Capitulo 7:
Dark Kingdom Blues
Por BlackDragon
Traducción Kal-el
Formato HTML de Hukarovi Yanoki
"¡Oh rayos! ¡Estoy agotada!" Usagi se quejaba mientras se quitaba su camiseta. Mirando las duchas en el vestidor, contempla brevemente el tomar una ducha rápida antes de su próxima clase.
Un rápido olfateo a si misma forzó su decisión, y se despojo de su ropa interior antes de agarrar una toalla y dirigirse a las cabinas separadas que les daba intimidad a las chicas en la ducha. No es como si fuera a llegar más tarde de lo habitual.
Parándose junto a una de las regaderas, pero no debajo de esta, ella comenzó a girar las perillas para ajustar la temperatura, para ponerla bien antes de meterse bajo el agua. Luego ella se detuvo y parpadeo. "¿Ami-chan?"
La chica de cabello azul salto ligeramente en sorpresa, luciendo medio dormida mientras el agua caliente se vertía sobre su cuerpo y calmaba sus adoloridos músculos.
"Wow. Luces incluso peor que yo", dijo la rubia sin mucho tacto. Aunque realmente, Usagi no se veía muy mal, además de solo estar cansada, ella estaba intacta. Ranma había sido paciente y suave durante su "entrenamiento" hasta el punto en que Usagi se sentía bastante avergonzada por el espectáculo de ineptitud que había dado.
Ami no se veía muy mal, o sea, que ella no tenía moretones visibles u otras lesiones en su cuerpo, pero la manera en que sus brazos colgaban sin vida, y la forma en que ella fruncía el ceño cuando se movía, demostraba que no estaba tan bien.
La Senshi genio mostró una débil sonrisa. "No estoy tan mal... sólo un poco adolorida. Sagara... parecía muy entusiasmado con su práctica." Ami, de todas las personas, podría, sin duda, apreciar la pasión por los estudios. Ella podía apreciarlo mucho más cuando no conlleva pegarle a nadie.
Ambas hicieron algunas comparaciones sin sentido del estilo de lucha de los chicos (En un sentido, ya que no sabían casi nada acerca de artes marciales, y Ranma nunca había lanzado un solo puñetazo a Usagi) mientras se duchaban, y después, con rapidez, antes de vestirse para ir a su próxima clase.
Ellas estaban comprensiblemente confundidas cuando se encontraron con una pelirroja con trenza que estaba apoyada contra el muro al lado de la puerta del vestuario de las chicas.
Usagi miro alrededor por un momento para asegurarse de que nadie estaba lo suficientemente cerca como para escuchar. "¿Ranma? ¿Qué estas haciendo? ¿No tienes que dar clases?"
"No, mis clases ya acabaron", Dijo Ranma, ajustando el cuello de su uniforme.
Dicho uniforme era lo que captaba la atención Ami. Debido a lo que ya había sido expuesta como una Senshi, Ami podía tomar el cambió mágico de Ranma sin molestia pero se preguntando por qué Ranma parecía irritado cuando Orion lo había descrito. Ella simplemente pensaba en Ranma como un chico que podía tener un cuerpo ilusorio casi a voluntad.
No obstante, a juzgar por el hecho de que ella llevaba el uniforme de un chico, Ranma puede que tenga algunos problemas con ese disfraz.
"Luces más llamativa así, si quieres saberlo", dijo Ami, riendo un poco nerviosamente mientras la pelirroja observaba sus ropas. Tomando en cuenta el busto de Ranma, dudaba mucho que la ropa fuera cómoda, e incluso con una breve mirada nadie podría confundirla con un chico en vez de una niña en un uniforme de chicos.
"Bueno, pensé que era mejor que mi ropa habitual. De esta manera me miraran un poco, pero los profesores no me echarán o algo como eso". Ranma murmuró. "De ninguna manera voy a usar una falda".
Usagi parpadeo. "¿Por qué no?"
"¡Porque soy un chico!" Ranma exclamó, gruñendo un poco.
Usagi parpadeo de nuevo. "Pero estas disfrazada como una chica. Por lo tanto, ¿No deberías usar ropa de chica?"
El ojo de Ranma dio un tic, Ami se movió para susurrar en la oreja de Usagi. "No creo que él este muy cómodo con el cambio. Ranma podría estar tratando de afirmar su masculinidad para compensar".
Ranma mostró un tic de nuevo. "Puedo escucharte, por si quieres saber."
Usagi pensó en ello. "...No lo entiendo."
"Olvídalo," Ranma se quejo, empujando a las jóvenes chicas para ir delante de él. "Hay que darse prisa e ir a clase."
"¿Huh? ¿Por qué están acompañándonos?" Usagi pregunto antes de mirar alrededor. "¿Y dónde está Sousuke?" Ella SABÍA que el mercenario no había acabado con sus clases, y dado su comportamiento hasta la fecha, era muy dudoso que él se hubiera adelantado para ir a clases.
"Sousuke dijo que tenía algunas cosas que hacer, así que me pidió que las cuidara a ustedes dos," la pelirroja murmuró, dando una pausa para mirar de mala manera a un chico que observaba su pecho. "Personalmente creo que esta siendo paranoico, pero bueno, esta cosa de ser guardaespaldas es su área de especialidad, ¿Lo sabían?"
Ami asintió. "¿Que está haciendo él?"
"No lo se" Ranma dijo, rascándose la cabeza. "Sin embargo, considerando que es Sousuke, lo único que espero es que no haga explotar nada".
Afortunadamente para todos los interesados, las actividades de Sousuke no implicaban ninguna detonación de explosivos de alto poder. Tampoco era la de poner trampas donde un desafortunado podría activarlas, o acechando inocentes, y enamoradizas colegialas con fusiles de alto alcancé. Por lo menos no en este momento.
Aunque su labor sin duda trajo una explosión de cierta clase.
"¡¿ESTOY SIENDO EXPULSADA?!" Rei Hino grito, golpeando sus puños en la mesa de madera mientras se inclinaba hacia adelante mirando con furia al hombre delante de ella.
'Dios, ella da miedo', El director de la Escuela Privada T*A para chicas penso mientras él se deslizó más abajo en su gran silla de cuero. "No, no, usted no está siendo expulsada. ¡Solo transferida!"
La mirada de Rei era implacable, ella no se movió de su posición. "Ya veo. Cancele la transferencia, entonces".
"Er... lo siento. No puedo hacer eso. Vera, mis manos están atadas".
El ojo de Rei dio un tic, y el director trago saliva en perfecta sincronización. "Bueno, ¿Puedo transferirme aquí de nuevo?"
"Uh... lo siento de nuevo. Yo no puedo permitir eso".
Una ola de ideas surgió en la cabeza de Rei. "Entonces, ¡¿Cómo exactamente eso es distinto a una expulsión?!"
Tragando saliva, el hombre calvo se sentó un poco más derecho. "La expulsión es una cosa seria, Hino-San. Dicha marca en su registro sería permanentemente irreparable. Aquí, en T*A simplemente sentimos que su personalidad y desarrollo sería mucho más compatibles con el cuerpo estudiantil de una... menos formal y estricta institución de aprendizaje." Por supuesto, el director realmente no tenía ninguna idea de si esto es cierto, no sabía nada acerca de Rei hasta el día de hoy. Pero era una de esas conveniente y perfectamente vagas líneas de razonamiento que se ajustaban a casi cualquier situación. "¡Estoy seguro de que lo hará muy bien en la secundaria Juuban!"
Rei bajo la cabeza, finalmente, abandono su escritorio. 'Educación pública. Bleh. Sin mencionar que el maldito lugar está infestado de lujuriosos, y pervertidos adolescentes'. La sacerdotisa quería un novio tanto como cualquier otra chica, pero creía que no iba a encontrar a ningún buen novio entre chicos de su misma edad.
Por otra parte, dos de las más recientes adiciones a la lucha contra el Negaverso iban a la secundaria Juuban, y parecían ser muy diferentes a su idea del común, y estereotipado adolescente. Ella no había decidido si realmente eran diferentes en una buena forma, pero era seguro decir que estaba dispuesta a averiguarlo.
Los ojos de Rei se estrecharon. Pensando en Ranma y Sousuke elevo una bandera roja en su mente. Algo que Sousuke había dicho acerca de que ella fuera a una escuela diferente era un problema...
El director estaba prácticamente en su límite en este punto, mientras la chica de largo cabello negro se había puesto de pie delante de su escritorio mirando a nada en particular durante algunos minutos. Brevemente pensó que ella iba a empezar a descarga de nuevo su furia cuando estrecho sus ojos, pero en lugar de eso sólo murmuró "Adios" y azoto la puerta, su nota de transferencia firmemente agarrada en su mano.
El director se seco algo del sudor de su frente, mientras la puerta a su baño personal se abría para revelar una figura de pelo negro usando, de todas las cosas, un traje formal con una máscara de gases (Sousuke había decidido que le gustaba el disfraz).
"¿Qué tal estuvo?" El director pregunto, sus ojos señalaban una vez más a la pequeña pistola de plástico que el presunto agente del gobierno guardaba en su cadera.
"Muy bien. Su cooperación es apreciada." Sousuke dijo con formalidad, caminando hacía su escritorio y entregando al hombre los documentos de transferencia oficial para firmar y la (astutamente falsificada) orden federal para que lo hiciera. "Mi agencia tiene planes para Hino-san que no son compatibles con su posición actual entre sus estudiantes." Todo era verdad, sin embargo este hombre evidentemente no tenía idea de lo que 'su agencia' era.
"¿Q-Qué tipo de planes?" El director pregunto nerviosamente, firmando los documentos de transferencia.
"Eso es clasificado, por supuesto," Sousuke dijo, acomodando su traje y avanzando hacia la ventana. "Pero este seguro de que es nuestra primera y principal prioridad garantizar que no se le haga ningún daño a Hino-San como consecuencia de este traslado. También estaríamos muy disgustados si fuéramos a encontrarlo haciendo una innecesaria investigación de la naturaleza de sus actividades, o mi organización". Él poco a poco volteo su cabeza para mirar al hombre, que tragaba saliva de nuevo.
El director comenzó a sudar, preguntándose cómo alguien podría dar tan feroz mirada desde atrás de esa máscara. "¡Usted tiene mi palabra! ¡En lo que a mi respecta, todo este asunto ha concluido!"
Sousuke asintió. "Muy bien". Entonces abrió una ventana y tomo una cuerda junto a la ventana.
Mientras el director juntaba valor para preguntarle que estaba haciendo, Sousuke se volvió hacia el hombre. "Recuerde: Somos el gobierno. Estamos aquí para ayudar". Sin más conversación, el mercenario saltó por la ventana, usando la cuerda para hacer rapel y bajar.
El director solo mostró una gran gota de sudor. ¿Por qué no uso la puerta?.
Sousuke guardaba su uniforme mientras salía del almacén del gimnasio, su máscara, armas, y traje estaban guardados en su mochila (Sus libros y la mayor parte de sus granadas estaban guardadas en la escuela).
El observo su reloj. "Hmm... las clases ya debieron acabar. Saotome puede cuidar a las chicas. Debo reunirme con Springfield y organizar un patrullaje".
"Detente justo ahí, G.I. Joe", dijo una extrañamente calmada voz detrás de él, como hielo duro con filo de espada.
Sousuke no tembló, pero lentamente volteo la cabeza para mirar detrás de él hasta que vio a Rei Hino con su visión periférica. Él no podía menos que preguntarse por qué eso no alivio los escalofríos en su espalda. "Hino-San. ¿Puedo ayudarla?"
"Yo no sé, Sousuke-kun, ¿PUEDES?" Rei dijo, pasando de *fría y dura* a *sarcástica y dulce*, su voz femenina aun lograba sonar bastante molesta. "Veras, acabo de regresar de una reunión con mi director. Resulta que estoy expulsada de mi escuela y arrastrada a ese vertedero al que van Ami y Usagi".
Sousuke asintió. "Lo había escuchado". Entonces él se detuvo, como si lo considera. "A través de aisladas y dispersas terceras personas, por supuesto."
Rei cruzo sus brazos sobre su pecho. "Son bastante rápidos, ¿No es así?"
"Afirmativo. Están muy calificados". Sousuke miro a Rei con cuidado, sintiendo algo que lo molestaba en la parte trasera de su mente. Sus ojos, su postura, la feroz mirada en su bonita cara.
El mercenario parpadeo cuando de repente le vino a él la razón. Esa es exactamente la misma pose que Kaname tenía justo antes de estrangularlo por algo que él hiciera. "Ah, ya veo que estás molesta acerca de algo."
"Vaya, ¡¿LO CREES ASÍ?!" Rei de repente exploto, fue directo hasta él y lo agarro por la parte frontal de su uniforme. "¿Por qué hiciste que me botaran de mi escuela?"
"¡Su hipótesis de que la culpa recae sobre mí está fuera de lugar!" Sousuke insistió firmemente. "¡No se pueden dar sentencias sin juicio ni pruebas!"
"¿Y porque estas caminado alrededor del campus de un colegio para señoritas?" Rei le pregunto con enojo.
"Es mi misión garantizar su seguridad," Sousuke dijo con rigidez, "Saotome puede cuidar de las demás. Pensé que yo podría acompañarla a su casa."
"¿Ah sí? Bueno, ¿Y porqué salías de ese almacén?" La miko preguntó con un poco menos de fuego en su voz. "¿Qué hacías allí, si solo pasabas por aquí para verme?"
"Yo... uh..." Sousuke trago saliva y se puso recto. "Yo... puede que haya puesto algunas trampas...."
"En nuestro almacén de gimnasia," Rei continuó.
"Afirmativo", Murmuró el mercenario. "...Tal vez."
Rei estaba a punto de seguir adelante y empezar a estrangularlo, cuando ella notó a una de las chicas del equipo de gimnasia rítmica apresurarse a entrar al cobertizo, ella supuso que, para sacar su equipo.
¡VZZZRT!
"¡AAAAAAAAAAIIIIIIIIIIEEEEEEE!"
Mientras una fuerte luz brillaba a través de la puerta abierta, Rei se volvió al adolescente en sus garras, sus ojos bien estrechos. "Te voy a estar vigilando, Sagara." Humeando con furia, ella libero al mercenario y se dio la vuelta, su largo cabello negro se contorneaba detrás de ella.
Sousuke lanzo un suspiro de alivio a medida que más chicas se apresuraron al almacén, y limpió su frente mientras más gritos y bengalas de luz estallaron en el edificio.
'Ella definitivamente me recuerda a Chidori-San... excepto que Chidori-San no puede evocar ráfagas de fuego a voluntad. Puede que tenga que cuidarme tanto de ella como de los Youma en este lugar'.
Haciendo caso omiso a otra luz, así como los siguientes gritos de la palabra *Médico*, él empezó a caminar a buen paso detrás de Rei. Peligrosa o no, él tenía un trabajo que hacer.
"He realizado una búsqueda total, mi reina, pero no hay absolutamente ninguna señal de Jaedite," Nephrite dijo mientras se arrodillaba ante la imponente figura femenina que con impaciencia tocaba con sus dedos el apoyabrazos de su trono. "Encontré algo de polvo de Youma, pero muy poco de ellos. A juzgar por el estado del campo de batalla que escogió, es correcto decir que él no sobrevivió al encuentro."
Beryl apretaba sus dientes con furia. Después de que Jaedite utilizo gran parte de su escaso *éxito* en sus cosechas para tele-transportar cuatro de los más poderosos Youma de batalla, Youma - que eran utilizados para patrullar el castillo y no podían salir sin permiso - ella había estado esperando torturar al tonto mucho más allá de su idea inicial de encarcelarlo en cristal... incluso en caso de su éxito. "Así que no lo logro entonces. Fracaso total y absoluto."
"Estoy seguro de que ya no está entre los vivos, mi reina," Nephrite dijo, su cabeza seguía baja. "Dada la completa aniquilación de las instalaciones, es posible que las Senshi hayan muerto con él, pero mis intentos de adivinación me llevan a dudar de ello."
Beryl frunció el ceño. "El necio fue muy afortunado si murió en batalla, entonces. Mucho más digno y menos doloroso de lo que había previsto en caso de que haya regresado con otro fracaso."
Nephrite no se levanto. "¿Cuál es su voluntad, mi reina?"
"Su despilfarro de energía y la vida de nuestros soldados más competentes llevará algún tiempo en corregirse", la Reina oscura dijo irritablemente. "Haré que Zoicite y Kunzite supervisen la recolección de energía primaria a partir de este momento en adelante. Tú deberás ver la eliminación de las Senshi".
Nephrite levanto una ceja, aunque con la cabeza hacia abajo, Beryl no se dio cuenta. "¿Y qué hay del Ginzuisho, mi reina?"
"Por mucho que aborrezca admitirlo, lo de Jaedite me tiene preocupada," Beryl dijo en un tono un poco cansado de voz, algo fuera de su tono usual de control y malicia. "Las Senshi no debieron ser capaces de acabar con él y cuatro de nuestros mejores Youma en las mejores condiciones. El hecho de que lo vencieran hace parecer que o ellas son mucho más poderosos de lo que habíamos estimado, mucho más astutas de lo que previmos, o tuvieron ayuda que no esperábamos. Quizás varias nuevas Senshi, o una fuerza oscura diferente interfirió".
Nephrite estaba ligeramente conmocionado al ver a Beryl frotando su barbilla cuidadosamente. Aparentemente este giro de los acontecimientos la tenía agitada hasta el punto que ella estaba considerando la posibilidad de que las Senshi eran una gran amenaza.
"Con respecto a esto, deberíamos consolidar el poder que todavía tenemos", dijo Beryl, volviendo una vez más a su oscura personalidad. "Tratar de buscar el Ginzuisho con tantas distracciones puede que no sea prudente.... Vamos a concentrarnos en la eliminación de nuestros enemigos por el momento."
"Como usted ordene, mi reina," Nephrite dijo suavemente, levantándose y luego dándose vuelta para salir de la habitación del trono.
¡Sllllllurp!
"¡Ah!"
Nephrite tenía que admitir algo de los seres humanos, puede que sean débiles e ignorantes ganado incapaz de comprender su propia insignificancia, pero hacían unas interesantes bebidas. Este líquido llamado *café* era su actual favorito, a pesar de que había oído hablar a algunos más que podían conducir a los consumidores a un agradable estupor. Una tonta idea, pero si encontrara un poco de tiempo libre más tarde...
Nephrite camino a la pequeña mesa en la cafetería Starbucks distraido. Con su actual vestimenta, un traje de negocios casual sin corbata, las únicas miradas que él atraía eran las de las mujeres interesadas.
Al empujar el par de gafas delgadas hasta el puente de su nariz, el sacó un diario de debajo de su brazo y lo abrió para leer.
Hacer adivinaciones de acuerdo con las estrellas se volvió MUCHO más fácil una vez que descubrió que el hombre ya había dominado el arte hasta el punto de que publicaban los secretos del destino en diarias publicaciones generalizadas que se podía comprar por meros cien yenes. La lectura de los destinos en el documento le ahorraba tiempo, energía, y el dolor de tener que estar en esa posición de meditación. Todo eso, y ellos tendían a ser más exactos, y a veces tan relevantes, como sus propios augurios! Extraño.
Pasando las últimas inútiles historias sobre explosiones y destellos de luz detrás de la frontera de Minato, Nephrite puso el periódico en la sección de horóscopos.
Por supuesto, era aquí donde se volvía complicado. Nephrite había olvidado desde hace tiempo su propia fecha de nacimiento (Ninguno de los demás generales habían llegado a sus fiestas cuando los invitaba, y las Youma tendían a comerse el pastel y NUNCA traían regalos), y no consideró solo usar cualquier horóscopo del día. Por lo que decidió utilizar la fecha de nacimiento de cualquier Youma que estaba a punto de enviar. Por extraño que parezca, las Youma siempre parecían recordar el día en que nacieron, o hicieron, o... en cualquier caso se aseguraba de tener una reserva casi interminable de carne de cañón sin cerebro preparada para marchar adelante a otras dimensiones. Nephrite realmente no sabía o se preocupaba por ese proceso, él solo pensaba que era extraño que criaturas a menudo demasiado estúpidas para participar en una comunicación significativa atribuyeran significado a la fecha del comienzo de sus vidas. Tal vez era cierto débil intento de individualidad o algo así.
'Hmmm... Hoy es la misión de exploración. ¿Quién haría un buen señuelo suicida?' El pensó en ello por un momento. "Ah, es verdad. Ella... Uh... ¿Cual es su nombre? La amarilla." Nunca se había molestado en recordar los nombres de las Youma que el había marcado para hacer de señuelos para sacrificar. Mejor no tener lazos.
Él pudo recordar que ella era una Piscis, sin embargo, y busco su horóscopo.
Nephrite frunció el ceño. Eso sonaba como...
El comprobó la fecha del documento, y dio un disgustado gruñido. Esta era la publicación de ayer. 'Bueno, eso explica por qué Allamite me guiñaba de esa forma ayer por la noche'. Se estremeció, e hizo una nota mental, trasladarla al servicio de Kunzite. Mujeres insecto no eran de su tipo.
Mirando a su derecha, observó que otro compañero estaba leyendo un periódico que tenía la fecha correcta. El toco inmediatamente al hombre en el hombro. "Necesito ese documento. Démelo."
El hombre le dio al general oscuro una mirada desdeñosa. "No"
Al otro lado de la pequeña cafetería, las personas recogían rápidamente sus bebidas y se escurrían por la puerta mientras un grito sangriento hizo erupción de una de las esquinas, seguido por unas descargas de energía no natural, que a su vez fue seguido por el sonido de un cadáver humeante cayendo al piso.
La gente en línea miraba el lugar en horror, luego miro a la salida. Luego miró nerviosamente de vuelta al cajero, en donde la cajera estaba todavía en shock.
Sus ojos fueron a la puerta. Luego una vez más, al cajero.
El hombre al frente de la línea se inclinó hacia adelante con impaciencia. "¿Puede usted darse prisa, por favor? Me gustaría continuar con mi vida tan pronto como sea posible."
El resto de la gente que esperaba ansiosamente asintió de acuerdo.
Nephrite se quitó el polvo de ceniza del parcialmente quemado periódico y lo abrió, buscando la sección correspondiente y con la esperanza de no haberla destruido accidentalmente. Usualmente, él era mucho más sutil que eso, pero desde que había adoptado por disfrutar del café, había estado mucho más irritable y impulsivo cuando el estaba sin la sustancia durante un largo período de tiempo.
Rápidamente tomó un sorbo de la preciosa y amarga bebida, el encontró los horóscopos del día actual.
Nephrite parpadeo. Esto parecía algo inusual para ser una adivinación. Leyó los demás horóscopos, no podía encontrar otro con el mismo tono, los demás eran simples, y perfectamente vagas predicciones acerca de riqueza, éxito y amor.
'Esto significa algo...' Nephrite pensó, sus ojos se estrecharon mientras frotaba su barbilla. Entonces él se encogió de hombros. 'Bueno, es más o menos de acuerdo con mis planes de todas maneras'. Agarró su taza de café, toma unos pocos y largos sorbos, y luego se dirigió hacia la salida, tirando una moneda de cien yenes al bote de propinas, mientras el cajero se ocultaba bajo el contador hasta que pasó. 'No hay necesidad de cambiar el plan. Youma ataca, Senshi contraatacan, y observo. Suficientemente simple. ¿Qué podría salir mal?'.
"Todo esto es culpa de Sagara," dijo Rei apretando sus dientes mientras se sentaba en una mesa de la cafetería, echando humo.
Usagi y Ami estaban sentadas a ambos lados de ella, Ami del lado de la ventana para que pudiera hacer su tarea sin temor a las migajas que echaba Usagi debido al rápido ingerir de sus alimentos (También era más conveniente para la camarera que la mayor ingestora de comida en el restaurante estuviera en el frente de la cafetería).
Frente a ellas, Los Knights de Orion se sentaban en una formación similar; con Ranma (En forma masculina) rápidamente vaciando su propia ración de alimentos, Negi comía de un plato de sopa, y Sousuke trabajaba en su propia tarea de tal forma que sus libros y papeles se sobreponían a algunos de los de Ami.
Usagi trago unas bolas de arroz. "¡Yo no sé por que estas tan molesto! ¡No es como si no tuvieras ninguna amiga en tu nueva escuela!"
"¡Esa no es la cuestión!" La sacerdotisa exclamo. "¡Es el principio del asunto! ¿Es que vas a dejar que este loco se inmiscuya en tu vida también?"
Ami tosió suavemente, y dijo en un tono mucho más tranquilo, "Rei-chan, somos chicas normales que han sido reclutados para participar en una guerra secreta contra un enemigo sobrenatural. En comparación con esto, la 'intrusión' al hacer un traslado de escuela no parece inapropiada".
"Están considerando aún la suposición de que yo tuve algo que ver con eso", Sousuke dijo de repente, cayendo en silencio con la misma rapidez. Él no quería revelar más información, dado que el era totalmente responsable.
Ranma y Negi continuaban comiendo. Los dos estaban bastantes seguros de que Sousuke era el culpable, pero no querían suscitar más problemas.
"Creo que es genial," Usagi dijo entre bocados, logrando sonreír bellamente a pesar de las manchas de salsa de ostras en torno a sus labios. "¡Ahora todas las Senshi están juntas! ¡Es perfecto!"
Rei continuó gruñendo entre dientes. Tal vez si fuera solo Usagi sería bueno, por lo menos ella podría conseguir un sonrisa al demostrarle lo buena que era constantemente. Pero Ami estaba también en la clase, y eso destruía totalmente la curva de grado.
Ella dejo de pensar en su deprimente futuro apoyado por educación patrocinada por el gobierno y se conformo con mirar con furia a Sousuke un poco más.
Usagi trago el último de sus takoyaki, y luego miró a un plato de anguila nigiri al borde de la pila de los principalmente platos vacíos de Ranma.
Los palillos se desplazaron mucho antes de que ella empezara a hablar, meramente la primera técnica en su arte. "¡Ooh! ¡Unagi! - ¿Puedo...?"
¡Clack!
Todas las demás actividades, pasivas o de otro tipo, se detuvieron, y todos los demás se dieron la vuelta para ver los palillos de Usagi firmemente agarrados, por el medio, por los palillos de Ranma.
Una determinada expresión cruzó la cara de Usagi. Sus palillos temblaron ligeramente, pero ningún otro visible resultado de su esfuerzo era evidente.
El chico de la trenza miro a la chica de las coletas. Sus ojos se redujeron en desafió.
Los demás miraban la tensión del momento en absoluto silencio. Incluso Negi, que nunca habían visto a Usagi comer, sentía que estaba presenciando el choque de dos poderosas fuerzas que él nunca hubiera imaginado antes.
La mano de Usagi se torció de repente, logrando escapar parcialmente del agarre de madera de Ranma. Un inmediato giro de la torcedura libero sus herramientas, y todo su brazo se lanzo en una apretada espiral mientras sus palillos escapan y se lanzaron por su premio.
¡Clack!
¡De repente, un par de palillos atacó su flanco! Una vez más los palillos de Usagi fueron atrapados, a preciosos centímetros de sus presas.
"Doble mano hashi-jutsu," Ranma dijo en una voz demasiado seria para la situación actual. "Nunca tuviste oportunidad."
Mientras Usagi se lamentaba atípicamente, de repente Ranma levantó su otra mano, que tenía su primer par de palillos, los que a su vez alzaban una bola de arroz.
Los ojos de Usagi se abrieron más aun mientras Ranma puso toda la bola en su boca. "¡Hey! ¡Eso es mío! ¡No es justo! - ¿Cómo es que... cuando, pero tú...?"
Ranma sonrió y liberó los utensilios de la chica. "Espera lo inesperado. Cualquier cosa vale en la guerra. No existe lo 'Justo'".
"Yo no sé si estar impresionada o disgustada," Rei murmuró. Ami asintió en silencio.
Las cejas de Sousuke se elevaron. El podía apreciar el sentimiento de Ranma, pero comer era una de las pocas actividades que aún él nunca había tratado como una situación de combate. El decidió llevar su pistola con él para las comidas de ahora en adelante.
Usagi miro a sus palillos vacíos, obviamente conmovida
Rei suspiró. "Y aquí vienen las cataratas..."
Era innecesario decir, ella se sorprendió y confundió cuando Usagi de repente se levanto de su asiento, se puso de rodillas, y luego se postro en el suelo ante el maldecido artista marcial.
"MAESTRO ¡Enséñeme sus secretos! ¡Haré lo que sea!"
Ranma parpadeó repetidamente, no muy seguro de cómo responder a esta nueva situación.
Rei masajeo su frente. Justo cuando ella pensó que su bobalicona líder no podia ser peor, ella decidió dejar de ser previsible. "Cabeza de chorlito, ¿Podrías pararte de una buena vez? La gente está mirando".
Ami sólo trató de enterrar su nariz en el libro que estaba leyendo. A veces, ella se alegraba de no tener muchos amigos, lo que realmente la ayudaba a no ser reconocida en situaciones como estas.
Nephrite aplastó la taza de café en su mano antes de vaporizar su suave material sintético con una chispa de energía oscura, enviando sus cenizas volar al suelo del callejón en el cual se encontraba.
"Así que esa es todo lo que tienes que hacer en tu misión, #28. ¿Alguna pregunta?"
La Youma amarillo pálido, de cuatro brazos frunció el ceño. "Sí, Señor Nephrite... ¿Por qué me llama #28?"
"Porque sólo hay unas cuantas rocas y piedras preciosas que conocemos, y tenemos que reservar los nombres para los importantes Youma que puedan sobrevivir a sus batallas. Los números son más eficientes para el resto de ustedes." Nephrite dijo sin rodeos. Ya podía sentirse deseando un café expreso.
#28 proceso esto por un momento. "¿Se trata de una misión suicida, mi señor?"
"No, no, una y mil veces, ¡No!" Nephrite dijo, dándole algo de seguridad. "Bueno, sí, pero ¿Y que?" Sin dejar que el señuelo sin nombre protestara, él la empujó para que salga a las calles y se tele-transporto al techo, el cambio a su uniforme gris oscuro de General en el proceso.
Los gritos de los peatones que huían de pronto comenzó, y Nephrite sonrió para sí mismo. Pronto vería el verdadero poder de este enemigo por sí mismo.
En el interior del café, Ranma asintió la cabeza solemnemente. "Muy bien. Pero tienes que saber que el camino del hashi-jutsu es uno de tribulaciones, joven conejo", dijo en burlona imitación del apodo *saltamontes* usado en un de los dramas de artes marciales que había visto en la tele cuando era más joven. "Muchos enemigos deben ser conquistados, y muchas comidas pueden perderse. ¿Estás preparada?"
"¡Sí! ¡Si lo estoy!" Usagi dijo fervientemente y de repente asiendo una de las manos de Ranma con una de las suyas. "¡Por favor! ¡Enséñame todo- OW!"
Ranma levanto su mano libre, junto con sus palillos. Atrapados por sus implementos de madera estaba la mano libre de Usagi que se había lanzado para alimentarse. "Tácticas baratas de distracción no funciona conmigo. Tú tienes mucho que aprender, joven conejo".
Ami, que estaba tratando de buscar algún otro sitio para evitar formar parte de la locura que pasaba al otro extremo de la mesa, parpadeó al notar de repente varias personas corriendo por la ventana, luciendo en pánico.
"¡Un Youma está atacando!"
Rei de inmediato se puso de pie, contenta de tener una interrupción para la nueva rareza de Usagi, incluso si significaba que tenían que luchar contra otro enemigo. "Ponte de pie, cabeza de chorlito! ¡Tenemos trabajo que hacer!"
Ranma y Negi se miraron el uno al otro y asintieron. Luego se volvieron a Sousuke.
El mercenario cerró su libro de golpe y con calma recogió sus papeles en su mochila. "Saotome, Springfield, encuentren y enfrenten al enemigo. Refuerzos llegarán inmediatamente después de que el resto de nosotros se cambie." Dado su postura y lenguaje corporal, casi no se podía decir que estaba hablando acerca de una inminente pelea, lo cual era precisamente su intención.
Ranma se levanto de la mesa y ayudó al joven hechicero detrás de él, aunque sorprendió al joven británico al poner al chico sobre sus hombros. Sin otra palabra, él agarró el agua con hielo de Sousuke y salió por la puerta.
Ami estaba guardando sus propias cosas, aunque ella lucía estar en mucho más pánico que Sousuke. Rei se puso de pie para buscar una zona apartada y notó que las otras personas en el café lentamente averiguaban lo que estaba pasando y se dispersaban en estado de pánico.
Después de unos momentos, ella notó que la puerta de atrás del restaurante estaba abierta y daba a un callejón. Eso serviría. "Bueno, creo que he encontrado..."
Ella iba a continuar mientras se daba la vuelta, sólo para ver que Sousuke ya se había ido, Ami estaba lista para irse, y Usagi... sobre la comida de Ranma, poniendo varios de sus nigiri en su boca lo más rápidamente posible.
"¡USAGI!"
"Gack!" La rubia de repente se ahogo, arrojando trozos de arroz mientras ella luchaba por tragar. "¡Ulp! ¡Lo siento, lo siento! OW! Rei! ¡Eres tan mala!" Ella se quejó con lágrimas en los ojos, mientras la chica de pelo negro la agarraba por su coleta y procedió a arrastrar a la despistada heroína a un lugar seguro para transformarse.
#28, como se le había asignado sin contemplaciones, se encontraba en un poco de aprietos.
Como Youma, ella estaba bastante lejos de ser una de las mejores, tanto en términos de cerebro y poder, pero ella si lucía aterradora. Ella era alta con espinosas y largas extremidades, y con cuatro brazos en garras curvas puntiagudas. Su cabeza tenía una mandíbula alargada, que estaba lleno de agudos dientes, y sus ojos parecían emitir una penetrante y mortal mirada a los que la veían. Nunca vio los cómics de los humanos, pero si lo hubiera hecho, ella podría haberse descrito a sí misma como una Violator femenina de Spawn, sólo con cuatro brazos en vez de miserables dos.
Lamentablemente, ser bastante aterradora era el alcance de sus poderes. Ella tiene garras de largo alcance, pero dudaba de que pudiera pasar por algo más resistente que el cuero común. Aparte de esto, ella no tenía nada, y para hacer las cosas peor, su inusualmente largos pasos la hacía bastante torpe.
Por supuesto, en su profesión, la única cosa peor que ser casi impotente, era ser casi impotente, y lucir de esa forma. Si uno fuera un completo debilucho, al menos hay una buena oportunidad de que te pasen por alto completamente. Sin embargo aterradores Youma llamaban la atención.
Un ejemplo de ello: simplemente por caminar por la calle, metida en sus propios asuntos, ella había enviado a toda la población cercana en completo pánico. Ella no había atacado a nadie, e incluso había esperado en la orilla de las intersecciones esperando la señal de *Verde* antes de cruzar.
¿Pero que hicieron los humanos? Se asustaron y corrieron. Y ahora es sólo cuestión de tiempo hasta que unas estúpidamente poderosas chicas en minifaldas llegaron y la hicieran papilla. Todo por el bien de la recopilación de datos para que Nephrite lo use.
Algunos días sólo no eran buenas para salir de debajo de su piedra.
"¡Maldición, esta es una fea!"
#28 se dio la vuelta para encarar la voz, y parpadeo a la vista ante ella.
'Que gracioso. Ella está vestida bastante... diferente a una Senshi' Ella pensó, mirando hacia la pelirroja de la trenza con un mirada que habría hecho a meros mortales mojar sus pantalones.
Cabalgando sobre los hombros de Ranma, Negi trago saliva nerviosamente. "Está bien, entonces. ¡Vamos!"
Asintiendo, Ranma levantó de repente el joven mago fuera de sus hombros y luego arrojo al pequeño en el aire, con bastón y todo.
La Youma parpadeo en sorpresa y vio al niño volar sobre su cabeza, sin pensar en la cantidad de fuerza necesaria para tal hazaña, o el hecho de que tal fuerza estaba de pie delante de ella, preparando un ataque.
¡Crack!
La Youma tropezó mientras Ranma pateo su rodilla.
¡Thwack! ¡Pow!
Ella dejo salir un grito ahogado cuando encontró a dos de sus codos aplastados incluso antes de que ella supiera lo que estaba sucediendo.
"¡Meep!" #28 abrió la boca en asombro mientras la pelirroja agarró uno de sus brazos sanos y se agacho... para poder quebrarle su codo. Antes de que pudiera recuperarse, Ranma se agacho y luego lanzó una feroz patada, sorprendiendo al Youma dándole en el mentón lo suficientemente duro para enviarla a volar al aire.
"Rastel Maskil Magister..." Se escucho desde arriba del Youma a medio vuelo. Lamentablemente, aún estaba tambaleándose por el golpe a la cabeza, por lo que no podía saber que era.
Negi llegó en picada directamente hacia abajo desde el cielo, sus piernas ancladas firmemente en torno a su bastón, sus manos cargadas de electricidad que anhelaba su liberación.
"¡Un haz de luz que corta a través de la oscuridad! ¡Libérate de mi mano, y ataca a mi enemigo! ¡FULGURATIO ALBICANS!" Con ese último grito, su camino se intercepto con el del Youma.
¡KRACKA-BOOM!
El Youma señuelo rápidamente se desintegró ante la embestida de la energía mágica, dejando una ola de polvo cayendo sobre el terreno.
El bastón de Negi parecía congelado en el lugar a casi un pie sobre el suelo y, a continuación, se coloco en posición horizontal mientras el bajaba al suelo. "Bueno... eso fue muy rápido...".
Ranma asintió con sorpresa. Luego ella se dio la vuelta y se puso en posición de combate.
"¡Detente ahí!" Sailor Moon clamo mientras entraba en escena, Mars y Mercurio justo atrás.
Ranma y Negi se miraron el uno al otro. "¿Quién? ¿Nosotros?"
Sailor Moon parpadeó y miro alrededor. "¿Dónde está el Youma?"
Ranma estaba a punto de explicarlo, cuando la nariz de Negi se vio afectada por el polvo en el aire. "¡Ahhhh... AH - CHOO!"
¡BWOOOSH!
Todas las Senshi agarraron sus faldas (Ranma no podía imaginar por qué; con faldas tan cortas tales intentos de modestia eran prácticamente un desperdicio), mientras una ráfaga de aire salió de Negi, soplando gran parte del polvo caído al aire, una vez más.
"Oh... de manera que eso es lo que sucedió," Mercury murmuró. "¿Tan fácil?"
Ranma asintió. "Sí. Fue bastante débil". Lo qué le pareció extraño. ¿No se supone que los enemigos son MAS FUERTES una vez que comenzabas a acabar con los lideres del enemigo?
En una lejana azotea, Nephrite frunció el ceño profundamente.
'¿Las Senshi tienen nuevos aliados? ¿Humanos como aliados?' Este no era un buen augurio, por una variedad de razones. Además del evidente problema de las Senshi obteniendo más poder para resistir al Negaverso, ver a dos humanos vestidos normalmente sin un trozo de energía del Milenio de Plata provoco una idea algo humilde: ¿Y si las Senshi no eran las más poderosas oponente que el Negaverso tendría que enfrentar en su conquista? ¿Era posible que perfectamente normales seres humanos sean capaces de tener el poder para detenerlos?.
Por otro lado, no se sentía bien que los humanos eran tan jóvenes, también. Rayos, ¡El niño en el bastón no lucía de más de diez años de edad! Nephrite no quería pensar en la posibilidad de hacer frente a un ejército de niños pequeños lanzándole rayos a él; luchar contra las Senshi era bastante humillante.
'Obviamente, nuestra oposición es más compleja de lo previsto. Desde luego, yo tengo mi trabajo-'
El general oscuro fue interrumpido por un disparo de escopeta, y su cuerpo se lanzo adelante mientras decenas de bolitas de metal atravesaron su barrera pasiva y se clavaban en su piel.
"¡GYAH!" Clamo en dolor, Nephrite rápidamente evocó su barrera activa y se dio la vuelta, un halo de oscuridad ya reunida en torno a sus manos.
Nephrite estaba bastante sorprendido al ver a un hombre en uniforme de combate y blindaje corporal arrodillado junto a la salida de aire que sobresalía de la azotea. La figura cargaba una escopeta automática calibre 12, y tenía una máscara de gas sobre su cara para impedir su identificación.
El general oscuro frunció el ceño. Ahora la JSDF se involucraba. Qué molesto. "¡Muere!". Levantando una mano, y relámpagos negros salieron de ella.
Sousuke ya se estaba cubierto detrás de los conductos, a la vez que dejaba caer un pequeño cilindro de metal en el techo detrás de él.
Nephrite bufó. Había oído hablar de las 'granadas' de los seres humanos. Era evidente que este idiota no conocía muy bien los dispositivos, ya que el humano estaba mucho más cerca de los explosivos de lo que el general del Negaverso lo estaba.
¡BANG!
Nephrite grito y accidentalmente lanzó su ataque inofensivamente al aire mientras su visión se puso blanca y sus oídos sonaba dolorosamente por la granada Flashbang. Afortunadamente, o en algunos aspectos, por desgracia, el arma no tenía efecto alguno en los escudos de Nephrite (Y por lo tanto no estaba impedida por ellos).
¡BLAM! ¡BLAM!
El ciego general estaba tentado a simplemente echar abajo el edificio por debajo de él para tratar de aplastar a su nuevo enemigo, pero cedió a la razón, esta era la fuerza que había matado a Jaedite, y dudaba que podía vencer a las Senshi si no podía verlas.
Nephrite activo su tele-transportación.
Beryl frunció el ceño profundamente mientras Nephrite, una vez más, arrodillado ante ella, a menos de cuatro horas después de habérsele dado su tarea primordial y de ser enviado. "Así que las Senshi tienen aliados, ¿No es así?".
Después de haber escuchado apenas su pregunta sobre con tono molesto en sus orejas, Nephrite asintió. "Es cierto, mi reina". Nephrite llevo su mano donde recibió la herida en su espalda por la escopeta que ya había sanado rápidamente. "Aliados humanos, evidentemente. Bien formados en las artes de la guerra. Ellos usan la magia y la tecnología, y luchan como verdaderos guerreros". No es que hubiera habido mucha lucha, ya que su Youma señuelo había caído muy rápidamente. "Aunque es mi opinión que no tienen el poder crudo de las Senshi, pero lo compensan con la habilidad de avezados veteranos".
Beryl gruño. Esta no era buenas noticias. En lo absoluto. Su idea de guerra era simplemente lanzar innumerables y dispensables lacayos a su blanco. Esa táctica de batalla coincidía con su idea de combate, en la que simplemente bombardeas a tu enemigo con la mayor cantidad de energía bruta que puedas reunir y hacerlos polvo. Ningún enfoque era viable ahora, por lo que realmente no tenía idea de qué hacer al respecto. Enviar monstruos idiotas al campo para luchar solo funcionaba sólo si tu oponente era igualmente idiota.
"No se preocupe, mi reina. Tengo planes para enfrentar estos nuevos percances."
La Reina oscura lanzo un bufido. "¿Y estos 'planes' involucra llevar guerreros más poderosos a las fauces del enemigo, al igual que como otro de mis siervos, que ya no está entre los vivos?"
"Por supuesto que no," Nephrite dijo con calma, luchando contra el impulso de mofarse. "Jaedite no tomó en serio a sus oponentes, y por eso él pagó el precio supremo." Nephrite miró hacia arriba. "Es mi creencia de que con nuestras reservas actuales de energía, tratar de derrotar a las Senshi y sus nuevos aliados en batalla es descuidado, sobre todo si nos vemos obligados a ir contra ellos. Voy a atacar en forma diferente...".
La reina pelirroja sonrió y ondeó su mano al hombre arrodillado ante ella. "Entonces no desperdicies más de mi tiempo. Quiero ver resultados, y no planes. Si me fallas, voy a hacer que envidies a Jaedite por su suerte."
"Como desee, mi reina".
"Así que ¿Qué es de lo que quieren hablar conmigo?" Ranma preguntó mientras ponía su portapapeles bajo el brazo.
Rei, Ami, y Usagi estaban todas reunidas delante de él, con Sousuke parado sólidamente a lo largo del flanco del grupo por ningún motivo que alguno de ellos les importara imaginar. El resto de la clase estaba colocando planchas de madera contrachapada sobre bloques de hormigón y por turnos las rompían con golpes de Karate.
Ami se sonroso un poco y miro abajo a sus tenis. Rei dio otra mirada de advertencia a otro chico en el gimnasio que sospechaba la estaba mirando pervertidamente a ella usando sus shorts cortos. Usagi sólo sonreía ligeramente con una vaga expresión.
"Uhm... Saotome-sensei..." Ami comenzó algo dudosa, y parpadeando cuando Ranma la interrumpió.
"Por favor, ya deja eso de 'Saotome'. Llámame Ranma." Era suficientemente malo que Sousuke se rehusara a llamarlo por su primer nombre, pero no dejaría que estas chicas lo hicieran también.
"Bien... Ranma... Me pregunto si tú podrías... uhm..." Ami tosió en su puño, tratando de superar su timidez. "Si pudiera dejar que yo y a Rei nos 'saltáramos' su clase".
Ranma parpadeó. "... ¿No les gusta mi clase?"
Ami parpadeo. Él sonaba realmente triste por esa perspectiva. "¡No es eso! Pero... bien... es realmente mucho más dura de lo que debería ser... y... uh..."
Rei finalmente decidió que no importara cuanto los mirara feo, ella no podía impedir que los chicos de los alrededores miraran sus piernas, y se paro en frente de Ami. "Yo manejare esto."
Entonces sus ojos se estrecharon encarando a Ranma, y ella toco con un dedo al chico de la trenza en el pecho. "Ahora, escúchame; ¡La manera en que diriges esta clase es ridículo! ¡Es educación física, y no un curso de artes marciales!"
Ranma cruzo sus brazos sobre su pecho. "¿Y qué? ¿Cuál es el problema con eso?"
"¡El problema es que esto es demasiado!" Rei exclamo. "Quiero decir, ¿Kickboxer? ¿Romper tablas con nuestras propias manos? ¡Es muy duro y doloroso para la gente común!"
Ranma decidió no plantear la idea de que ellas no eran gente común. Tampoco dar una descripción de lo débil que era la madera contrachapada. En lugar de ello, el bajo sus manos en derrota. Algunas batallas, sencillamente, no vale la pena ganar. "Está bien, está bien. Están disculpadas de la clase".
Rei asintió bruscamente, de repente sonriendo. Era bueno que haya algunos hombres que podían escuchar la razón cuando se les golpeaba en la cabeza con ella. Ami dejo salir un suspiro de alivio, y ambas se dieron la vuelta en rumbo a los vestidores.
Ranma suspiró y bajo la cabeza a un lado. "Supongo que tienes razón. Estas cosas son un poco dura para que las chicas lo hagan."
¡Thud!
Ami dejo salir un ligero gemido cuando ella choco con la espalda de Rei porque ella de repente se detuvo rígidamente.
"¿Que quieres decir?" La chica de cabello negro demandó saber, de nuevo dándose la vuelta.
Ranma parpadeó. "¿Qué es lo que quiere decir?"
"¿Ese pequeño comentario acerca de que es 'duro para las chicas'?" Rei pregunto. "¿Estas diciendo que las chicas no pueden hacer lo que los chicos pueden?"
Ahora, Ranma no era estúpido. Aunque Genma le había enseñado que las mujeres son débiles y desvalidas, ambos Saotomes sabían muy bien que dicha declaración era una generalización, ya que se habían encontrado con muchas mujeres guerreras poderosas en sus vidas. Rayos, Ranma era un poderosa chica la mitad del tiempo.
Así que Ranma sabía que una chica podía llegar a ser tan fuertes y capaz como cualquier hombre. Pero también sabía que la mayoría de ellas no lo eran.
"No veo a ningún chico quejándose", Replicó Ranma, cruzando los brazos sobre su pecho de nuevo. Por lo que ya sabía, ya que Rei había catalogado su clase como *demasiado dura*, ya estaba en la categoría de *débiles e indefensas*... Al menos hasta que ella se ponía su falda mágica y comenzaba a lanzar bolas de fuego.
"¡Ese no es el punto!" Rei gruño, bastante molesta. Ami y Usagi rápidamente salieron del camino entre Ranma y Rei "¡Tu clase es demasiado dura! ¡Punto! ¡Ser una chica no tiene nada que ver con esto!"
Ranma se dirigió a un lado. "Hey, Sousuke! ¿Crees que mis clases son difíciles?"
"Negativo", Dijo simplemente el mercenario, y sin haber seguido la conversación hasta que fue abordado. "Tus ejercicios son de un nivel de dificultad apropiado para la capacitación de civiles."
"¡No puedes tomar su palabra en este caso!" Rei exclamo, "¡Él esta tan fascinado por la lucha como tu!"
Ranma se burlo entre dientes, ya que no creía mucho en la capacidad física de Sousuke en lo absoluto. El tipo no podía ni siquiera saltar a un edificio de dos pisos desde la calle. ¿Pero que es lo que hacían todos los días en esos campamentos de entrenamiento?.
Sin embargo, el reconoció que este argumento iba a convertirse en una batalla de gritos en ves que la chica de repente solo lo golpeara y se fuera furiosa, por lo que decidió renunciar sólo para ahorrar tiempo y energía. "¿Sabes qué? Bien. Me retracto. Lo siento. Puedes saltarte mi clase ahora."
Ami asintió en acuerdo y se movió para salir, pero Rei le agarró por los hombros y la trajo de vuelta. "No tan rápido. Crees que nos estamos yendo porque nosotras como chicas somos demasiado débiles para tu estúpida clase, ¿No?"
"No. Estoy seguro de que es porque me he sobrepasado y ustedes son las únicas que han juntado valor para hablar conmigo sobre eso," Ranma refuto mientras rodaba sus ojos.
"Sí, bueno, ahora que hemos aclarado todo-" Ami comenzó, tratando de salvar su escape. Ella podía ver a donde iba esto.
Para su angustia, Rei desempeño su parte y la interrumpió. "¡Bien! ¡Te mostrare cuan 'débiles' son las chicas! ¡Vamos, Ami-chan!"
Mientras ella era arrastrado hacia el alboroto de concreto y madera al otro lado del gimnasio, Ami vio sus esperanzas de pasar la hora de gimnasia sentada en su segura y silenciosa biblioteca romperse en un millón de piezas a su alrededor. ¡Ella había estado tan cerca!
Ranma se rascó su cabeza confundido, preguntándose cómo toda la situación había salido bien para él. Por lo general, cuando él tenía luchas verbales, él solo agitaba a la oposición hasta que se iban en frustración (A veces golpeándolo primero). ¿Quizás esa no era la mejor forma de manejar a una chica enfadada? Él tendría que analizar esa idea más tarde.
"Entonces, ¿Por qué estás aquí, Usagi?", Preguntó él.
Ella inmediatamente tuvo ese maníaco brillo en sus ojos. "¡El hashi-jutsu! ¿Me lo puedes enseñar a mí ahora? ¿Por favor?"
Ranma parpadeo una vez más, no habiendo esperado eso. Entonces él se encogió de hombros. "Seguro. Podemos empezar ahora." Probablemente era mejor mantenerla alejada de los ejercicios normales de todos modos. Usagi probablemente golpearía accidentalmente el bloque de concreto o lo tumbaría al pie de alguien o algo así.
"¡HIYAH!" La mano de Rei rompió a través de tres tablas de madera contrachapada con facilidad, enviando astillas de madera al piso.
La chica de cabello negro se enderezó y sonrió mientras algunas de las otras chicas cercanas le dieron algunos aplausos por la hazaña.
Rei sólo lanzo un suspiro de satisfacción. Esto no era tan duro, no podía imaginar por que se quejaba Ami. Rayos, ella sólo había ido con ella para tener la oportunidad de no usar sus shorts de gimnasia y a los chicos que no dejaban de mirarla cuando los usaba.
Detrás de ella, Ami tocaba su mano mientras diagnostica rápidamente la formación de moretones. Muy pocos, por supuesto, pero simplemente le recordaba el hecho de que había estado muy cerca de escapar de esta locura.
Como Rei aparentemente había tomado la tarea de personalmente igualar la pila de madera contrachapada destrozada que la clase de los chicos habían acumulado entre ellos, Ami trato de encontrar alguna otra cosa para distraerla de sus preocupaciones. Ella encontró esa distracción cuando escuchó el nombre de Usagi siendo pronunciado de las bocas de dos chicas mayores detrás de ella.
"... En serio, y entonces ella se lanza toda sobre él durante el almuerzo! ¡Qué desvergonzada!" La primera chica comento, sentada en uno de los bloques de hormigón.
Su amiga sacudió la cabeza. "Ella no parece de ese tipo, pero sí. Primero, ella esta toda sobre Sagara, y ahora ella está recibiendo especial atención del profesor de gimnasia? ¿Qué es tan especial en ella que tiene a esos dos dando vueltas por el dedo de su mano?"
¡"No sólo 'atención especial'! ¡Yamiko los vio comer juntos el día de ayer justo antes de que un Youma atacara! Adivina que: Ella de repente lo llamó 'Maestro' y ellos comenzaron a besuquearse donde estaban!"
Ami parpadeo. Eso era sin duda... Principalmente inexacto.
"¡Estas bromeando! ¿Con su profesor? ¿No existen leyes en contra de eso?"
"Pfeh, como si le importara. Esa pequeña tramposa probablemente sólo jugara con él hasta que haga que lo despidan y luego pasar al siguiente galán al que sea capaz de hundir sus garras. Quiero decir, mírala ella y al sensei! Incluso ahora están..." La niña parpadeó. "¿Comiendo juntos? ¿Durante la CLASE? ¿Podría ella ser mas reservada que eso?!"
Ami lentamente se dio la vuelta, y mostró una gota de sudor mientras ella vio a Usagi y Ranma sentado al otro lado del gimnasio, uno frente al otro, con un plato de arroz delante de cada uno de ellos.
'Así que esta es la *línea de rumores* de lo que escuche tanto hablar' Ami tembló. Era simplemente terrible.
Mientras Ranma se sentaba, el entregó a Usagi un par de palillos. "Aquí tienes. Vamos a comenzar por la práctica de comer arroz".
Usagi frunció el ceño, lo que muchos hubieran encontrado sorprendente (¿Usagi molesta ante la idea de comer? ¡Horror!). "Yo ya conozco la forma de comer arroz con palillos". Comer arroz japonés pegajoso era engañosamente fácil, aunque Usagi podía decir con orgullo que había dominado el comer tipos extranjeros de arroz seco con palillos así, y podía comerlo más rápido que la mayoría de la gente podía con una cuchara.
"Me di cuenta de eso. Pero es tan sencillo," Ranma explicó, rompiendo sus palillos. Luego lanzo su mano, y él cogió una gran cantidad de arroz de la taza delante de ella. "No voy a enseñarte cómo comer alimentos de tu propio plato, si no fueras lo suficientemente buena en eso ya, ni siquiera me molestaría contigo. La idea de este ejercicio es el entrenamiento en precisión". Él dejó caer el arroz en su boca.
Usagi asintió, su confusión reemplazada con firme determinación mientras ella rompía sus propios palillos.
"El arroz es bueno porque es más difícil de recoger a distancia", explicó Ranma después de deglutir. "Tú tienes muy buena técnica, pero es desperdiciada debido a tu mala precisión. Una vez que puedas alcanzar tu blanco, sin tener que concentrarte, podemos avanzar a las técnicas de ataque y defensa."
Usagi asintió de nuevo, luciendo muy seria en esto.
"No voy a defender mi tazón, por lo que concéntrate en tomar de mi arroz de donde estás sentado sin mover las piernas en lo absolutos. Voy a hacer lo mismo con tu tazón. Comienza".
Alguien que hubiera estado lo suficientemente cerca para observar la extraña sesión de entrenamiento, habría abierto la boca asombrado. Las personas que conocían a Usagi a cualquier medida, podrían muy bien desmayarse al ver la coordinación y la destreza con que la rubia lanzaba sus palillos a la taza al otro lado del de ella, arrebataba un bocado de arroz, y lo llenaba de nuevo a su boca limpiamente, en rápidos movimientos. Si hubieran logrado mantenerse consciente durante el tiempo suficiente, incluso habrían tomado nota de que Usagi aumentaba lentamente más y más arroz con cada movimientos, moviendo sus palillos en ángulos mejores después de repetidos *ataques* con que había probado los mejores puntos de asalto del arroz.
Sin embargo, nadie se acercó lo suficiente para notar todo eso, por lo que todos los que los notaron (Que era prácticamente todo el mundo) sólo pensaban que Usagi y el profesor de gimnasia estaban almorzando (A pesar de que podían decir que estaban comiendo con inusual entusiasmo).
A medio camino a través de su comida y entrenamiento, Usagi se pregunto por qué tenía que controlar el impulso de estornudar. Estúpidas alergias.
Continuara...