ENTRE LA ESPADA Y LA PARED

Parte 2:El Accidente

por Zen

Traduccido por Juan Carlos Roldan Vidals Alias Hukarovi Yanoki

Nota del traducctor:Si te gusta esta historia y quieres escribirle a su autor Zen te advierto que el solo habla/lee ingles y si tu no sabes ingles puedes escribirme a mi el traductor, mi E-mail es hukarovi_yanoki@yahoo.com yo soy el encargado de llevar esta historia a latinoamerica y respondere todas sus dudas que surjan en la historia.

© Basado en los personajes y situaciones creados por Takahashi Rumiko.
Ranma 1/2 y sus personajes son propiedad de Shogakukan, círculo de la animación de Kitty, y Takahashi Rumiko.
Derechos Reservados ® 1996 de la historia - James Bateman ©

Ranma erraba lentamente a lo largo de las calles de Nerima, realmente no le importaba a donde iba. <Maldicion> él pensó. <¿Porque no puedo solamente mantener mi bocota cerrada? Ahora he lastimado los sentimientos de Ukyo también. ¿Cómo consigo meterme en estos lios?>

No lejos, Kuno Tatewaki miraba a su odiado rival (por el afecto de su *dos* amadas) se acerco, como si estuviera deslumbrado. Él sonrió a si mismo. "¡Saotome, tu inatención será tu caída. El momento para la recompensa divina ha venido!" Con eso, Kunose lanzo contra Ranma, con su bokken balanceandose para atacar.

Ranma, por su parte, nunca realmente notó el ataque de Kuno sobre un nivel subconsciente. Mientras Kuno se acercaba, Ranma ausente tomo final su bokken, y con un hábil movimiento, empujo a Kuno adelante, lanzándolo en un arco que terminó (completamente solido) contra la pared de un edificio cercano. Kuno resbaló tranquilamente hacia el suelo.

"Largate, Kuno" Ranma murmuró a su atacante inconsciente, "Tengo mucho en mi mente ahora..."

De regreso en el dojo Tendo, se acercaba la hora de cenar. Nabiki había llegado hace una hora o antes, contando un taco de billetes. Ella había estado en su habitacion desde entonces, la única evidencia de su presencia era el ocasional repicar del teclado de su computadora. Soun y Genma estaban en medio de otro juego de Shogi mientras que Kasumi ponia la mesa y hacia los preparativos finales para la cena.

Akane había terminado su baño y se relajaba con uno de su manga favoritos, una historia sobre un joven estudiante jde la universidad que cae enamorado de la dueña del apartamento, y todos sus amigos y conocidos peculiares. El universitario y la dueña eran siempre víctimas de malentendidos tontos, pero ahí parecia haber la esperanza de que todo se resolveria al final. Quizás ese era el porqué que a ella le gustaba, tan malo como hiban las cosas, ahí todavía parecia haber una luz al final del túnel.

<Lastima que el mundo real no puede ser asi> Akane penso. <Nada cambiara aquí alguna vez.>

Ranma todavía estaba errando en curso a lo que eventual lo regresaria al dojo, pero él no tenía ninguna prisa en particular. La cena no estaría hasta dentro de una hora, y él no tenía deseos de correr con Akane aún. Lo ultimo que él queria hacer era implicarse en otra pelea con esa niña fea y poco femenina. Su cabeza todavía palpitaba un poco cuando él pensaba en ésa *ultima* pelea que habian tenído.

Además, Akane había estado más y más enfadada con él sobre cosas que simplemente no eran su culpa. ÉL no tenia la culpa por una ley estúpida de las Amazonas. No era SU culpa que su padre lo vendiera por una comida... No era su culpa que una lunatica sintiera atraccion por él. Ranma se estremeció al pensar en Kodachi.

Ranma pateo un guijarro en la acera. "Estupida Akane. ¿Porqué ella tiene que ser tan violenta?" él pregunto a nadie en particular. "Ella nunca parece interesada en oír mi lado de la historia. De cualquier modo, simplemente tiene que ser mi culpa. ¿Porqué ella ME culpa siempre?"

Imparcialmente, Ranma tenia que admitir que él necesitaba ser mucho más agradable con Akane. Él sabía que se burlaba de ella demasiado. Él sabía que ella intentaba mejorar sus habilidades domésticas, pero simplemente no podía resistirse a las oportunidades que ella de dejaba. Akane podía ser tan contradictoria a veces, resistente pero vulnerable, agraciada y torpe, segura de sí misma pero plagada de dudas de si misma. La hacia tan difícil de entender.

De algun modo, él siempre decia justamente la cosa incorrecta. Solo cuando él pensaba puede ser que tuvieran realmente una oportunidad de avanzar, él dicia o hacia algo que la alejaria otra vez, y su sonrisa desaparecería en una lluvia de chispas. Realmente era demasiado malo. Ella era tan linda cuando sonreía, Ranma deseaba que ella sonriera más a menudo.

Mas adelante en la calle, un pequeño cerdito negro erraba en el centro del camino, parecia perdido. Ranma suspiro pensando en Akane.

Un auto rechinaba al detenerse mientras su conductor azoto el freno en un esfuerzo de evitar al cerdo. Ranma, oyendo el ruido, bajo la mirada a la calle.

Una furgoneta de entregas de la industria Mishima Heavy, llendo a alta velocidad, se desvió para evitar el auto atascado delante de ella. Ranma levanto la mirada y vio Akane, como si le estuviera sonriendo; sus ojos tan brillantes como lámparas, frente lisa como parabrisas, una sonrisa que destella como el reflejo del sol en el cromo pulido. Una triste sonrisa se formo en su cara mientras la camioneta de entregas azoto contra él, a 125 k/h.

La camioneta no llevó lejos a Ranma; un edificio detuvo a ambos por completa y precipitadamente. Mientras que el humo se despejaba, la gente podía ver el cuerpo de un joven entre los restos del camion y los restos de la pared. El brillante rojo de su camisa de estilo chino era inundado con el rojo más oscuro de su sangre.

Momentos despues, un equipo de emergencias había llegado y los paramedicos luchaban desesperadamente por liberar a Ranma o sus restos de los escombros. Mientras que el camion era retirado lejos de los escombros de la pared, los salvavidas estuvieron asombrados de oír a un Ranma semiconsciente inmóvil que murmuraba débilmente...

"No... Akane... No..." Ranma tosió, y la sangre emanaba. "A... ka... ne..." Ranma perdio el conocimiento totalmente y su respiracion se detuvo.

"¡Médicos! ¡Rapido!" uno de los paramedicos llamo.

Kasumi justamente limpiaba los platos de la cena en el dojo Tendo. El resto de la familia aun estaba sentado alrededor de la mesa satisfechos pensando.

"Ahh, Kasumi, tu sukiyaki no tiene igual" Genma dijo entusiasta. "Un verdadero placer para el paladar."

Kasumi sonrió. "Gracias Sr. Saotome" ella dijo. "Estoy feliz que lo disfrutara. Espero que usted deje algo para Ranma."

"¿Ranma?" Genma miro asustado.

"Sí" Kasumi dijo, señalando el tazon limpio en el lugar de Ranma en la mesa. "Él no ha llegado a casa todavía."

Akane miro el lugar vacío en la mesa. Kasumi estaba en lo correcto, Ranma no había estado allí, su tazón estaba tan limpio como cuando había venido del armario.

"Eso esta mal" Genma dijo. "No es de Ranma faltar a una comida."

"Tal vez él está en el Nekohanten, o en el Ucchan" Akane dijo, su voz era ácida.

Genma considero esto. "Posiblemente, pero no pienso que él dejaria pasar el sukiyaki de Kasumi por eso" dijo.

"Ël volvera, Saotome" dijo Soun. "Después de todo, Akane esta aquí, ¿Correcto?"

"Correcto, Tendo." Genma convino. Akane solamente los miro.

A las diez de la noche, Ranma todavía no había regresado al dojo, y la familia empezaba a inquietarse. Kasumi llamó a los amigos de Ranma para ver si alguno de ellos lo habían visto últimamente. Las únicas respuestas afirmativas que ella consiguió eran de Ukyo, que dijo que él había dejado su tienda un poco después de las cuatro de la tarde, y de Kuno, que no podía decir cuándo él lo había visto por última vez, solamente que el cobarde de Saotome debe haber huido seguramente para evitar su cólera. Nadie contestaba en el Nekohanten.

Cuando Akane oyó el informe de su hermana, ella estaba furiosa. "¡Ese cretino!" ella dijo. "¡Apostaria a que él está haya afuera con Shampoo! ¡Y aquí nosotros preocupándonos por él!"

Nabiki entro al cuarto al momento de oír el comentario de Akane. "Yo no pienso así, Akane." Ella dijo. "Shampoo estuvo por aquí hace un par de horas buscando a Ranma. Le dije que no lo habia visto desde antes del desayuno."

Akane se calmo un poco cuando ella oyó eso, pero estaba todavía molesta. "¿Asi que donde estara él, entonces?" ella pregunto.

Alrededor de esa hora, hubo unos golpes en la puerta. Nabiki fue a saludar a su visitante, mientras que Akane se sentó furiosa. Un momento despues Nabiki regreso, seguida por el Dr. Tofu. Kasumi vino de la cocina con una bandeja de té.

"Buenas noches, Dr. Tofü" ella dijo alegre. "¡Que gusto que nos visite!"

Las campanas de advertencia comenzo a sonar en la la cabeza de Akane. Había algo incorrecto aquí. Kasumi acababa de entrar, y el Dr. Tofu la había notado apenas.

"Buenas noches, Kasumi" Dr. Tofu contestó. "¿Está el Sr. Saotome aquí?"

Kasumi parecía un poco desconcertada. "Pienso que él está en el mirador con papa. Iré a ver"

"Por favor" dijo el Dr. Tofu. Kasumi dejo su bandeja, y se fue para encontrar a Genma y Soun.

Akane sintío un escalofrio. Su subconciente puso dos y dos junto, y consiguio un cuatro muy sucios. "Dr. Tofu" ella dijo. El Dr. Tofu miro hacia ella, y Akane vio el dolor en sus ojos. "¿Que sucede?" ella pregunto. "¿Donde está Ranma?"

El Dr. Tofu miro al piso, y Akane sentía su corazón en su garganta. "Oh no... él esta bien, ¿Verdad? ¿Algo terrible ha sucedido, no?"

Kasumi volvió seguida por Genma y Soun. "Aquí están, Dr. Tofu" ella dijo. Entonces ella notó la expresión del doctor, y que su hermana estaba blanca como una sabana y temblando como una hoja. "Oh, cielo" ella dijo. "¿Ocurre algo malo?"

El Dr. Tofu tomó una respiración profunda y miro a los miembros de la familia Tendo, y finalmente a Genma y Akane. "Esta..." él comenzó, "Esta tarde, Ranma fue atropellado por un camion de entregas a unos kilómetros de aquí. Lo aplastaron entre el camion y un edificio. Él todavía está en cirugía en el centro médico de Nerima. Las perspectivas..." su voz comenzo a romperse, "Las perspectivas no son buenas."

Los otros miraron fijamente al Dr. Tofu en shock. "Mi hijo..." dijo Genma, y se sentó pesadamente.

"Oh, Ranma" dijo Kasumi. Ella se veia afectada.

Akane solamente permanecio de pie allí, mirando fijamente al Dr. Tofu, queriendo que la pesadilla terminara, deseando despertar y encontrar que todo era un mal sueño, pero sabiéndo bien. El Dr. Tofu no hacia bromas crueles, y solamente en la más grave de las emergencias podía mantenerlo sobrio cuando Kasumi estaba cerca.

Soun estaba en las lagrimas, farfullando incoherencias. Genma levanto la mirada al Dr. Tofu. "¿Mi hijo..." él dijo otra vez. "... vivira?"

"No sabemos" dijo el Dr. Tofu reservado. "El a estado en cirugía por más de cuatro horas. Que él haya vivido tanto no es ningún milagro de menor importancia."

La puerta de la habitación de Akane estallado lejos de sus bisagras mientras Akane corria a su cama, cegada por las lagrimas. Ella enterró su cara en su almohadilla mientras un gran sollozo salio de ella, haciendola temblar incontrolablemente. Ella no sabía cuánto tiempo estuvo allí, pero ella lloro hasta que el temblor disminuyó, y ella podía recuperar una cierta cantidad minima de control. Ella se sentó allí, sola en la oscuridad, llorando en su almohada.

"Oh, Ranma" ella sollosaba. "¡Tonto! ¿Porque tenias que ir y lastimarte? ¿Porqué?"

Paso algo de tiempo antes de Akane notara la silueta qué permanecía de el portal. Cuando ella lo hizo, Kasumi continuo su camino al cuarto, y se sentó en la cama al lado de ella. Kasumi puso los brazos alrededor de su sollosante hermana y la sostuvo, haciendo ruidos suaves para calmarla.

"¿Por qué, Kasumi? ¿Cómo pudo Ranma se atropellado por un camión, de todas las cosas?" Akane lloro.

"Ellos no saben toda la historia aún" Kasumi dijo. "Al parecer, un auto se detuvo repentinamente, y el camion se desvio para evitar al auto. Entonces golpeó a Ranma, y el edificio."

"Todavía no puedo creerlo." Akane resollo en voz alta. "Aún espero despertar y encontrar que todo esto a sido un mal sueño. Oh, Kasumi, ¿Que voy a hacer si... si... que voy a hacer si él *muere*?"

Kasumi sostuvo a su hermana mientras ella lloraba, oscilando suavemente. Finalmente, el templar de Akane se detuvo, y, después de un momento, el sueño la reclamo. Una vez que ella estuvo dormida por un rato, Kasumi la arropo en su cama y reservada dejo el cuarto.

Abajo, un tenso grupo de gente crecía más mientras mas personas se enteraban del destino de Ranma. Ukyo había sido la primera en llegar. Ella había llamado para saber si Ranma no había llegado a casa aún, y le habia respondido el Dr. Tofu. Una vez que ella supo la historia, estuvo allí en cuestion de minutos. Ella se veia como si hubiera estado llorando, e intentaba difícilmente mantener el control.

Shampoo estaba sentada en una esquina llorando reservada, mientras que Mousse se sentaba cerca, ansiando poder confortarla. Tanto como él odió a Ranma por robarle a su querida Shampoo, él esperaba también que Ranma viviera, si solamente podía ver a Shampoo sonreír otra vez. Colonia se sentó reservada, aún como estatua, perdida en sus pensamientoa. Finalmente, ella se paro para y fue a hechizar... err... relevar a Kasumi en la cocina.

Kasumi entonces se unio al Dr. Tofu en su vigilancia del teléfono, hablando reservada con él, y llorando de vez en cuando suavemente. Por una vez, el Dr. Tofu encontró que él podía apenas sostenerla, y le ofrecio la comodidad que ella necesitaba. Él termino deseando que el precio de su cordura no fuera tan alto.

La noticia del accidente de Ranma se disperso rápidamente mientras que Nabiki se cercioró que todos en el districto de Nerima supieran los últimos progresos. Naturalmente estos boletines no vinieron gratis. Incluso mientras que ella se preocupaba de Ranma, mientras en lo profundo de su corazón ella lo hizo, Nabiki conservó bastante presente en mente el exprimir a la situación cada Yen que el mercado podia ofrecer.

La primera reacción de Kuno a la noticia había sido una oleada de júbilo. "La venganza del cielo es lenta, pero segura" él dijo a si mismo. "Seguramente los mismos dioses han castigado al malvado Saotome." Él comenzó inmediatamente a planear su campaña para consolar a las afligidas Akane Tendo, y a su querida chica de la trenza.

Kodachi Kuno, por otra parte, había tomado la noticia con algo menos de aplomo. Para ponerlo más conciso, ella enloquecio. Dentro de unas horas, el dojo Tendo, el colegio Furinkan, y el centro médico de Nerima estaban inundados en ramos de rosas negras. Cuando los doctores rechazaron su entrada a O donde Ranma aún estaba en cirugía, ella se hizo la enferma, y amenazaron trabarla en la sala de Saeko.

Despues de oír hablar del accidente de Ranma, Gosunkugi Hikaru se encontró en un dilema. Al fin se le había concedido uno de sus deseos más ardientes, al parecer el retiro de Ranma Saotome, que significaba que él tenía un rival menos para Akane Tendo. lo que realmente no importaba, él pensó sombrío. Akane nunca miraría dos veces a él, no importando cuantos de sus pretendientes eliminara. Cuando él oyó hablar de la reacción de Akane al accidente, Hikaru decidío que él tenía mucho que pensar. Él no era fundamental una persona cruel; él realmente cuidaba de Akane y no le gusto el pensar que ella era infeliz. Cuando él se dio cuenta de cuánto la muerte de Ranma la lastimaría, él estaba profundamente avergonzado de las muchas veces que él lo había deseado. Por primera vez en su vida, Hikaru se encontró rogando tan ardientemente por que la recuperación de su odiado rival. Horas más tarde, algunas personas pensaron mirar a través de la cerca de la casa de Gosunkugi, ellos pudieron haber encontrado varias muñecas pequeñas con trenzas negras, varios instrumentos agudos, y un carro de juguete.