenes, cada una de ellas una posible esposa para su hijo, Ranma. Si está disponible, puedo encontrarme con usted en cualquier momento del día y presentarlas a usted. Creo que encontrará la nuera que ha estado buscando entre ellas."

Nodoka se encontró sonriendo. Esta llamada de teléfono era la respuesta a sus oraciones. Genma se había preocupado por el considerable costo de contratar una casamentera, alegando que Ranma era todavía demasiado joven para ese gasto, pero ahora le habían dado la oportunidad de pasar por alto esa objeción. Esta noticia era maravillosa.

"Podríamos reunirnos para comer, supongo", dijo ella, después de todo no deseando sonar demasiado impaciente si se trataba de algún tipo de estafa.

"Excelente idea, Saotome-san. ¿El Hanna Miller le suena a usted? Es un excelente restaurante."

"Eso suena bien para mí." Nodoka siempre había estado interesada en comer ahí. "¿Digamos al mediodía?"

"Mediodía será. Hasta entonces."

Nodoka colgó el teléfono con una amplia sonrisa en su rostro. '¡Voy a encontrar una novia para Ranma hoy!'

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Ranma abrió la puerta de su laboratorio, acabando de venir de su reunión con Fuyutsuki. Él prendió las luces con un movimiento casual, entrando en la habitación y cerrando la puerta antes de que todas pudieran siquiera prenderse por completo. '¿Por qué demonios abre hablado así delante de Nabiki?' Se preguntó él, cayendo sobre el sofá y poniendo un brazo sobre sus ojos. 'Debo haber sonado como un completo patán. Si yo hubiera dicho tal cosa a mi homóloga femenina cuántica, Ranko, estarían sacando mi cuerpo de un muro.'

Él repitió el incidente en su mente, pero todo lo que parecía enfocarse era la visión de las piernas de Nabiki, expuestas al igual que sus rodillas por ese breve instante que las había mirado. Él sacudió su cabeza y se sentó, preocupado por sus pensamientos. Y sin embargo, ¿De dónde saco esa actitud tan ruda? Ella debe saber que vencí a su hermana pequeña en una lucha, de modo que ¿Por qué piensa ella que puede ganarme? Tal vez hace unos días podía, pues ella ha estado aquí, entrenando en la Academia un año más que yo, pero ahora yo tengo las habilidades del heredero la Escuela de Artes Marciales de Combate Libre dentro de mí. Ranma siempre gana al final, y creo que me estoy acercando a su capacidad física en mi propio entrenamiento, de modo que muy pronto voy a ser el mejor luchador de la región. No hay manera de que Nabiki sea capaz de igualarme.

Él decidió que un poco de trabajo le distraería de sus nuevos problemas, así que conecto la red de su equipo. Mientras calentaba, saco su cuaderno y comenzó a hacer unas pocas notas en los márgenes de todas sus nuevas notas tomadas del trabajo de Ranko. Un breve tiempo después, estaba escribiendo en su cuaderno cuando notó algo extraño en sus mensajes, por la esquina de su visión.

* SISTEMA TIENE 6 COORDENADAS CUÁNTICAS ALMACENADAS EN LA MEMORIA

'¿Que de-?' Ranma se sorprendió al ver eso. Se supone que solo había cinco. Él tocado algunas teclas, dejando que el programa se ejecutara para arrancar el sistema general de registro. Él lo leyó casualmente antes de notar algo extraño, y él miro en breve asombro la pantalla. '¿Alguien realizó una inmersión total de prueba a las 4:17 p.m. de ayer?' Él trabajo en su teclado, sacando el archivo en cuestión y buscando en su registro individual. 'Pero eso fue cuando estaba en medio de mi clase de entrenamiento.'

Reinicio el programa y cargo el archivo. Él toco un par de teclas y se sorprendió una vez más al ver a este nuevo colocado entre las líneas temporales. "Esa misma región de paraversos de nuevo", murmuro en voz alta, tocando su dedo índice contra su barbilla mientras esa descansaba en su palma. 'Estoy empezando a pensar que hay algo extraño acerca de esa área de líneas temporales, ya que sigue atrayendo los escáner de mi equipo de exploración más de lo que indican las estadísticas. Pero este mundo no fue encontrado utilizando una exploración mía, ¿Entonces que mente fue usada como plantilla? Dado que no soy yo, puede que ni siquiera haya una contrapartida mía.' Él se encogió de Hombros. 'Sólo hay una forma de saberlo con certeza.'

Sus dedos tocaron el teclado rápidamente, poniendo todos los parámetros habituales para una prueba, pero sólo por diez minutos. Él escribió algunas ordenas más antes de finalmente tomar el auricular y sentarse de vuelta en el sofá. Él coloco el auricular en su cabeza y cerró los ojos.

"Iniciando el ciclo de carga."

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*** Tierra +4,614, +4,496

El breve período de inexistencia que acompañaba el entrar en la mente de uno de sus homólogos cuántica paso rápidamente. Ranma tenía sus sospechas de que simplemente se estaba acostumbrando a ello, pero todavía lo hacía sentir inestable cada vez. Él parpadeo, encontrándose a sí mismo sentado en un pupitre en un aula que era similar al de la otra línea Temporal. Tenía una muy extraña sensación de deja vu, a pesar de que el Aula le recordaba que él efectivamente estaba ahora más lejos de él que la estrella más lejana.

Él miró hacia abajo y vio que usaba un uniforme de la secundaria Furinkan. El aula estaba extrañamente tranquila, sólo los débiles toque de los lápices sobre el papel. Él miró hacia abajo al documento sobre su escritorio. '¿Examen de Inglés?' La mitad de la página estaba llena, pero algunas de esas respuestas estaban mal. No sabiendo qué más hacer, más que esperar a que los recuerdos de esta vida aparecieran, comenzó a llenar el resto de la Página.

Mientras diagramaba una sentencia de las preguntas, el Calidoscopio esperado de nuevos recuerdos de repente giraba a través de su mente. En esta vida, él había sido criado por su madre y Soun Tendo, y su padre se había llevado a Nabiki(?) a un viaje de diez años de entrenamiento, y ahora ella es la heredera de la Escuela de Combate Libre. Ellos regresaron hace semanas, y un mundo de rarezas había llegado con ellos.

Ella estaba maldecida a convertirse en chico por el extraño poder de los estanques de Jusenkyo, y su padre, una vez más, maldecido a ser un Panda. '¿Por qué papá se sigue convirtiendo en un oso panda?' Se preguntó él por un momento. '¿Hay alguna extraña significado detrás de las maldiciones? Por lo menos yo no me convierto en chica en esta vida. ¿Pero Nabiki se convierte en un chico?'

Más recuerdos giraban delante de los ojos de su mente, demasiado rápido para lograr captar realmente algo más que las experiencias básicas. Su otro yo había estado enamorado de la Kodachi de aquí por muchos años, pero ella nunca había regresado su interés. Kuno era su amigo en esta vida, persiguiendo a Nabiki como enamorado en su forma femenina, pero como enemigo en su forma masculina. Era como ver la vida de su otro análogo reflejado en un espejo de la Casa de la Risa, la gente era similar, pero también diferentes.

Ukyo Kuonji se había presentado, y también Ryoga Hibiki. Ryoga había estado enamorado de Nabiki, y termino por esta como rival de Ranma, aunque estaba ahora interesado en Akane. Akane había sido su prometida, pero ese había sido un esfuerzo condenado por años. Tras el regreso de Nabiki, los acontecimientos habían seguido un camino que le llevó a convertirse en su novio, para llevar a cabo la unión de las Escuelas de Combate Libre, ya que Soun Tendo había entrenado a su análogo es su mitad de la escuela aquí. Los eventos habían ido en un camino radicalmente diferente desde allí.

Una cosa se destaco en esta vida que hizo a Ranma sentirse extrañamente triste; él no era el centro de atención. En esa otra vida análoga, donde era el heredero de la Escuela, era el héroe que abordaba todos los problemas que se planteaban. En esta, era sólo un personaje de apoyo, y eso le molestaba un poco.

Otras imágenes giraron a través de su mente a la velocidad del pensamiento:

Happosai, el fundador de la Escuela de Combate libre y posiblemente el ser más pervertido de todos los tiempos.

Perfume y Shampoo, Amazonas que habían perseguido a Nabiki desde China. Shampoo estaba embarazada de Nabiki-kun. La mente de Ranma dio vueltas con esto último.

El Director de Furinkan, el padre de Kuno, con un fetiche por todas las cosas hawaianas.

Ukyo y Perfume se hicieron pareja. Ranma parpadeó, pero el recuerdo se fue rápidamente.

El Ronin del Camino llegó a Furinkan-

Su visión de repente se puso de color gris, y todos sus pensamientos se dispersaban a través de los golfos del superespacio que había cruzado. Había algo en esa última memoria parcial, algo importante por conocer, pero se había ido a la inexistencia.

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*** Tierra 0.000,0.000

"Ciclo de Recuperación completo", entonó la voz de la computadora.

Ranma yacía en el sofá y dejo que su mente trataba de ordenar los recuerdos. Él tenía la esperanza de que le dieran una pista de quien hizo uso de su aparato, pero ninguna había aparecido en la memoria de su homólogo. Esa otra versión de él había vivido una vida relativamente normal, hasta que Nabiki había regresado. Ella era la heredera, y no él, y el mundo se cambió drásticamente a raíz de esas diferentes opciones.

Sentándose, él puso el auricular sobre la mesa, sus ideas de un una maraña de maravillas. 'Tantas posibilidades en la manera en que las cosas podrían haber resultado,' pensó él con una extraña sonrisa en su rostro. Puso su mano en un puño, sintiendo los músculos de su antebrazo endurecerse. 'Yo sólo desearía poder sacudir este sentimiento de que algo está a punto de pasar, en alguna parte.'

Había un pensamiento que salía de la parte de atrás de su mente, penetrando sus ideas. Era algo que había observado en el archivo de registro de las Pruebas que hizo. Encogiéndose de hombros, se sentó en la silla delante de su terminal y comenzó a escribir. Él saco el archivo de registro de su prueba completada. Nada parecía fuera de lo común. Vio que el sistema estaba funcionando un poco por encima de lo normal en referencia a unas pocas zonas, pero todo parecía estar bien.

Luego saco el archivo de registro de la prueba que se hizo durante el momento en que estaba en su clase de entrenamiento. Corrió los números, vio los Gráficos de los distintos sistemas de cálculos mientras había muchos minúsculos ajustes que se necesitaban durante un plazo para mantener la señal de pulso cuántico optimizada. Fue allí que al final lo vio, y sus ojos se ampliaron.

"¿Qué diablos?" Él murmuró en un tono bajo. El cerró ese archivo y corrió el de su primera prueba. Lo mismo estaba allí, a idéntico grado de variación del valor inicial. Él corrió rápidamente a través de los archivos de registro en cada una de sus otras pruebas, pero sólo hubo otra ocurrencia de importancia.

Lo que estaba viendo era un aumento de poder de la cantidad de flujo de bobina. Durante el ciclo de recuperación de su primera puesta en marcha, los niveles de potencia fluctuaron al alza de siete por ciento más de la base de referencia durante la secuencia de recuperación. Al realizarse la prueba que se produjo ayer por la tarde, exactamente la misma cosa se había producido. Hay una sola instancia de otros aumentos que tenían lugar durante el ciclo de recuperación frente a otras pruebas, durante la visita de Ranma a la Tierra de Ranko. Pero había también uno así en el ciclo de carga.

'Estos misteriosos aumentos repentinos podrían explicar cómo terminé con las habilidades de mi Homólogo artista marcial en mi cerebro,' pensó él, aunque no había notado nada de Ranko en sí mismo, tomando su barbilla en la mano mientras miraba los gráficos en la pantalla. 'Pero, ¿Quién es el sujeto de la prueba de ayer?'

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Nabiki se sentó en su clase de Historia Imperial y estaba bastante aburrida. Ella había leído el material que se discutía hace más de dos semanas, y ya entonces le aburrió mucho. Ella ocupaba su tiempo pensando en lo aburrida que había sido su vida hasta antes de ayer, pero había necesitado de un shock a su sistema al mirar su vida a través de nuevos ojos para ver lo gris que había dejado a si misma convertirse en el interior. Ella ya no quería la vida que había sido su única opción antes de ayer, no realmente.

'Tú y yo necesitamos hablar, Ranma-kun,' se dijo ella, mientras su viejo fósil de profesor repasaba la lección. 'Después de que te muestre que soy tan buena como tu. No, mejor.'

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Lentamente recuperando la conciencia, Akane despertó para encontrarse a sí misma en la enfermería esperando la escolta de Nabiki. Ella había tenido el sueño mas maravilloso sobre Ranma y sus habilidades, uno en la que ella era la matriarca fundadora de una nueva y mejor tribu de Amazonas. Todos sus miembros eran mujeres de casta japonesa y llenas de vida, similar a las Amazonas de China que aspiraban a casarse con hombres del Imperio y convertirse en ciudadanos con todos los derechos. Ella podría incluso dejar que algunas de las Ancianas Chinas enseñen a su tribu, por lo menos hasta que no tuvieran más que enseñar. Ella se abrazó suavemente a sí misma, sintiendo un leve placer a esas memorias de ese sueño que ahora se desvanecían, en la que finalmente Ranma la conquistaba como siempre había esperado que un hombre lo hiciera, pero el dolor de sus magulladas costillas rápidamente hizo que dejara esa acción.

A pocas horas de sueño habían restaurado gran parte de su energía, aun cuando no hubieran sanado sus heridas. Sentía el dolor de sus magulladuras y moretones, Un poco sorprendida de lo profundo que eran. Normalmente muchas de sus magulladuras se iban después de unas horas. 'Kodachi es una gran combatiente. ¡Pero no tan grande como yo!' Pensó ella con orgullo. Sus lesiones representaban las razones por las que tendría que dejar su búsqueda de Ranma por un tiempo. Aunque su ceño fruncido pronto se convirtió en una sonrisa, mientras recordaba la gloriosa lucha de la mañana, y su triunfo final sobre su enemiga. 'Pero por lo menos le mostré a esa molesta perra quien es la mejor mujer,' pensó ella felizmente, mientras hacía un puño con la mano y recordaba lo bien que se había sentido cada vez que uno de sus golpes habían dado en el cuerpo de Kodachi.

Ella puso sus manos detrás de su cabeza, ligando sus dedos, y miraba hacia el liso techo blanco. Hubo varios dolores leves procedentes de diversos puntos en su parte superior del cuerpo por su acción, otro recordatorio de la batalla con la niña aristócrata. Hace mucho tiempo se había entrenado a si misma a reconocer una lesión, catalogar el daño, modificar sus tácticas si es necesario, y luego hacer caso omiso de ello mientras luchaba. Más lenta que muchos de sus mejores oponentes, ella había aprendido a recibir un golpe y seguir peleando como el pilar de su táctica. Era algo bueno que lo hubiera hecho, ya que estaba seguro de que los ataques finales de Kodachi la hubiera acabado en seco. Akane movió su lengua en el interior de su mandíbula, sintiendo el levemente aflojado molar.

'Tanta fuerza tenía Kodachi,' Se dijo, casi decepcionada que había ganado. 'Aún así, ella debería haber esperado perder cuando me desafió. Después de todo, soy una verdadera guerrera, probada en batalla, como mi madre antes que yo, y mi propia fuerza lo ha demostrado muchas veces. Si esa mimada debutante sabe lo que es bueno para ella, entonces ella regresara a esa escuela llena de nobles debiluchos donde ella pertenece. Ahora que he demostrado que Ranma me pertenece por derecho. Se merece una fuerte mujer a su lado, alguien que pueda mantenerse con sus conocimientos de artes marciales.'

Una cortina rodeaba su cama y la separaba de la siguiente cama en el Área de enfermería, pero Akane podía sentir a otro ocupante en la habitación. Ella razono que era probablemente Kodachi. Ella no estaba segura cómo sabía de la presencia de la otra chica, pero lo hizo. Se debatió en decir algo durante varios minutos.

En el otro lado de la cortina, Kodachi descansaba incómodamente. Su cuerpo dolía un poco por los graves golpes que había sufrido hace unas pocas horas, pero descansar la había ayudado a restaurarse mucho. Ella lentamente rodó a un lado, tratando de ponerse más cómoda mientras pensaba acerca de su lucha por la mañana con la chica Tendo, y su derrota. 'Lamento haberte fallado esta vez, Saotome-kun,' pensó ella mientras con dolor trataba de encontrar una posición que alivie la presión sobre sus golpes. 'Me subestime en exceso durante la lucha, y ese fue un muy costoso error. Uno que no tengo la intención de hacer de nuevo.'

Ella cerró una mano en un puño compacto, los músculos de su antebrazo rígidos debido a la presión que daba. Ella levanto su puño y lo sostuvo sobre su pecho mientras hacía silenciosa y solemne voto a si misma. 'Akane Tendo caerá ante mi mano, Saotome-kun, te lo juro, y entonces tu y yo estaremos libre de su molesta interferencia. Tú mereces una amante mujer como yo en tu vida, alguien que haga una casa para ti. Déjamelo a mi, y me encargare de esa salvaje bruta.'

Una bonita fantasía del chico de la trenza abrazándolo después de su eventual triunfo sobre Akane trajo una sonrisa a la cara de Kodachi mientras yacía su mano abierta sobre su pecho. Ella podía verlo ahora en sus pensamientos.

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La batalla había sido evidentemente brutal y salvaje hasta este momento, una larga y difícil lucha en la que sólo uno puede ganar al final. Dos poderosas mujeres guerreras, encerradas en un mortal combate, puños y patadas intercambiándose mientras la lucha entre ellas se hacía mas fiera, la sangre goteaba de varias heridas, y mezclada con su sudor caliente. Una guerrera, Akane, tenía una mirada en su cara y cuerpo que lucía vagamente demoníaca. Y la otra guerrera, Kodachi, llevaba un aire de noble virtud en su forma. Con un poderoso golpe, la lucha entre ellas finalmente llegó a su fin. Una guerrera cayó, su cuerpo no podía seguir luchando, una mirada de temor lleno sus ojos mientras ella miraba hacia la victoriosa.

"¡Lo siento, Kuno-sama!" Akane gritó en terror mientras se ponía de rodillas ante la otra chica. Derramando lágrimas mientras ella comenzaba a rogar por misericordia y perdón, su corazón lleno de pena por siquiera tratar de elevarse de su ligar y tratar de reclamar a esa hermosa figura para detrás de su adversaria, a sabiendas de que él está por encima de una humilde miserable como ella. Incluso su fuerza bruta y astucia animal demostraba ser incapaz de rivalizar con una verdadera guerrera como Kodachi Kuno.

Ranma dio un paso adelante, su cuerpo vestido en túnicas de seda fina, la imagen de un noble señor del Imperio. Su mirada era fría mientras miraba a la patética figura que se humillaba ante su único y verdadero Amor. Él con disgusto dio la espalda a la débil Akane, mientras ella seguía llorando y rogando por misericordia y perdón. Él tomó suavemente la mano de Kodachi en la suya y ayudó a su dama a alejar del campo de batalla.

La pareja camino una corta distancia, y mientras el sol comenzó a subir, se detuvieron y empezaron a mirarse a los ojos, un verdadero amor por el otro les quema en su interior. Él la tomo en sus brazos, agradecido por sus esfuerzos en salvarle de alguien tan indigno. Llevo sus ansiosos labios para un beso cálido y apasionado. Ella sentía un sonrojo de dama llegar a sus mejillas por lo profundo de su deseo por ella.

'Oh, sí, Saotome-kun,' pensaba ella con certeza. 'Por ti, derrotare a cualquier enemigo que se interponga entre nosotros y nuestro destino juntos. Ninguna otra mujer te tendrá, porque tu destino está conmigo.'

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La fantasía de Kodachi se desvaneció, y se encontró mirando fijamente la cortina alrededor de su cama. Había una picazón en su nuca diciéndole que un enemigo estaba cerca, y ella estaba segura de que sólo podía significar una cosa, que Akane estaba cerca. Esta realización saco a su mente lejos de su fantasía, y sus ojos miraron la cortina.

"¿Estás despierta, Kodachi?" Akane gritó, su voz en tono neutral. "Puedo oírte moverte".

"¿Qué quieres, Tendo?" Gruño Kodachi. Ella se acostó de espaldas una vez más. Era la más cómoda de las muchas posiciones que ella había tratado.

"Así que, ¿Vas a renunciar a tratar de quitarme a Ranma ahora?" Akane a propósito dio un tono de reto a sus palabras, con una sonrisa en su cara mientras miraba al techo. "Después de todo, he demostrado que soy la mejor mujer."

De repente, la cortina de la cama de la chica Tendo se hizo a un lado y una Kodachi furiosa estaba allí, casi ardiendo en ira. El dramático efecto fue rápidamente arruinado sin embargo cuando su breve oleada de adrenalina se desvaneció, dejándola caer un poco contra el marco de la cortina, su cuerpo temblando ligeramente. Los ojos de la chica aristócrata fijos en su enemiga, y su expresión facial hablaba.

"¿Tú crees que me has vencido?" Kodachi exigió, ira resonando en cada tono. Su respiración se profundizaba un poco. "Eso fue sólo la primera ronda, Akane Tendo. La lucha entre nosotras por Ranma no ha hecho más que comenzar." Ella de nuevo se sentó en su cama, pero sus ojos seguían centrados en la cara de la otra chica. "Además, no me has derrotado. Fue un empate, ni uno de nosotras salió del campo bajo nuestro propio poder por lo que supongo. De lo contrario ¿Por qué estás aquí, y por qué yacías inconsciente hace unos minutos?"

Akane sintió una extraña especie alegría llenarla, mezclada con ira a Kodachi por su continuo desafió a su voluntad. Ella sonrió en una molesta forma al darse cuenta de que había encontrado una nueva compañera de entrenamiento, que probaría sus habilidades en la lucha hasta el límite más un premio que sabía valía la pena luchar con todo en el fondo de su ser. Un momento más tarde, su rostro cayó en un profundo ceño fruncido cuando ella se sentó en su cama, todos sus movimientos eran rígidos por los dolores de sus heridas. Ella miraba a la otra chica y dijo: "¿Ah, sí? Parece que yo no te golpee lo bastante fuerte para alejarte. ¡Hay más de lo que te di esta mañana esperando!"

"Tú no eres una mujer capaz de ganar la guerra declarada entre nosotras, Akane Tendo", dijo Kodachi fríamente. "Tuviste simplemente suerte hoy, ya que subestime tu resistencia como oponente. Sin embargo, la próxima vez será diferente, y seré yo la que quedará parada sobre tu golpeado cuerpo al final. Saborea tu victoria sobre mí el día de hoy, ya que fue la última vez." Sus puños agarraron con fuerza las sabanas de su cama, mientras la profunda ira aumentaba en ella, una vez más, y la necesidad de proteger a Ranma de la otra chica que la estaba viendo con una mirada igualmente intensa.

"Mejor trae amigos la próxima vez, Kodachi, muchos de ellos," gruño Akane con enojo, ya que rápidamente pasó ambas piernas sobre el borde de la cama. Ella puso su mano derecha en un puño, los músculos de su antebrazo igual de rígidos que los de Kodachi. "Eres tu la que no es mujer suficiente para vencerme. Voy a tener Ranma para mí, y no me detendrás. ¡Él es el mío!"

Las dos se pusieron de pies. Ambos luciendo un poco inestables en sus piernas, mientras se miraban a los ojos con enojo. Akane se adelanto y tomó con un fuerte agarre la tela de la blusa blanca de la otra chica blanca con la mano izquierda. Kodachi, por su expresión facial visiblemente afrentada por tal acción, igualo el movimiento y agarró la blusa de Akane con su propia mano izquierda. Ellas estaban nariz a nariz, sus rostros separados por sólo pocas pulgadas, cada uno con desnudo odio en sus ojos brillantes. Ambas trataran de vencer a la otra en miradas pero fallaron.

"Tendrás a Saotome-kun sobre mi cadáver, Akane Tendo", retumbó la Joven noble en tono fríos como hielo, su cuerpo resonando con su indignación. Ella podía sentir la adrenalina comenzar a correr a través de su maltratado y debilitado cuerpo, y su respiración se profundizo un poco más. "La última cosa que necesita es una pequeña salvaje como tu. Una bárbara como tú no podría darle nada de amor y ternura que un hombre como él necesita. Tú probablemente no sabes ni la primera cosa sobre atender a un hombre, puedo apostarlo." Que esa declaración se podría entender de varias formas no parecía molestar a Kodachi en ese momento. Que la condenen si ella dejara que esa chica que la miraba directamente a los ojos tuviera a Ranma.

"¿Ah, sí?" gruño la chica Tendo. "Como si un hombre fuerte como mi Ranma pudiera encontrar algún uso de una suave, mimada, debutante como tú." Su voz goteaba con sarcasmo mientras le sonreía a Kodachi. "Yo ya te demostré que una vez que una malcriada niña rica como tú no es capaz de tomar a mi Ranma lejos de mí. ¡Así que vuelve a salir con tu primo/hermano/padre, como prefieras llamarlo a él! 'Ranma es mío'!" Ella puso su mano libre en un puño, a momentos de llevarlo a la cara de Kodachi, y la otra chica estaba haciendo lo mismo, cuando una voz interrumpió.

"Yo simplemente no puede dejarlas a ustedes solas por mucho tiempo, no es así, ¿Damas?" Preguntó una voz sardónica en la puerta. Nabiki miraba a su vez al par mirarla en sorpresa, y ella hizo un sonido ticleante en su boca al ver a las dos niñas dispuestas a golpearse mutuamente a una pulpa de nuevo. "Quiero decir, en serio, ¿No pueden las dos esperar hasta que se curen un poco antes de iniciar otra lucha entre sí?"

"Tu hermana empezó esto, Nabiki Tendo", gruño Kodachi, sus ojos devolviendo la mirada a su adversaria una vez más, la mano que agarraba la blusa de Akane ya apretaba un poco más. Se sentía a la otra niña haciendo la misma acción en respuesta, y regresaron a mirarse entre sí. "Ella tiene una muy desagradable tendencia a reclamar cosas que realmente no le pertenecen."

"¿Quién dice que Ranma no me pertenece?" Akane le gruño en respuesta. Su puño derecho puesto de nuevo en posición de ataque, así como el de su enemiga. "Voy a luchar contra cualquiera que intente arrebatármelo." Ella brevemente sonrió a la otra chica. "Y yo ganare, también."

El súbito silbido de Nabiki sorprendió tanto a las chicas lo suficiente para separarse antes de que pudieran empezar a tirarse golpes la una a la otra de nuevo. Ella ingresó en la enfermería y se mostró agradecida de que la enfermera estaba fuera de la sala. Con una breve sonrisa, la mayor de las Tendo recogió la chaqueta de Akane de la silla donde yacía, y luego miró a las dos chicas de manera significativa con una ceja levantada. Ellas con renuencia soltaron los agarres de la ropa de la otra y se separaron. Ella arrojó a su hermana su chaqueta.

"Vístete, Akane", dijo ella. "Estoy aquí para llevarte a casa. Necesitas descansar si quieres estar en condiciones de luchar de nuevo en breve, ¿Verdad?" Ella estaba parada con su pie suavemente tocando el suelo repetidamente mientras su hermana se ponía su chaqueta. Kodachi se sentó de nuevo en la cama y solo miro a la joven Tendo.

'Estas dos realmente tienen un odio serio la una por la otra,' Nabiki pensó con otra breve sonrisa. 'Fue bueno que me decidí a hablar con papá esta noche sobre hacer que Akane se aleje de aquí, o me temo que podrían matarse la una a la otra. Y mi hermanita realmente será mucho más feliz en Furinkan, ya que he escuchado que a todos los estudiantes allí les encanta la lucha tanto como a ella. Estoy segura de que no tardara en encontrar un chico allí que tome el lugar de Ranma-kun en su corazón, ya que todo lo que realmente necesita es un artista marcial fuerte con quien luchar. Entonces todo lo que tengo que preocuparme es deshacerme de Kodachi.' Mientras ella estaba considerando estas cosas, Akane termino de acomodarse su ropa, excepto por su corbata, que ella dejó desatada.

"Nos vemos, Kodachi," dijo Akane con una mirada de superioridad mientras veía la cara de la otra chica. "No voy a ser tan suave contigo la próxima vez." Ella recogió su mochila y salio de la sala. Nabiki suspiró y siguió detrás de ella. Las dos caminaban por el pasillo, dejando a la joven noble mirándolas por la puerta media cerrada.

'Te mostrare el verdadero significado del dolor la próxima vez que peleemos Akane Tendo,' pensó Kodachi frunciendo el ceño mentalmente. Rápidamente empezó a buscar su camisa y a vestirse. Su camisa estaba yaciendo doblada sobre una de las sillas, y ella la recogió.

Fuera en el pasillo, Ranma se asomaba por una esquina y una vez más fue finalmente recompensado al ver a Akane y Nabiki caminando por el pasillo hacia la puerta principal de la Academia. Dio un suspiro de alivio cuando salían afuera. El se había sentido algo responsable por las acciones de Akane contra Kodachi toda la mañana, y se había distraído en su trabajo. Todo lo que tenía para mostrar tras varias horas en su laboratorio esta mañana eran unas meras notas en su cuaderno. No era típico de él distraerse tan fácilmente, pero había muchas cosas sucediendo en su vida ahora. El seguía teniendo la sensación de que una explosión o algo así eran inminentes, y lo ponía nervioso.

'¿Me pregunto si Kodachi se alegrara de verme?' Pensó él mientras doblaba una esquina una vez más. 'Akane, probablemente, la golpeó por mí, así que yo no la culpo si ella se molesta conmigo por eso. Quiero decir, después de todo, ella lo hizo para demostrar a su manera y dejar bastante claro que ella era mi novia o algo así.' Acopio lo poco que le quedaba de su coraje, el casualmente camino por el pasillo a la sala de enfermería. Él se asomo por la puerta para ver a Kodachi ponerse la chaqueta de su uniforme, pero su corbata estaba suelta y un par de botones de su blusa estaba desabotonado. Hizo una mueca al ver los oscuros hematomas en su cara. 'Tal vez esto no era una buena idea después de todo.' El tenía una vaga noción de llevarla a su casa, ya que se sentía responsable de todo lo que paso.

Kodachi vio a alguien mirarla a través de la puerta abierta mientras se vestía, pero no fue capaz de saber quién era exactamente. Ella se dirigió rápidamente a la puerta y la abrió de golpe, su mano fue a agarrar al pervertido que estaba mirando a una inocente joven soltera como ella, con la intención de hacer grave daño corporal a esa persona. Sus ojos inmediatamente se ampliaron cuando vio que era Ranma, su mano se detuvo a meras pulgadas de distancia de agarrarlo por la tela de su chaqueta. Ella llevó rápidamente su mano a su boca mientras se sonrojaba, avergonzado por su cercano error.

Ranma saltó un poco cuando Kodachi prácticamente sacó la puerta de sus bisagras cuando la abrió. Empezó a balbucear rápidamente algún tipo de disculpas, una protesta reflexiva de su inocencia casi era dicha antes de que lograra tragar algo. Todo lo que hizo en su lugar fue dar una sonrisa nerviosa con su rostro y pararse allí como un idiota.

"S-Saotome-kun", dijo ella, sus ojos mirando los suyos con algo de confusión. Rápidamente le dio un buen saludo, su corazón latía con nerviosismo y otras emociones la llenaban a ella. "Estoy feliz de verlo, Saotome-kun." Ella podía ver que estaba luciendo incómodo, y ella rápidamente miro hacia abajo para asegurarse de que los botones de su blusa estaban suficientemente altos. Sólo los primeros dos botones estaban sueltos, y dio un breve suspiro de alivio por la preservación de su modestia, ruborizándose ligeramente en sus mejillas mientras un rápido pensamiento o dos pasaron por la cabeza de otra naturaleza.

"Yo vine a ver cómo estabas," dijo Ranma nerviosamente. El se inclino ante ella con rapidez, tal vez un poco más bajos de lo que en su opinión era necesario entre ellos dado sus sentimientos por él, pero su corazón se calentó al ver su respeto por su estatus en el Imperio. "Escuche hablar de tu lucha con Akane."

"La pequeña bruja me ataco", dijo ella con desgana, antes de llevar rápidamente antes su mano a su boca para reír nerviosamente. Empezando de nuevo una voz tan dulce y gentil que ella tenía, ella dijo mientras miraba de reojo la cintura de Ranma, "Digo, Tendo-san comenzó la lucha, y yo me defendí. Sin embargo, creo que logre aprender mucho de mi al ir contra ella. Y ahora que se de lo que es capaz, si lo hace de nuevo, yo tumbare cada diente de su cabeza." Ella sonrió, en un intento de tranquilizarlo por su capacidad para cuidarse sola.

"Uh, sí." Comenzó a abrir la boca para decir algo más, pero las palabras sólo no salían. Era extraño en él, pero la golpeada forma Kodachi aún lucía hermosa para él, un casi desenfreno que no había estado presente en ella antes. Intentó de nuevo decir algo, y las palabras sólo salieron en una rápida prisa, "Pensequesinoteimportabateacompañohastatucasa". Ella se sonrojó por sus mejillas una vez más, su corazón lleno de sentimientos cálidos por el científico de la trenza ante ella.

'A él si le importo,' pensaba ella, un suave suspiro de felicidad escapaba entre sus labios. Ella misma se perdió brevemente en una fantasía acerca de los dos, con él como su marido mientras ella le saludaba en la puerta con debida modestia, como una verdadera noble dama haría. De entre sus labios otro suave suspiro surgió rápidamente mientras sus pensamientos vagaban en zonas bastantes inadecuada para que una soltera joven de noble cuna pensara sobre un hombre joven. Ella reinaba en sus pensamientos mientras lo miraba, pero sus ojos brillaban con deseo. 'Oh, Saotome-kun, quiero luchar en mil batallas si eso me permitirá permanecer a tu lado, y diez mil más para ganar tu amor.'

Ranma cambió su postura nervioso. Kodachi estaba mirándolo en un manera rara, una especie de mirada de corazones y flores, y él no estaba seguro de lo que debía pensar de la misma. Sus recuerdos de su contraparte femenina, Ranko, eran bastante irregulares, por lo que no confió en ellos aún para interpretar a una mujer en su vida. Aunque ella parecía estar feliz de verlo, por lo que eso estuvo bien para él. Aunque la mirada que le daba aún le hizo sentir algo nervioso, una mirada suave y tibi que hacía que sus ojos parecían ser aún más grandes que lo normal. Él limpió el fondo de su garganta nerviosamente, y ella regreso de su breve fantasía.

"Sería un honor que me acompañara a casa, Saotome-kun", dijo Kodachi suavemente. Sus ojos miraban abajo como se le enseño es adecuado para una joven noble, y ella estaba allí con sus brazos atrás de su cuerpo, inconscientemente derecha y mostrando su figuran en un efecto increíble. Ranma francamente babeo a la combinación resultante, y varias veces parpadeó nerviosamente mientras miraba su cuerpo que se estaba mostrando de manera casual como un placer a la vista. Ella sostuvo la casual pero seductora pose por los más largos segundos en la joven vida de Ranma.

"Uh, sí." El chico de la trenza trato de tragar saliva en su garganta seca. Era la segunda vez que ella le provocaba estos sentimientos de nerviosismo. Él se movió fuera de la puerta mientras ella reunía sus cosas, y estuvo de nuevo a su lado en breve. Su cara brillaba alegría mientras lo miraba, las pocas vendas en su mandíbula y nariz no limitaban de alguna manera su belleza. Él sintió eso como extraña, preguntándose si él en secreto le estaban atrayendo las mujeres que eran combatientes.

La pareja caminaba por el pasillo en silencio, Ranma debido a su falta de conocimiento sobre cómo actuar en esta situación, y Kodachi debido a la felicidad por el simple hecho de estar con el hombre que le importaba tanto. Era un momento de pura felicidad para ella, y los dolores de sus heridas eran un pequeño precio a pagar por tal cosa, ya que ahora Ranma estaba a su lado, y eso era bueno y adecuado en su mente.

'Parece que he ganado después de todo, Akane Tendo,' pensaba la chica aristócrata con una expresión de victoria en su magullada cara. 'Saotome-kun vino a verme a mi, no a tí, y ahora él es me acompaña a mi casa. La vida es buena.' Ella lanzo un suave suspiro de alegría moviéndose un poco más cerca de él. Pensó en tomar su brazo, pero ella no quería parecer ser demasiado atrevida. La última cosa que quería hacer era asustarlo por lucir muy entusiasta.

Ranma caminó a lo largo, la tenue sensación de hormigueo que las tres niñas: Akane, Nabiki, y Kodachi, infundido en él. El centró su mente en otras cosas, como el misterio que había descubierto en su laboratorio, y el nuevo problema de lidiar con Nabiki. El esperaba con interés mostrarle a ella, pero también existía una innegable atracción que él sentía a la segunda hija Tendo. Él había estado un tanto suscitado por su desafío, y eso muy pronto cambió el curso de sus pensamientos. El se enfocó en la siguiente pelea que iba a tener con ella.

'Tú no tienen posibilidad en contra de mí, Nabiki,' pensó él con un alto nivel de confianza. 'Después de todo, tengo dentro de mí todas las habilidades del Heredero de la Escuela de Combate Libre. Si Akane no fue capaz de vencerme en una lucha, entonces ¿Qué posibilidades tienes tú?'

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Nabiki estornudo.

Akane miraba mientras su hermana se frotaba ligeramente su nariz. "En verdad fue amable de tu parte hacer esto por mí, hermanita," dijo ella, sonriendo a su hermana mayor. "Espero que no pierdas demasiado de tu negocio de la hora de la comida debido a esto. Tendré que pagártelo de alguna manera."

"Sí, lo harás, Akane," Nabiki respondió fríamente, antes de sonreír con gracia a su pequeña hermana. "No te preocupes por ella. Ya seré capaz de recuperar la mayor parte fácilmente después de clases." Ella le dio a Akane una mirada tranquilizadora. "El dinero seguirá estando allí en un par de horas mas. Voy a tener que agitar unos árboles diferentes para encontrarlo."

"Bueno, Nabiki." Akane regresó a sus propios pensamientos. Ella se contento con recordar la lucha entre ella y Kodachi, una pequeña sonrisa aparecía en su cara mientras recordaba lo bien que se había sentido golpear a la otra chica. 'Esa perra debutante tendrá que ser llevada a su casa en pedazos después de que acabe con ella la próxima vez,' pensó ella con enojo. 'De ninguna manera voy a dejar que ella tenga a mi Ranma. Él es mío para pelear.' La idea de perderlo después de luchar duramente contra él trajo un rubor a sus mejillas.

Los pensamientos de Nabiki también se habían alejado a examinar el tema del chico Saotome, y ella cerró su mano libre en un puño apretado mientras recordaba su sorprendente arrogancia en la oficina de Fuyutsuki-sensei En su otra mano estaba su mochila, y el cuero sonaba un poco por el apretón que le daba. 'No fue prudente de ti tomarme tan a la ligera, Ranma-kun, en lo absoluto,' pensaba ella con una sonrisa. 'Esta Mujer te va a demostrar que puede soportar todo lo que le mandes. Sólo espera.'

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Las tres catgirls pasaban el rato en la sala que Kinnosuke les había consignado en uno de los más bajos subniveles de la Academia para su sede. Tiger estaba recostada en una silla, su gorra descansando sobre una rodilla mientras ella leía a través del último número de 'Imperial Woman', tratando de ver que nuevo consejo daba para ganar el amor de ese hombre extraordinario. Sus orejas de gato estaban levantadas con interés, mostrando su atención a lo que estaba leyendo. A su izquierda, Lynx estaba tranquilamente sentada sobre el suelo con las piernas cruzadas, ojos cerrados y sus orejas descansando sobre su cabeza, aparentemente meditando. Y, en la parte de atrás de la sala, la muscular Panther estaba ejercitándose en su leotardo azul claro y verde, su cuerpo cubierto por un brillo de sudor, y su traje apretaba dejaba poca duda en cuanto a su alto nivel de aptitud física.

"Tengo hambre", anunció Lynx con un suspiro, sus ojos aún cerrados.

"Kinnosuke-sama estará de nuevo aquí en breve", dijo Tiger, la mayor parte de su atención aún en la revista. "Cuando él llegue luego vamos a comer. Tienes que aprender a controlar mejor tus apetitos, Lynx. Tú no me oyes quejarme, ¿Verdad?" Su estómago retumbo de hambre de repente en un fuerte gruñido. Lynx abrió sus ojos y se rió, y la pelirroja lucía molesta.

Pocos minutos después, la puerta se abrió y Kinnosuke entro. Las dos sentadas catgirls se pusieron de pie en un instante, a Tyger sólo le tomo un momento esconder su revista detrás de su silla. Sus orejas de gato se levantaron con felicidad por su llegada, Panther rápidamente dejó sus ejercicios y se puso de pie con las demás.

"Bienvenido de nuevo, Kinnosuke-sama", los tres corearon en casi perfecta armonía. Él simplemente gruñó ausentemente a ellas y se sentó en la mesa de la sala con una mirada de molestia. Aunque Panther fue a limpiarse y cambiar rápidamente de nuevo a uno de sus habituales trajes, las otras dos jóvenes le llevaron el almuerzo que había sido preparado por el chef de la mansión Kashuoh y comenzaron a servirle. Él simplemente actuaba como si nada, sus ojos más en la comida que en las dos hermosas catgirls que al servían. Y mientras aún estaban sirviendo, Panther regresó, su piel un poco roja por el rápido baño de esponja que se había dado a sí misma antes de vestirse.

"He estado pensando sobre el problema con Nabiki Tendo", dijo él, empezando a llevar arroz y carne a su rostro. Tigre y Lynx se sentaron atentamente, esperando su aprobación antes de empezar a comer. Él comió antes de hablar de nuevo, "Y yo estoy muy preocupado por las inesperadas fallas en mis agente elegidos. Si Hiei me falla durante su próximo duelo con Saotome, entonces tengo un plan que requerirá que ustedes tres me ayuden." Ausentemente noto la bastante hambre que Lynx lucía en la cara y asintió que podían comer.

"Vivimos para servirlo, Kinnosuke-sama", dijo Tyger con un brillo de amor en sus ojos, antes de que ella también empezara a comer rápidamente. Ella se detuvo de nuevo e ingirió después la mitad del arroz en su tazón. "¿Pero que es lo que quiere que hagamos?"

"Inicialmente, planeo hacer mi desafío a la organización de Nabiki más abierto," dijo el chico con una luz maligna apareciendo en sus ojos. "Las Tres comenzaran a presionar a sus recursos y a convencer a sus agentes a que renuncien. Quiero exprimir a Nabiki duro hasta que se rinda" Él sonrió a su propia astucia. "Entonces, cuando su organización se derrumbe a su alrededor, tengo la intención de jugar mi carta de triunfo y desafiarla personalmente. Una vez que haya aplastado su resistencia ante mí, haré que jure lealtad a mi persona como mi consorte, y luego ella y yo gobernaremos la Academia desde las sombras."

Lynx termino lo último de su tazón de arroz y educadamente limpio su cara con una servilleta, su expresión neutral. A su izquierda, Panther ahora comía su segundo tazón de arroz, así como gozaba de las piezas de salmón fresco que estaba comiendo con el, pero un muy débil brillo de lágrimas se mostraba en la esquina de uno de sus ojos. Tiger simplemente frunció el ceño a su tazón de arroz antes de volver su atención de nuevo a su amo. La comida que había comido sólo se sentía ahora como plomo en su estómago después de escuchar su plan maestro para Nabiki.

"Como ordene, Kinnosuke-sama", dijo la pelirroja. Ella quería llorar, Pero sabía que su amo no quería ver lágrimas en los rostros de sus juguetes. En cambio, una rabia fría, lleno su alma, que ella podría desencadenar algún día con toda la fuerza a la fuente de su dolor, Nabiki Tendo. Sus ojos se reunieron con los de Lynx y Panther, y las tres catgirls compartieron un momento de entendimiento.


Un agradecimiento especial a Jim Bader por su permiso para usar los personajes de su obra Nabiki ½ (Un muy Aterrador Pensamiento) Tierra +4,614, 4.496 (Grupo Ranma½).

Gracias a mis pre-lectores por toda su ayuda y consejo:

Michael Allen
Jim Bader
Donny Cheng
David Eddy
David P. Gao
Doug_W
Rhialto

ShortYes
PP Sommer
TH Tiger