CRISIS EN EL ANIME INFINITO

Capitulo 4
So, The World is going to die
(Así que, el mundo va a morir)

Escrito por Lord Kal-el
Formato HTML de Hukarovi Yanoki

Aclaración: Todos los personajes pertenecen a distintos autores del manga y anime, y la historia esta basada en el comic "Crisis en las Tierras Infinitas", todos los cuales espero no me demanden por hacer lo que hago con sus personajes.


Planeta Céfiro

El planeta céfiro alguna vez fue considerado uno de los mejores y más hermosos planetas del universo, es un lugar que esta bien unido con la magia y es gracias a esta que ha logrado tener su actual gloria. Céfiro ha tenido, como todos, enemigos que han tratado de conquistarlo o destruirlo, pero la gente de ese planeta siempre ha sabido defenderlo, aunque ha veces han tenido la ayuda de grandes guerreros de otros mundos que han hecho leyenda en su breve estadía. Una de las más grandes fue Hikaru Shidou, la Magic Knight del fuego, que pasó a convertirse en el Pilar del planeta, después de salvarlo junto a sus amigas de sus más oscuras horas.

Y hoy ciertamente calificaba como una.

El fenómeno de antimateria que consumía al universo ya estaba a punto de llegar a Céfiro. Los planetas de Autozam, Cizeta, y Faren ya habían sido consumidos por completo por la antimateria, miles de refugiados de esos planetas habían llegado hasta Céfiro en un intento de escapar de su aterrador poder, sin embargo todo parecía en vano y no parecía ningún otro lugar donde esconderse de su omnipotente fuerza.

Aun les quedaba una esperanza.

Mejor dicho, tres.

Reunidos en el salón real de Céfiro se encontraban el gran Mago Guru Clef, el señor de las bestias Ascot, la joven emperatriz Asuka de Faren, Tarta y Tatra las princesas herederas del ahora destruido Reino de Cizeta , el guerrero Latis, y Paris, el nuevo gobernante de Céfiro y hermano del antiguo Pilar Esmeralda. Todos ellos estaban alrededor del Gran mago de Céfiro viendo como él se concentraba para realizar uno de los más difíciles hechizos que poseía.

"¿Estas segundo que puedes hacerlo?" Pregunto Asuka.

"Por favor emperatriz Asuka." Dijo Paris. "Debe dejar concentrarse a Guru Clef. Este hechizo no es nada fácil."

"Lo lamento, me pongo sumamente nerviosa cuando lo que queda de mi gente y yo estamos a punto de morir por culpa de un gran muro de extraña energía." Le contestó ella en un tono bastante amargo, aunque se podía sentir también su miedo.

"No se preocupe." Le dijo Tatra "Todos estamos temerosos pero estoy segura de que con la ayuda de las Magic Knight podremos salvar a todos, si alguien tiene el poder de hacerlo son ellas."

"Mi hermana tiene razón." Exclamo Tarta.

"Silencio." Dijo Latis. "Guru Clef parece que esta punto de hacerlo."

Todos miraron al poderoso mago empezar a brillar de un color blanco absoluto, la energía que lo rodeaba era increíble, él abrió sus ojos súbitamente y un rayo de energía salió de su cuerpo y se dirigió hacía arriba atravesando el ventanal multicolor del techo sin romperlo, y a través e él todos observaron como el rayo de energía se perdía en los cielos ahora rojos de Céfiro.

Hubo un momento de silencio.

Luego otro.

Y otro.

Los presentes seguían observando.

Finalmente fue la emperatriz Asuka la que se canso primero de ver para arriba y le hablo a Guru Clef. "Oye, ¿Qué se supone que tenemos que ve-?"

Las palabras de Asuka fueron cortadas por el regreso del rayo blanco que impacto justo delante de ellos, en las otras ocasiones cuando convocaron a las Magic Knights había sido en espacios abiertos, en los cuales Guru Clef tuvo que tomar medidas para garantizar su seguridad, pero esta vez el había perfeccionado el hechizo lo suficiente para traerlas con mas eficiencia esta vez.

Aunque aparentemente no a todas.

"¿Dónde esta Hikaru?" Pregunto Latis al ver que la Magic Knight del fuego no estaba presente.

"¿Eh? ¿Fuu? ¿Latis? ¿Guru Clef, pero...?" Umi apenas podía pronunciar palabra, un minuto estaba corriendo junto con sus compañeras en busca de refugio del terremoto que estaba ocurriendo y al siguiente ella estaba en Céfiro.

"Parece que estamos de nuevo en Céfiro." Dijo su amiga Fuu. "¿Pero donde esta Hikaru?"

"Eso es lo que todos queremos saber." Dijo la princesa Asuka y luego miro a Guru Clef. "¿Donde esta ella? Hikaru es a la que mas necesitamos."

"No lo sé." Contesto el mago real. "Aparentemente no se encontraba en la Tierra."

"¡¿Qué cosa?!" Exclamo Umi.

Latis se paro delante de Guru Clef y lo miro a los ojos. "No me digas que ella ha..."

"Ella sigue viva Latis." Le aseguro el mago y luego miro al resto de los presentes. "De alguna manera, no sé como ni donde, pero siento que ella esta usando sus poderes como Magic Knight del fuego."

"¿Cómo es posible?" Pregunto Fuu. "Pensé que solo podíamos convertirnos en Magic Knights cuanto estábamos en Céfiro."

"Tampoco yo puedo explicarlo." Respondió el mago. "Pero no creo que ella los este usando por casualidad mientras Céfiro pasa por esta crisis, hay fuerzas que están actuando que escapan a mi comprensión."

Fue en ese momento que ambas Magic knight se dieron cuenta que algo mal estaba definitivamente en Céfiro, para que hayan sido convocadas de repente, hubo un intercambio de miradas entre ellas preguntándose si era posible que estuviera relacionada con lo que ocurre en la Tierra en este momento.

Fuu fue la primera en hablar. "Guru Clef, ¿No me digas que aquí también ha llegado ese fenómeno?"

El mago asintió.

"¡¡¡¿Qué?!!!"

Todos los presentes estaban sorprendidos por su respuesta, no pudiendo creer que esta amenaza hubiera llegado hasta allá.

"¿Por qué no nos dijiste nada?" Pregunto Paris. "¿Porque no nos dijiste que esto sucedía en la Tierra también?"

"Por la misma razón por la que Umi y Fuu están aquí." Le contesto Clef. "Para no perder la esperanza."

"¿Qué dices?" Pregunto Asuka, que se sentía engañada de algún modo.

"Ya han visto como esta la gente en su mundo, aterrada, confundida, aquí también pasa lo mismo." Guru Clef se dirigió luego a las Magic Knight. "Umi, Fuu, ustedes son un símbolo en Céfiro, con su sola presencia podemos tranquilizar a la gente hasta que pase esta crisis."

"Si es que pasa." Comento Caldina.

Todos posaron sus ojos sobre ella, que se sintió un poco mal por haber tenido que comentar eso. Pero sin embargo todos le dieron la razón en silencio en ello, la amenaza que los acechaba era algo que ellos nunca antes habían visto o escuchado, incluso Deboner hubiera sido incapaz de crear una milésima parte de la destrucción que estaban presenciando, aunque ciertamente le hubiera encantado verla.

Fue en ese momento que Fuu dio un paso adelante. "Debemos tener fe en Hikaru, estoy segura de que, donde sea que este, ella esta haciendo todo a su alcance para detener esta amenaza."

Umi sonrió a su amiga y se le unió. "Tienes razón Fuu, mientras tanto nos aseguraremos de que Céfiro sobreviva. Hikaru se nos unirá muy pronto, y salvaremos la Tierra y a Céfiro, es momento de confiar en ella."

El animo de todos empezó a levantarse lentamente por las palabras de Umi, ellos sabían que lo que harían sería meramente temporal, pero si algo les había enseñado el nuevo Pilar era a no darse por vencidos nunca, ellos ya habían depositado su confianza en ella antes no había razón para no hacerlo ahora. Umi y Fuu se miraron la una a la otra haciendo una promesa silenciosa de no rendirse nunca, y la de hacer pagar muy caro al culpable de toda esta destrucción.

\\\* * *///

Universo Gamma
Año 1562
Japon
Época de las Guerras Civiles

"¡Kaze no Kizu!"

Inuyasha una vez mas usaba su ataque para destruir un enorme Youkai de aspecto de cangrejo. La pelea con Youkais era común para el Hanyou, pero ciertamente le parecía extraño tener que pelear con esta clase de monstruo que generalmente habitaba en las playas y no en medio del bosque que era donde él y sus amigos se encontraban.

"Es increíble." Dijo su amiga Sango. "Este es el sexto Youkai en menos de una hora."

"De que te sorprendes tanto." Contesto el pequeño Shippo. "Creo que son menos de los que generalmente nos encontramos."

"No sé refiere a eso." Contesto el monje Miroku. "Mira mas de cerca sus restos, ese tipo de Youkai solo se encuentra cerca del océano jamás en el bosque."

"¿Podría estar relacionada con el extraño clima?" Preguntó Kagome Higemiya mientras miraba los cielos rojos.

"¡De seguro es obra de Naraku!" Exclamo Inuyasha.

"Me es difícil de creer." Contesto el monje Miroku. "Aunque él es muy poderoso, dudo que sea capaz de algo esto sin tener toda la perla de Shikon."

"¿Entonces quien crea que sea, su Excelencia?" Le pregunto Sango.

"Esto es algo que necesitamos meditar." Contesto el Monje mientras con una mano tocaba su barbilla mientras la otra bajaba por la espalda de la hermosa exterminadora.

"¡Urghhh!"

El monje Miroku ahora yacía en el suelo tratando de respirar después de que el puño de Sango lo había dejado sin nada de aire.

"Mejor cambie su madera de meditar" Le dijo ella mientras se limpiaba las manos.

"Este monje nunca cambiara ni aunque el cielo se nos caiga encima." Comento Inuyasha, en eso instante varios relámpagos resplandecieron con fuerza cerca de ellos. "Y por como están las cosas, parece que esa teoría va a ponerse a prueba muy pronto."

"¡Oigan, miren para allá!" Exclamo Shipou, el youkai zorro, mientras apuntaba con su mano en la dirección de donde venían.

Todos voltearon sus cabezas y vieron que donde había estado un simple bosque que ellos habían cruzado hace veinte minutos, ahora se alzaba la torre mas alta que hayan visto incluso para Kagome, que provenía del futuro, el tamaño de esa gran estructura era asombroso, por decirlo de alguna manera.

"¿De donde salio esa cosa?" Preguntó Inuyasha.

"No tengo idea." Respondió Shipou. "No estaba ahí cuando pasamos por ese lugar."

"Es como si hubiera aparecido de la nada." Respondió Sango.

"Será mejor que vayamos a investigar." Dijo el monje Miroku. "No creo que sea mera coincidencia que haya aparecido al mismo tiempo que todos esos sucesos extraños."

Todos asintieron y rápidamente se dirigieron al lugar donde estaba la Torre, Kagome era la única que se había quedado callada, como una visitante del futuro, ella pudo reconocer que su diseño definitivamente no era de esta Era al ver su aspecto metálico una estructura así nunca fue construida en este Periodo, tampoco podía decir que había sido construido en el suyo, ella no recordaba que hubieran construido algo tan grande en su tiempo. Sea lo que sea, ella ciertamente esperaba que no significara que su hogar puede estar en peligro.

En ese momentos, en la base de la gran Torre dorada.

"Galaxia, no creo que este es el momento para eso." Exclamo Ranma mientras trataba de librarse de las manos de la Sailor dorada.

"Vamos cariño." Le contesto ella con voz seductora. "He esperado tanto por nuestro reencuentro, tenemos que celebrarlo, y creo que ya es hora de recordar viejos tiempos."

'Pero que rayos le puso esa chica en su cabeza' Se pregunto Ranma mientras finalmente se libero de su abrazo y se alejo de ella unos pasos. "Creo que en este momento tenemos cosas muchas mas importantes que hacer."

"¿Cómo que?" Pregunto una frustrada Sailor Galaxia.

"Como impedir que esas cosas le hagan daño a esta maquina." Respondió Ranma mientras apuntaba detrás de ella.

Sailor Galaxia se dio la vuelta y vio que habían aparecido numerosos Kagemusha que venían desde el bosque o salían desde el suelo.

"No te preocupes mi amor, estas cosas pagaran por haber arruinado nuestro momento a solas." Dijo Galaxia mientras de la nada una espada dorada apareció en su mano. "Y luego de eso, podemos continuar con otras 'cosillas'."

Ranma no dijo nada por la aparición de la espada, luchar tantas veces con un maestro de las Armas Ocultas lo preparaba a uno para cosas como esa, aunque ciertamente le molestaba algo lo último que dijo. Sin tiempo que perder el puso sus manos adelante y lanzo su técnica. "¡Mouko Takabashi!"

Al mismo tiempo Galaxia lanzo un corte con su espada que disparo una ráfaga de energía dorada. Ambos ataque golpearon a las sombras, destruyendo a algunas, pero estas eran más y no se mostraban intimidadas.

Rápidamente Ranma se dio cuenta de que iban a necesitar de un plan diferente para encargarse de ellas. "Galaxia, yo atraeré su atención, no podemos dejar que nos rodeen."

"Entiendo tu plan." Contesto ella.

Ranma ciertamente esperaba que si, mientras rápidamente corría hacia adelante mientras lanzaba mas ráfagas de energía a sus enemigos, los Kagemusha se abalanzaron sobre él, pero él pudo evitar con éxito que lo tocaran, ellos eran bastante flexible y podían alargarse, pero Ranma era alguien que siempre era perseguido por el agua, por lo que sabía una cosa o dos sobre como huir de cosas que tenían su fluidez.

Por la esquina de su ojo él podía ver que Galaxia se encontraba moviéndose detrás de ellos, él sabía que huir no era una opción ahora, él tenía que moverse entre ellas lo bastante rápido para no ser tocado y hacer que ellas se amontonen, él podía ver que la chica dorada preparaba un gran ataque, él pudo ver que ella asentía un poco con su cabeza. Tomando eso como señal, él realizo un poderoso salto hacia atrás, alejándose lo más posible de ellas para no ser alcanzado por el ataque de Galaxia.

Sin saber que no fue precisamente del ataque de ella del que había escapado.

"¡¡¡Kaze no Kisu!!!"

El ataque de viento golpeo brutalmente los Kagemusha destruyéndolos por completo. La bola de energía impacto el lugar momentos después pero ya no había nada que pudiera destruir.

Ranma y Galaxia se voltearon para ver de donde había venido ese ataque y vieron a un tipo de cabello blanco y ropas rojas que portaba una gran espada, el cual era seguido por una chica en un uniforme de colegiala, un niño con sola de zorro, una chica cargando un gigantesco boomerang, un monje y lo que parecía ser un tigre dientes de sable de dos colas, este ultimo hizo que Ranma retrocediera un poco y volteara la vista, negando con su mente que él había visto esa cosa.

"¡¿Se puede saber quien demonios son ustedes?!" Pregunto el sujeto de la gran espada.

Sailor Galaxia no le respondió. "Parece que los bárbaros de esta era son bastante entrometidos, ¿No lo crees cariño?"

Ranma no dijo nada ya que todavía estaba demasiado ocupado lidiando con lo que había visto. Él ya estaba agradeciendo antes el no haberse convertido en chica por varias horas solo para encontrarse con esa... bestia del demonio.

"¡¿A quien le dices bárbaros?!" Dijo con enojo la chica del traje de escuela.

"A ustedes por supuesto." Exclamo Galaxia con altanería.

"Como puedes hablarnos así después que te ayudamos." Dijo la chica del enorme Boomerang.

"No recuerdo que lo hayamos pedido ¿No es así cariño?"

"Bueno, ehh..." Ranma no sabía que decir ya que había estado ignorando por completo la conversación, por ahora él había convencido mas o menos a su mente que esa cosa en forma de ga-ga... de ese animal, no era tal cosa ya que esa cosa tenia tres colas y volaba.

"Oye porque no nos miras ¿Qué es lo que te pasa?" Pregunto el chico del traje rojo.

"Disculpa ¿Esa-esa cosa de los dientes grandes es una especie de gato?" Pregunto un aun asustado Ranma.

"Bueno, para tu información esa cosa tiene nombre, es Kirara." Dijo bastante enojada la chica del traje de escuela aunque estaba confundida por la extraña reacción de ese chico y por la extraña sensación de que lo conocía. "Y técnicamente es un Youkai pero no te preocupes es una buena amiga."

'¿Un youkai?' Pensó un aliviado Ranma 'Bueno, no sé que sea eso exactamente pero mientras no sea un gato, creo que puedo evitar pensar en su parecido.'

"¡Oye ya deja de responder sus preguntas!" Exclamo el sujeto del traje rojo. "¡Ellos pueden estar trabajando para Naraku o ser los causantes de todo esto o incluso ambos!"

"¿La poderosa Sailor Galaxia y su eterno amante trabajando para alguien? Pero que estupideces dicen estos bárbaros." Galaxia replico con su altanera voz, ignorando el hecho de que en este momento técnicamente SI estaban trabajando para alguien. "Deberíamos castigarlos severamente por ello, amado mío."

"Calmate Galaxia." Ranma trato de calmarla, por lo general no era alguien que evitaba las peleas, pero ahora él sabia que no había tiempo para ello, él miro al grupo de extraños y los saludo. "Mi nombre es Ranma Saotome y ella es Sailor Galaxia, perdón por todo esto."

"Bueno, hasta que por fin empiezan a actuar civilizadamente." Dijo la chica del uniforme de escuela. "Bueno, mi nombre es Kagome, el de la gran espada es Inuyasha, la del gran boomerang es Sango, el es el monje Miroku, el pequeño Shippo, y ya te presente a Kirara."

Shippo dio un paso adelante y miro a Ranma con detenimiento. "Oye, me pareces conocido ¿No te hemos visto en otra parte?"

"No lo creo." Contesto Ranma.

"¡Ya déjense de preguntas tontas y presentaciones!" Dijo un enojado Inuyasha. "Quiero saber que rayos es esa cosa gigante ¿Acaso son ustedes los culpables de todas las cosas raras que están pasando?"

"No lo somos," contesto Ranma un poco molesto por al actitud de Inuyasha. "Nosotros estamos aquí para ayudar, estas maquinas bueno... no se que son exactamente, pero van a servir para salvarnos de... uhm lo que sea que este pasando, bueno eso creo."

Todo el grupo dio a Ranma una mirada de confusión, después de unos momentos, Kagome fue la primera en preguntar. "Disculpa, ¿Pero podrías explicarnos eso otra vez? Mas claramente"

Ranma suspiro, esto iba a tardar más de lo que pensaba. "Bueno, para empezar, se que esto será difícil de creer pero... nosotros somos del futuro."

Ranma esperaba ver una gran reacción de su parte, pero extrañamente no la hubo, es mas no parecían sorprendidos en lo absoluto.

"Ya me lo imaginaba." Dijo Kagome mientras miraba la estructura. "Este tipo de cosas no pertenece a esta época ¿Cómo es que ustedes han llegado aquí? No me digan que usaron un pozo mágico."

Ranma alzo una ceja, ciertamente estas personas del pasado no se sorprendían con facilidad.

"Bueno como que es una larga historia." Dijo él mientras se rascaba su nuca.

"Pues creo que es mejor que empiezas a contarla entonces." Le replico Shippo. "Somos expertos en largas historias."

"Creo que vas a tener que esperar Inuyasha." Dijo Kagome mientras apuntaba a otro lado con su mano. "Esas cosas de antes han vuelto."

Todos voltearon la cabeza para ver como las Sombras se dirigían hacia ellos nuevamente.

"Hagan lo que hagan no los toquen con su cuerpo." Les advirtió Ranma. "Esas cosas pueden matar con solo un toque."

"Gracias por la advertencia." Contesto el monje Miroku.

"Como si la necesitáramos." Refunfuño Inuyasha mientras se preparaba para atacar nuevamente.

Cerca de ahí, ocultando su presencia del mundo, envuelto en su traje de babuino, se encontraba el temible Naraku, él escuchaba con atención el relato de los extraños y la lucha que estaba ocurriendo, ciertamente cosas extrañas estaban pasando que sobrepasaban su entendimiento y él quería estar lo mas informado posible para planear su próximo movimiento.

\\\* * *///

Universo C
Año 730 D.C.

Puu-chan ya había informado a Taikoubou y a los demás sobre la muerte de Tenka, todos lamentaban su perdida pero sabían que no podían honrarlo por ahora ya que todavía tenían que detener esta nueva amenaza. Taikoubou decidió ir con Puu-chan la montaña Kung-lun para obtener más información y posiblemente traer mas aliados.

Mientras tanto, el resto de los guerreros que habían llegado a su mundo se encontraban en guardia esperando el próximo ataque, claro que ese 'ataque' no solo se refería a los Kagemusha.

"¿Que es lo que tanto miras Schneider?" Pregunto un irritado Caballero Dragón al ver la forma extraña en que lo veía el hechicero oscuro.

"Nada mocosos," Se mofo el hechicero guerrero. "Es solo que por fin me acuerdo de donde me pareces familiar, ya había visto esa armadura que usas antes."

"Bueno supongo que es posible," Replico Shiryu. "Mi armadura ha existido desde los tiempos de la mitología, no me sorprende que alguien de la edad media como tú sepa de ella."

"¿Edad media? Creo que estas equivocado, niño." Dark Schneider le mostró una cruel sonrisa. "Esa era una de las Eras que existió antes de la gran destrucción. Yo viví en el año 534 después de la primera resurrección de la diosa Anthratrax."

"¿Gran destrucción? ¿Anthratrax?" Repitió Shiryu, algo confundido. "¡De que estas hablando, nunca antes he escuchado de semejante diosa antes!"

"No me sorprende." Le respondió el Hechicero, su voz tranquila y despreocupada. "Nunca nadie lo hizo hasta que ella resucito, aparentemente había sido vencida hace milenios y puesta bajo un poderoso sello por otros dioses."

"¿Y que paso?" Pregunto Shiryu con curiosidad.

"Bueno, nadie lo sabe exactamente, pero se dice que hubo una guerra entre los dioses y unos guerreros al servicio de otra diosa, ellos mataron varios dioses debilitaron el sello y el resto... bueno digamos que es pura destrucción."

"¿Y que tiene que ver con mi armadura?" Shiryu de alguna manera sintió que no le iba gustar la respuesta.

"Bueno, según se, esa armadura tuya le perteneció a uno de esos bobos que derroto a los dioses en nombre de su diosa Atina." Le respondió Dark Schneider como sin no le importara por que le preguntaba eso.

"¡Atena!" Le corrigió el caballero Dragon con una voz molesta.

"Como sea." Le contesto Dark Schneider mientras se encogía de hombros. "No sabrás algo al respecto ¿O si?"

"¡No puedo creer nada de eso!" Shiryu se puso bastante furiosos y se alejo del lugar dejando a un sonriente Dark Schneider parado ahí.

"¡¿Porque le dijo todo eso?!" Le pregunto Zero al Hechicero oscuro tras ver la reacción de su compañero.

"Por nada." Le contesto él. "Solo me preguntaba cual seria su reacción. Oye, ya vi que tienes una nuevo cuerpo ¿que dices si lo estrenamos?"

"Eres un bastardo." Le contesto ella mientras se dirigía donde Shiryu se encontraba.

"Así me dicen muchos." Exclamo Dark Schenieder mientras lanzaba una de sus notorias carcajadas.

Zero vio después al caballero apoyado sobre una roca, bastante pensativo y algo cabizbajo. "No dejes que el te moleste, es solo un patán que no sabe de lo que esta hablando, puede que hasta no sea cierto lo que dijo."

"Lo es, estoy seguro de que no me mintió." Le contesto Shiryu. "Pero no es que me molesta las cosas lo que dijo, es solo que me conmociono bastante el futuro que me mostró y me hizo preguntarme si servirá algo lo que hacemos, que tal si salvamos mi mundo solo para que el día de mañana sea destruido."

"Bueno, primero que nada ahora que sabes lo que puede pasar, tal vez haya alguna forma que puedas detenerlo." Le replico chica Marioneta. "Y segundo ¿Acaso en verdad crees que no vale pelear por las cosas que quieres tan solo para darles un día mas de vida? O no me digas que eres de aquellos que no hace nada porque cree que lo que hacen no cambio en nada su futuro, yo por mi parte seguiré luchando porque creo en el mañana."

"Eres una chica extraña," Exclamo el caballero dragón y luego le mostró una sonrisa. "Pero dices algunas cosas sabias."

"Es este nuevo cuerpo, no te acostumbres mucho." Le contesto ella también con una sonrisa.

El momento entre los dos se perdió cuando escucharon la voz de Joker.

"Prepárense, mas de esas sombras se aproximan." Les advirtió su compañero

Ambos asintieron y rápidamente se dirigieron con el resto de los guerreros, sus dudas quedaron a un lado cuando llegaba el momento de proteger lo que amaban.

\\\* * *///

Universo Alfa
Ciudad de Tokio.

Mientras las estruendosas nubes rojas asolaban los cielos de la capital de Japón, sus eternos defensores cruzaban sus calles en dirección hacia la extraña estructura que se alzaba cerca, hasta que finalmente llegaron a su base.

"¿Que es esto?" pregunto Yuusuke.

"A quien le importa, lo mas probable es que sea lo que esta causando toda esta destrucción." Dijo Hiei. "Digo que la destruyamos de una vez por todas."

"No nos apresuremos." Exclamo Kurama. "Aun no sabemos nada todavía."

"Ojala, Sailor Mercury estuviera aquí." Dijo Sailor Moon. "Ella de seguro sabría que es lo que es."

"Yo estoy de acuerdo, con el enano de tres ojos, destruyamos esa cosa de una vez." Replico Sailor Uranus mientras se ponía en posición de ataque. "¡Earth Shaking!"

Todos observaban como el poderoso ataque de la Sailor se dirigió directamente hacia la Torre, ya estuvo a punto de impactarla cuando de la nada, un muro de papel se alzo entre este y su blanco. El impacto fue estruendoso y cuando todo termino, todos podían ver como pequeños pedazos de papel quemándose caían al suelo.

"¿Pero que paso?" Pregunto Yuusuke.

"Por favor." Dijo una voz. "No hagas eso, es de mala educación dañar las cosas que le pertenecen a otras personas."

Todos voltearon para ver a cuatro chicas paradas a un lado de la estructura, una chica de largo rubio, otra de cabello negro algo despeinado con una apariencia algo masculina, la tercera de cabello largo negro, usaba gafas y llevaba un gran abrigo café, y la última tenía el aspecto de una niña de doce años y su cabello era de color rosado.

"¿Quienes son?" Pregunto Sailor Moon.

"No lo sé." Replico Sailor Neptuno. "Pero apostaría que son las que están involucradas en lo que esta causando todos estos problemas."

"Pues perderías." Dijo la pequeña. "Yo mas bien diría que somos parte de la solución."

"Como si fuéramos a creerles." Dijo Sailor Uranus que ya parecía lista para atacarlas en cualquier momento.

Sailor Moon vio que sus amigas estaban a punto de lanzarse a pelear y rápidamente se puso en medio de ambos bandos. Ella ya había estado en muchas batallas sin sentido antes que hubieran podido enviarse con simplemente hablar, ella ciertamente esperaba que esta fuera una de ellas.

"¿Acaso son ustedes las que están causando toda esta destrucción?" Les pregunto Sailor Mars.

"Somos del equipo de los buenos." Dijo la chica de cabello rubio. "Un guapo joven nos pidió que cuidáramos de su maquina para poder salvar a la Tierra y decidimos acceder, él es bastante convincente."

"¿En serio?" Dijo Sailor Moon con asombro.

"¿Y como esperan que les creamos?" Pregunto Kuwabara con una cara bastante seria. "Que pruebas tienes de que están diciendo la verdad."

"No tenemos ninguna." Respondió la chica de gafas. "Solo podemos ofrecerles nuestra palabra."

"Me temo que eso no será suficiente." Respondió Sailor Pluto. "El mundo esta llegando a su fin por un fenómeno que nadie comprende y su extraña maquina apareció de la nada, díganme ¿Qué harían ustedes en nuestra posición?"

Hubo un momento de tensión entre ambos grupos por las palabras de la Sailor.

Todo se podía perder si se decían las palabras equivocadas.

La pelea era casi inminente.

"Creeríamos todo lo que nos dijeran y tomaríamos té y galleta juntas." Dijo con una amplia sonrisa la chica de cabello rubio.

La mitad del grupo se fue de espaldas al escuchar la respuesta de la chica.

Kurama les mostró una sonrisa. "Por lo visto son unas chicas bastante especiales, me presentare mi nombre es Kurama, estos son mi amigos Hiei, Kuwabara, Yukina."

"Mi nombre es Sailor Moon." Exclamo la Sailor de cabello rubio atado en trenzas. "Mis amigas son Sailor Júpiter, Sailor Uranus, Sailor Neptuno y Sailor Pluto."

"Saludos." Dijo Sakura, que había llegado poco después que los demás, ya se había recuperado y le había dicho a Yue que la llevara de vuelta con todos, al principio el se había rehusado, pero la terquedad de Sakura fue mas fuerte, ella rápidamente se pudo al tanto de la situación, y también presento al resto que estaba con ella. "Ellos son Shaoran, Yue y Kerbero aunque de cariño le decimos Kero."

"No tenías que mencionar eso Sakura." Le hablo el gato alado.

"Mucho gusto." Saludo con respeto la chica de gafas. "Mi nombre es Yomiko Readman, ellas son Michelle, Maggie y Anita-chan."

"¡Princesa!" Exclamo Uranus. "No creo que sea prudente confiar en esas personas"

"Por Favor Sailor Uranus." Le pidió ella. "En verdad no creo que ellas estén aquí para hacernos daño."

"Creo que tiene razón." Dijo Yuusuke. "No siento ninguna energía maligna de ninguna de ellas, aunque si un poco de rabia de esa pequeña."

"¡¿A quien llamas pequeña?!" Grito Anita.

"Calmate Anita." Dijo Michelle mientras les mostraba su sonrisa a los demás. "Muchas gracias por su confianza."

"Aun no se la hemos dado." Dijo Hiei mientras mostraba su espada a ellas. "Quiero que me expliquen que rayos es esa cosa, y que rayos le esta pasando a nuestro mundo."

La mirada de Yomiko se puso triste y cabizbaja mientras le contestaba. "Está muriendo."

"¡¿Qué?!" Fue la respuesta general de los presentes.

"¿Que quieres decir con eso?" Pregunto Sailor Moon.

"Por lo que nos dijeron." Respondió Michelle. "Un poderoso enemigo esta atacando nuestros universos en el pasado, presente y futuro."

"¿Nuestros universos?" Pregunto Sailor Pluto. "Estaba al tanto de que este fenómeno se presentaba en otras eras, ¿Pero ahora dices que otros universos están siendo devorados también?"

Yomiko asintió. "Nosotras mismos no somos de este universo, fuimos reclutadas por un poderoso ser para proteger esta maquina que es la única esperanza de nuestros mundos, por lo que nos informo muchos otros guerreros fueron reclutados para proteger esta torres en diferentes tiempos."

"¿Otros guerreros?" Pregunto Sailor Moon, que aun estaba tratando de comprender la idea de 'otros universos'. "Entonces, es posible que Sailor Mercury y Sailor Venus estén en otros tiempos protegiendo una de estas cosas."

"No lo sabemos," Contesto Michelle. "Nosotras fuimos las ultimas reclutadas y no podría con certeza decir si sus amigas están peleando en otra Tierra."

"Estoy segura que si." Exclamo Sailor Moon. "Donde sea que estén Mercury y Venus de seguro están luchando para protegernos a todos nosotros."

"No hables con tanta confianza con ellos." Dijo Sailor Uranus. "Aun tengo mucho que preguntarles."

"Creo que no es el momento para eso." Exclamo Sakura. "¡Miren, por allá!"

Todos se dieron la vuelta y vieron como un grupo de lo que parecía ser sombras vivientes venían hacia ellos volando por el aire.

"¿Esos tipos vienen con ustedes?" Pregunto Yuusuke.

"En lo absoluto." Dijo Yomiko. "Me dijeron que se llaman Kagemusha, ellos sirven al culpable de toda esta destrucción, tengan cuidado por favor, pueden matar con solo con tocarlos."

"Bien, por fin aparece alguien a quien puedo castigar por todo estos problemas" Exclamo Hiei mientras sacaba su espada y se ponía en posición de combate.

Los demás que estaban con el pensaban justamente lo mismo y alistaron rápido sus ataques, algunos eran ya veteranos en el combate, otros recién empezaban en su carrera de héroes o heroínas, pero todos sabían bien que la derrota no era una opción, y esperaban que quien quiera que haya creado esa Torre supiera bien lo que hacia.

\\\* * *///

Universo C
El Presente
Academia Fuuka

Una vez mas las doce Himes se habían reunido, habían pasado seis meses desde su gran batalla contra Lord Obsidian. En estos meses de paz y tranquilidad, ellas realmente creyeron que no tendrían que volver a pelear de nuevo, pero obviamente el destino tenia otros planes. Ahora en el despacho de director se encontraban, Mai, Natsuki, Mikoto, Akira, Shiho, Yukino, Nao, Yukariko, Shizuru, Midori y Akane, todas esperando que llegara la directora de la Academia.

Natsuki, una chica de largo cabello azul ya se había cansado de esperar y decidió tomar la palabra. "Supongo que todas saben por que estamos aquí."

Todas asintieron a la vez y cada una de ellas levantaba una manga u otra parte de sus ropas para mostrar una marca de forma en forma de medio circulo en diferentes partes de sus cuerpos.

"Yo me estaba bañando cuando note que había aparecido de nuevo." Dijo Nao, la chica de cabello rojo escarlata. "¿Qué rayos esta pasando? Pensé que no tendríamos que luchar de nuevo."

"Todos lo creímos así." Dijo Natsuki. "Pero con solo ver lo que esta pasando con el clima y el color del cielo, parece que tendremos que hacerlo de nuevo."

"Yo no puedo creer que todo esto este ocurriendo." Mai exclamo. "Yo no pienso participar en ese 'Festival' de nuevo, fue algo muy doloroso para todas nosotras."

Todas asintieron, todavía recordando lo que pasaron cuando creyeron que habían perdido a sus seres mas queridos por culpas de las manipulaciones de Lord Obsidian y de Nagi.

"¡Mira Mai!" Mikoto hablo con gran sorpresa en su voz. "Miroku ha vuelto."

Todas las chicas vieron con asombros como la pequeña niña ahora blandía una gran espada negra y la movía de un lado a otro como si no pesara absolutamente nada.

Ellas se miraron entre si y cada una empezó a llamar a sus 'Elements' todas pudieron hacerlo con la misma facilidad que antes.

"No puedo creer esto." Exclamo Mai, al ver que sus brazaletes de fuego habían regresado.

"Pues créelo, Mai Hime." Dijo una voz detrás de las chicas.

Todas se dieron la vuelta y vieron a un chico de cabello blanco, que lucia de unos diez años, apoyado en la ventana.

"¡Nagi!" Grito Natsuki mientras apuntaba una de sus armas a él. "¿Acaso eres tu el responsable de esto?"

"En cierto modo." Replico el chico. "Alguien me pidió el favor que le ayudara a que recuperaran sus poderes, fue algo complicado pero funciono, también pueden llamar a sus 'Childs' si así lo quieren."

"¡¿Quién fue?" Inquirió Natsumi mientras continuaba apuntándole.

"Yo fui."

Las chicas se dieron la vuelta y vieron a la directora Fumi empujando a una niña en silla de ruedas que ellas rápidamente reconocieron."

"¡Directora Mashiro!" Exclamo Mai. "Pero pensábamos que usted estaba..."

"Muerta." Replico ella. "No exactamente, solo digamos que solamente ya no estaba mas en este mundo."

"¿Pero porque?" Pregunto Yukino. "¿Por qué tenemos nuestros poderes de vuelta?"

"Supongo que se han dado cuenta de la situación en el mundo." Contesto ella.

Todas asintieron.

"Según las noticias, dicen que es el fin del mundo." Dijo Nao.

"Exactamente." Dijo Nagi con una sonrisa.

Un gran escalofrió corrió por el cuerpo de las Himes al escuchar estas palabras, y pusieron sus miradas sobre Mashiro para confirmar esto.

"Este mundo esta en grave peligro." Exclamo ella. "El poder de las Himes y sus 'Childs' es necesitado de nuevo."

"¡Estas diciendo que volvamos a poner a nuestros seres queridos en peligro!" Exclamo Mai. "¡No sabes lo mucho que sufrimos por esas estupidas batallas!"

"Conozco ese sufrimiento mas de lo que crees Mai Tokiha." Le replico la chica de cabello plateado. "Pero si no luchan, este mundo será mandado al olvido."

"Entonces, simplemente no tenemos opción." Replico Midori que había estado callada hasta ahora, una sonrisa apareció en sus labios. "Si en verdad tanto nos necesitan, yo peleare, pero no se preocupen por mi, no tengo ninguna intención de perder."

Todas estaban muy asombradas por las palabras de Midori y una a una comenzaron a asentir.

"¿Estas de acuerdo con esto, Shizuru?" Le pregunto Natsuki, sabiendo lo que pasaría si ambas perdían.

"No te preocupes por mi." Le contesto ella, mientras la tomaba del brazo muy afectivamente. "Soy mas que capaz de cuidar de ambas."

"No otra vez." Sollozo Natsuki mientras trataba de liberarse del agarre de Shizuru.

Mai también asintió, aunque ciertamente era una de las más dolidas en hacerlo. "Lo haré, pero quiero que esta sea la última vez que nos pides esto."

Mahiro la miro con una mirada melancólica. "Tienes mi palabra, yo no hubiera pedido esto si tuviera la certeza de que por lo menos habrá un mañana. Para este mundo."

"Bien esta decidido entonces." Dijo Midori, tratando de alzar el animó de todas. "El Hime Sentai se ha formado de nuevo, en su versión mas poderosa hasta ahora y conmigo como su líder."

"Oye, quien te puso como líder." Reclamo Natsuki. "Yo tengo mas experiencia en combate, yo debería ser la líder."

"No seas tonta." Le explico ella. "Todas saben que yo soy la líder, tengo mas edad y soy mas sabia que tu, a pesar de que tengo solo 17 años."

"¿17? Si como no." Replico Natsuki con sarcasmo. "Si es por edad, entonces que sea la profesora Yukariko, ella incluso ya esta casada."

"O no, yo no podría." Replico la ex-monja, al ver como la metían en su discusión.

"De que están hablando ustedes." Exclamo Mikoto con una mirada molesta puesta sombra ambas. "Es obvio para todos que Mai es nuestra líder, no hay discusión."

Todas las miradas se pusieron sobre Mai, que empezó a sudar al ver cual era su intención.

"Oigan." Contesto Mai nerviosamente. "Lo de quien es la líder no tiene importancia, no podemos simplemente luchar juntas como antes, apoyándonos mutuamente."

Todas las Himes se miraron entre ellas.

"¡Yo seré la líder!"

"¡Yo!"

"¡No, yo!"

"¡Yo!"

Nagi sonreía al ver esto y luego desapareció por la ventana, era momento de sus planes, aun sin Lord Obsidian, el seguía siendo el mismo manipulador de siempre, si hay alguien que podía sobrevivir a esta amenaza, ciertamente era él, de una u otra forma siempre hallaba la manera.

\\\* * *///

Universo Alfa
Un Futuro Distante, año 3009
Cristal Millenium

La antimateria hacia pedazos cada ciudad del mundo de una manera nunca antes vista por nadie en el universo, la Neo-Reina Serenity emitió la orden de evacuación de cada ciudad. Los pobres ciudadanos huían despavoridos de la nube de antimateria hacia la ciudad de Tokio de Cristal que por ahora no estaba sufriendo su furia, esperando que su Neo-Reina logre salvarlos, debido al pánico en las calles las Sailor Senshi ha sido enviadas para tratar de prevenir en lo posible mas muertes innecesarias.

"Vamos hay que evacuar" Dijo Sailor Mercury mientras ayudaba a una mujer con sus cosas. "No hay tiempo para estas cosas, necesitamos irnos rápidamente.

La mujer finalmente asintió cosas y se unió al grupo dejando todas sus cosas en el suelo como cientos de miles más.

"¿Esta todo listo en Paris?" Sailor Chibi moon por su comunicador.

"Aun no," Respondió Sailor Mecury. "Aun no hemos evacuado a toda la gente del lado este pero creo que vamos a lograr que todos salgan a tiempo ¿Cuál es al situación en Londres?"

"Aquí en Londres la evacuación ya se completo." Contesto la princesa. "Hace poco hable con Sailor Jupiter y dijo que Ciudad de México también esta evacuada."

"Bien." Replico la Sailor del agua. "Tienes que apurarte, las tormentas y los terremotos se están incrementado a cada momento, Londres será la próxima ciudad que este fenómeno destruirá."

"Lo comprendo, no te preocupes ya me habré ido cuando esa cosa llegue aquí." Contesto la Senshi en entrenamiento, mientras miraba a su alrededor y veía como caían los rayos sobre los edificios destruyéndolos por completo. Tal vista la impresiono bastante, pero no tanto como el ver como los escombros estaban cayendo justo sobre una mujer que aun cargaba a su hijo e sus brazos.

Sin pensarlo dos veces ella apunto su mano al cielo y pronuncio el hechizo que recién le había enseñado. "¡Pink Starlight Revolution!"

Su ataque de luz rosada cubrió por completo los peligrosos escombros convirtiéndolo en una inofensiva nube de polvo que se esparció por el aire con rapidez.

"¡Vamos, por aquí!" Grito la princesa. "Siga este camino y la llevara a la nave, yo iré enseguida."

Viendo como la mujer se alejaba, ella saco el mini detector que le había dado Sailor Mercury y rápidamente escaneo la ciudad para confirmar que no hubiera ningún otro rezagado, se angustio al ver como la ciudad estaba empezando a ser devorada por el fenómeno, pero después de ver que no había nadie mas, ella se dispuso a ir a la nave.

El terremoto que sucedió en ese momento la tomo completamente por sorpresa, era mucho más fuerte que los anteriores, unos aterradores grito hicieron que levantara su mirada y vio con horror como la nave a la que había mandado a la mujer y a su hijo era destruida por unos edificios que cayeron sobre ella, fue tanto su shock que ella no se dio cuenta del peligro en el que ella misma se encontraba hasta que fue demasiado tarde. Ella simplemente nunca vio venir ese edificio, cuando el polvo se disipo, ella yacía inconsciente en los escombros con la nube de antimateria.

"Pequeña dama responde"

"¿Pequeña dama?"

"¿Pequeña dama?"

"¿Princesa?"

Sailor Chibi-Moon nunca fue capaz de responder el llamado de Sailor Mercury mientras su cuerpo era consumido por la antimateria, una de las pocas afortunadas que pudo morir sin dolor.

\\\* * *///

Universo Gamma
El Presente

Mientras la gente corría espantada por las calles huyendo de la imparable nube de Antimateria, nadie noto a dos extraños seres materializarse en el medio del parque. Paria una vez mas se encontraba en otra tierra moribunda, sin embargo esta vez ella no llegaba sola. Junto con ella se encontraba el último superviviente de otro universo, un ser llamado Mew-two.

Esta no era la primera vez que Paria salvaba a alguien así, ya lo había echo varias veces en el pasado, ella los cubría con su capa en los últimos momentos y ambos eran transportados a otro mundo moribundo. Sin embargo nunca había resultado ser algo bueno, las personas que rescataba nunca estaban agradecidas, más bien la culpaban por no haberlas dejado morir con sus seres queridos solo para hacerlas morir en otro lugar completamente diferente y nunca dejaban que las llevara a otra parte de nuevo.

¿Por qué todavía lo hacia?

Ella aun no estaba segura de la razón, pero alguna parte de su mente la hacia creer que había algún tipo de plan en alguna parte para detener la Antimateria y que de alguna manera era su deber salvar por lo menos algo, aunque se haya perdido ya tanto.

Ella observaba al Pokemon inconsciente en el piso, Paria sabia que cuando despertara, ese ser la insultaría, la amenazaría, la atacaría y luego se alejaría de ella, como todos los demás antes con los que el lo habían hecho, y probablemente muchos mas lo harían, aunque no sabia cuantos aun quedaban intactos o que pasaría cuando la antimateria los consumiera a todos, después de ver esa imagen en el mundo anterior le aterraba el solo pensar lo que pasaría ¿Terminaría por fin su cruel castigo? ¿Acaso merecía terminar?

Esas eran preguntas que ella se había hecho miles de veces sin encontrar respuesta alguna, solo más y más tristeza.

"¿Esta usted bien señorita?" Pregunto una voz juvenil.

"¿Eh?" Paria se dio la vuelta y vio que se trataba de un grupo de jovencitas, todas ellas en traje de escuela, y con la sola excepción de una, todas parecían de quince y dieciséis años.

"¿Creo que algo le pasa a su gato?" Dijo una de las chicas.

"No es un gato, Osaka-chan" Dijo la chica de gafas.

"¿Entonces que es Yumi?" Pregunto la chica llamada Osaka.

"Bueno, parece un canguro rasurado si me lo preguntan." Exclamo la chica con la piel mas bronceada.

"Pero mira el color de su piel, Kagura ¿Que tal si es un extraterrestre?" Dijo Una chica de cabello negro.

"Solo a ti se te ocurren esas cosas Tomo." Respondió la chica llamada Yumi. "¿Que sigue, dirás que es un experimento de laboratorio que salio mal y que tiene grandes poderes psíquicos?"

"Ya eres tu quien esta diciendo tonterías," Dijo Tomo. "Bueno si no es un extraterrestre, el es obviamente un mutante que vino a chuparnos el cerebro a todas nosotras y luego dejar un huevo en nuestros cadáveres, que al nacer se alimentaran de nuestros cuerpo para luego continuar su mortal ciclo hasta acabar con toda vida en el planeta."

Eso puso el cabello de punta a todas las demás.

"No creo que eso sea verdad." Dijo Yumi. "Tu estas exagerando como siempre."

"Tal vez sea el papa de Chiyo-chan" Dijo Osaka.

"¡¡¡Mi papa no luce así!!!" Grito la pequeñita.

Paria casi sin darse cuenta esbozo una sonrisa, su primera en mucho tiempo, y de pronto ella lo recordó, la razón por lo que seguía intentando detener esta aniquilación, para que la memoria de estas y de otras miles de personas que conoció en su exilio nunca se pierda. El ardor que crecía en su cuerpo le indicaba a ella una vez más que tenía que irse.

"Por favor cuiden de el." Les pidió ella mientras daba una última mirada a Mew-Two para luego desaparecer de ese mundo, la muerte todavía la reclamaba con su cruel penitencia.

Todas las chicas vieron con asombro como la chica desaparecía en frente de ellas mientras les daba una sonrisa melancólica.

"Vaya," Dijo Yumi después de un largo silencio. "Ella definitivamente era una extraterrestre."

"¡Que va!" Exclamo Tomo. "Era de otra dimensión."

"Extraterrestre."

"De otra dimensión"

"¡Extraterrestre!"

"¡De otra dimensión!"

"Ya dejen eso." Dijo Chiyo. "Tenemos que pensar que vamos a hacer ahora ¿Tu que piensas Sakaki-chan?"

"Supongo que ayudar a ese... Extraterrestre de otra dimensión." Dijo Sakaki esperando así no molestar a ninguna de las dos chicas.

"¿Pero no será peligroso?" Pregunto Yumi.

"Oh no, discutamos eso después, creo que hay vienen mas problemas chicas." Dijo Kagura. "Allá viene esa loca de la Brigada S.O.S. Esa tal Suzumiya Haruhi."

"Eso si es tener mala suerte" Dijo Chiyo en una aptitud bastante atípica de ella.

"Porque actúan así, yo creo que es una buena persona." Exclamo Tomo.

"Que te caiga bien ya es motivo para tener sospechas de ella." Replico Yumi. "Que acaso te olvidas que capturo a Chiyo por todo un día pensando que tenia poderes psíquicos."

"¡Me tuvo encerrada en una jaula hasta que le probara que no era verdad!" Chiyo parecía estar a punto de llorar. "Si no fuera por ese chico llamado Kyon aun estaría ahí."

"Rápido, cúbranlo rápido, que no lo vean, quien sabe lo que puede hacerle esa chica." Dijo Sakaki, bastante preocupada por el bienestar de la criatura.

Las demás chicas asintieron y rápidamente cubrieron a la criatura con periódicos y pedazos de cartón que se encontraban cerca, y esperaban que esa chica solamente pasar a de largo. No tuvieron tanta suerte.

"Oigan ustedes, ¿De casualidad no han encontrado a ningún extraterrestre, psíquico, o un ser venido del futuro por aquí?" Pregunta la chica de cabello castaño que conocían como Suzumiya Haruhi, a su lado se encontraba un chico de cabello negro de aspecto común, otro rubio con un aspecto bishonen, una chica de pelo corto azul con gafas, y otra de pelo largo y rosado.

"No, no hemos visto nada" Dijo Yumi.

"A decir verdad hubo una persona rara apareció de la nada hace unos momentos, fue muy asombroso porque simplemente apareció de la nada." Respondió Osaka mientras sus amigas la veían no pudiendo creer lo que acababa de decir.

"¡¿Qué?! ¿De verdad?" Dijo Suzumiya con bastante emoción. "¿Y que paso? ¿Para donde se fue?

Osaka se encogió de hombros. "No sé, simplemente se desvaneció en el aire."

"¡Demonios!!" Grito ella con furia. "Todo esto es tu culpa Kyon, te dije que caminaras mas rápido, nos perdimos un encuentro con un ser del futuro o tal vez un encuentro del tercer tipo, aunque también haya la posibilidad de que haya sido un ser de otra dimensión"

"Pero Suzumiya, con todo lo que esta pasando, el fin del mundo y todo eso, porque te molestas por este incidente." Respondió Kyon, el chico de aspecto común.

"Es que no lo entiendes." Exclamo ella. "Este es un gran acontecimiento, de eso no hay duda, y es un buen momento para encontrar este tipo de cosas, antes de que todo esto acabe y al final de todo terminemos sin ninguna prueba."

Kyon simplemente asintió a la extraña lógica de su amiga.

"Bueno, vamonos, no creo que veamos mas cosas por aquí." Dijo Suzumiya un poco frustrada. "Creo que es medir ir al centro, dice que han visto chicas en trajes de marineritos por ahora, creo que vale la pena investigar."

Antes de que los demás miembros pudieran decir algo al respecto, Haruhi ya se encontraba corriendo por la calle. Dando un suspiro de resignación, Kyon y los demás muy pronto empezaron a seguirla, pero antes de irse Kyo se dio la vuelta y vio el cúmulo dejas y cartón con sospecha, las chicas empezaron a entrar en pánico, pero Kyon solo sonrió y les dio un guiño antes de continuar siguiendo a sus demás compañeros.

"Vaya, eso estuvo cerca." Dijo Chiyo y luego miro a su amiga. "Osaka, eres bastante buena en este tipo de cosas, nunca me lo hubiera imaginado."

"No te preocupes Chiyo-chan, yo protegeré tu secreto." Osaka exclamo. "Nadie sabrá que tienes poderes mentales."

"¡Ya dije que no tengo poderes mentales!" Grito ella, no pudiendo creer lo crédula que era su amiga.

"¿Y ahora que hacemos con el?" Pregunto Kagura

"Llevémoslo a la casa de Chiyo-chan." Dijo Tomo.

"¡¿Porque a la mía?!" Protesto Chiyo.

"Bueno, en primer lugar, por que es la que queda mas cerca y en segundo..." Tomo se detuvo un segundo, su cara en profunda meditación, luego siguió ayudando a sus amigas a cargar a la criatura.

"¡¿Y en segundo?!" Grito Chiyo al verse completamente ignorada.

"¡¿Qué acaso no te convence el primero?! ¡Vaya que eres testaruda, vamos no te quedes ahí y ayúdanos!" Respondió Tomo sin titubeos.

Chiyo bajo la cabeza en resignación, sabiendo que no había vuelta que darle ahora, hoy ciertamente no era su día, dando un suspiro ella corrió para unirse a sus amigas.

\\\* * *///

Universo Antimateria

Tetsuo observaba a través de una pantalla las imágenes de otra Tierra siendo destruida, pero a diferencia de en las otras, esta vez no había gritos de suplica y de terror, la razón era bastante obvia, no había ya nadie vivo en ese planeta, Tetsuo ya había visto este planeta antes cuando Akira estaba haciendo sus investigaciones, y este le comento algo de lo que paso, por lo que sabia, en ese planeta ocurrió una gran guerra mundial que abarco todos los rincones del mundo, y al final ambos lados lanzaron sus mas destructivas armas que acabaron con la vida de todas las personas.

Excepto una.

Bueno, si es que se la puede considerar una persona.

Ahora ella se encontraba en los restos de una colina de lo que alguna vez fue la gran ciudad de Tokio.

Sus ojos se encontraban cerrados, ella estaba sumida en un profundo sueño y era totalmente ignorante de la nueva destrucción que caía sobre su planeta.

"Mírala, tan serena y feliz, ni siquiera sabe lo que le espera." Se mofo Tetsuo. "Aunque todavía no me ha dicho cuales son tus planes con ella exactamente."

"Silencio Tetsuo." Le contesto la figura a su lado. "Me molesta la charla sin sentido, y no tengo que decirte que es lo que planeo hacer, aunque me alegra que me hayas hablado de ella."

Tetsuo lo miro de reojo, 'hablado' no seria el término correcto que él usaría ya que su Maestro tomo esa información directamente de su mente mientras lo estaba entrenando, él apenas y recordaba cuando Akira se lo dijo y no le dio mucha importancia en ese entonces. Su nuevo maestro, sin embargo, se había mostrado bastante interesado en ello.

Tetsuo vio como su nuevo maestro tocaba la pantalla de energía con su mano y de repente la chica que se encontraba ahí desapareció solo para reaparecer momentos mas tarde a un lado de él.

"Interesante." Dijo la oscura figura. "En su mente ahora la joven Chise se encuentra soñando que esta con su novio y que se encuentran estudiando junto a sus amigos, toda la gente que mato esta viva, la gran guerra mundial que arraso su mundo nunca paso, y ella nunca se convirtió en la arma definitiva de destrucción."

"Creo que es momento de despertarla." Dijo Tetsuo con una sonrisa.

"Justo lo que pensaba." Respondió él y aunque o podía verlo, Tetsuo sabia que le sonreía también, él pudo sentir de igual forma el poder mental que uso él sobre la chica.

La joven abrió los ojos de inmediato, casi como si le hubieran echado agua fría encima de su cabeza. "¿Qué? ¿Shuji? ¿Chicas? ¿Dónde estoy?"

"Hola pequeña." La saludo Tetsuo levantando su deforme mano. "Es hora de levantarse."

"¿Quién eres tú?" Pregunto Chise bastante asustada de lo que estaba pasando, todo a su alrededor estaba oscuro y apenas ella podía distinguir a dos personas, si es que así podría llamarlos.

"Su nombre es Tetsuo, mi pequeña niña," Le contesto la gran figura oscura al lado del chico. "Y en cuanto a mi, puedes llamarme tu nuevo Amo."

Chise empezó a temblar mientras aquellas figuras se aproximaban a ella, finalmente su maravilloso sueño había terminado solo para despertar en una cruel pesadilla.

Su aterrador grito se perdió en el mar de sombras que la rodeaba.

\\\* * *///

Universo S
Reino de Seylum
Castillo del Rey Filionel

Lina Inverse ponía sus manos adelante mientras trataba por enésima vez de hacer una de los hechizos de magia negra, pero sin resultado.

"Ya déjalo Lina." Dijo Gourry, el joven caballero de cabello rubio que estaba a su lado. "Has estado intentado hacer ese hechizo por mas de tres horas sin éxito."

"Es cierto." Dijo su amiga, la Princesa Amelia. "Algunos de mis hechizos tampoco funcionan, no hay de que apenarse."

"No me molestes Gourry." Le contesto ella con algo de enojo. "Creo que ya lo tengo."

Gotas de sudor bajaban por la frente de Lina mientras esta veía como una ligera llama verde se formaba entre sus manos, ella ya estaba empezando a sonreír, cuando de repente la llama desapareció quedando solo una ligera nube de humo entre sus dedos.

"¡No puede ser!" Grito ella en frustración. "Porque no me sale ninguno de esos hechizos.

"Oye Lina," Exclamo Gourry. "Acaso no estarás en ese tiempo del mes, tu sabes cuando...ouch"

El puño de Lina impido que el joven caballero dijera otra palabra.

"¡No hables tonterías Gourry!" Grito ella. "Para que lo sepas puedo usar magia, pero por alguna razón muchos de mis hechizos no están funcionando."

"No solo te pesa a ti." Dijo Amelia. "Todos los hechiceros y curanderos del reino tienen los mismos problemas, los únicos hechizos que parecen estar funcionando son los hechizos basados en los demonios y dioses de nuestro universo."

"Ya me di cuenta de ella." Replico ella y luego se sentó en una silla, su rostro mostraba la frustración y preocupación que sentía la cual era compartida por sus amigos. "Es muy probable que tenga que ver con es temblor mágico que sentimos hace poco."

"¿Temblor mágico?" Pregunto Gourry. "¿Qué temblor mágico?"

"Es probable que solo lo hayas sentido como un escalofrió corriendo por tu cuerpo." Dijo Amelia. "Y es normal que no sepas de que se trataba, solo los hechiceros y demás seres que usan magia pueden saber de que se trataba realmente y quien fue el que lo envió."

"¿Y quien fue el que lo envió?"

"¿Que acaso eres tonto?" Dijo Lina con impaciencia. "Te lo dije hace rato. ¡Fue el mismísimo Señor de las Pesadillas!"

"¿En verdad? Vaya y yo que pensaba que tenia que ver con eso de tus joyas volviéndose negras una por una." Comento el caballero.

"De que estas hablando mis amuletos están bi..." Lina se quedo en shock al ver con horror que Gourry tenía razón, los talismanes de sangre en ambas muñecas estaban ahora de color negro, junto con la que estaba en su cinturón. Ella reviso el de su cuello y vio con alivio al ver que aun conservaba su color rojo.

"Los talismanes de Death Fog y el de Chaotic Blue están de color negro, igual como le paso al del Dark Star después de nuestra batalla contra él." Exclamo Lima apenas creyendo lo que ella estaba diciendo con esas palabras.

Los ojos de Amelia se abrieron al darse cuenta de al implicaciones. "Entonces eso significa que...?"

"Death Fog y Chaotic Blue están muertos." Exclamo Lina.

"Pero eso no puede ser Lina" Repico Amelia. "El poder de esos seres es abrumador, ¿Cómo es posible que hayan sido destruidos? Acaso... acaso será posible que el Señor De Las Pesadillas lo haya hecho porque ellos se hubieran revelado contra el"

"No lo creo, solo mira las evidencias." Le contesto ella. "El no hubiera enviado esa advertencia por nada, por mas que suene imposible, algo lo ha asustado."

Lina Inverse estaba temblando, ella nunca temblaba, en el pasado ella había enfrentado cosas que harían temblar al mas valiente de los dioses, visto cosas que ningún mortal hubiera soñado jamás con ver, pero aun así ella no podía evitar sentir un sentimiento de desesperanza, una incapacidad de decir o hacer algo para que sus amigos no pierdan el animo.

"Veo que a ustedes les vendría bien de nuevo algo de ayuda." Exclamo una voz entre las sombras.

Todos se dieron la vuelta un poco sorprendidos por la súbita aparición del extraño, pero su sorpresa rápidamente se convirtió en asombro al ver quien era la figura que salía de las sombras, aunque su aspecto era humanoide su apariencia gris lo hacia ver bastante demoníaco.

"¡Sirius!" Gritaron todos al unísono al reconocer al individuo de otra dimensión que los había ayudado en la batalla contra Dark Star.

"Por fin los encuentro." Dijo él. "Los he estado buscando por todo su mundo."

"¿Pero que haces aquí?" Pregunto Amelia, aunque sabia que estaba relacionado en alguna forma con todo lo que estaba ocurriendo ahora.

Sirius no se anduvo con rodeos. "Mi dimensión ha sido destruida."

Esto causo un shock entre todos, ellos sabían y algunas veces peleado con varios demonios que tenían el poder de destruir mundos enteros en un pestañeo, pero el escuchar que una dimensión completa había sido destruida ciertamente no era algo que siquiera pensaron que fuera posible.

"¿Destruida? ¿Por qué? ¿Por quien?" Pregunto Lina, que ya estaba desesperada por respuestas.

"No lo se" Dijo él, en su cara podían ver su profunda tristeza. "Mi gente se había instalado en un nuevo mundo después que el anterior fuera destruido por Dark Star, pero después empezaron a ocurrir extraños fenómenos atmosféricos, cielos rojos, terremotos, tormentas que salían de la nada, y al final de todo una extraña energía que devoraba todo a su paso, estrellas, mundos no me quedo mas remedio que venir hasta acá nuevamente para intentar escapar, pero veo que aquí esta sucediendo lo mismo."

"Lamento mucho por lo que has pasado Sirius." Le dijo Amelia, sintiendo bastante pena por el y al mismo tiempo un nudo se le hacia en el estomago al ver que ellos también estaban en un muy posible camino a correr la misma suerte.

"Yo también" Dijo Lina.

"Después llorare mi perdida." Dijo el orgulloso guerrero mágico. "Díganme, ¿Ustedes también recibieron el mensaje de Señor de las Pesadillas?

"Así es." Contesto Lina. "Y después de escuchar tu historia, me aterra el pensar que enfrentaremos algo que aterra al mismo Señor de las Pesadillas, si el no puede con ellos ¿Como se supone que lo hagamos nosotros?"

"Ese es exactamente el dilema hermana."

El corazón de Lina de repente le llego a la garganta, súbitamente todo el miedo por lo que estaba pasando había desaparecido de su mente, ahora reemplazado por un terror absoluto, Su mente le gritaba que se echar a correr lo mas rápido que pudiera y nunca mirara atrás, sin embargo podía sentir la voluntad de la recién llegada que la obligaba a darse la vuelta.

"¡¡¡¡¡Luna!!!!!!" Grito Lina mientras trataba de no desmayarse.

"Hola Lina, tanto tiempo." La saludo su hermana.

"¿Esa es tu hermana?" Pregunto Amelia. "Es muy distinta a como me la imaginaba."

"Si." Exclamo Gourry. "Es mucho mas bonita que Lina."

"Ya cállate Gourry." Balbuceo Lina mientras impactaba su codo contra el estomago del caballero, luego reuniendo todas sus fuerzas comenzó a hablarle a su hermana. "¡Luna! Hermanita, ¡Pero que haces tu por aquí?"

"Un conocido de ambos me trajo." Le contesto ella con una sonrisa.

"¡Miren!" Grito Gourry mieras apuntaba con su mano a una de las ventanas del salón real. "¡Es Zellos!"

Todos voltearon la cabeza y vieron con sorpresa a un amigo que ellos creían o esperaban nunca jamás volver a ver.

"Hola a todos," Les saludo el monje. "Veo que tienen un pequeña reunión social, incluso Sirius esta aquí, me da tristeza que no me hayan invitado."

"¡Zellos!" Exclamo Lina, feliz de ver a ese monje errante, si alguien tiene respuestas para lo que esta pasando, ese era Zellos, aunque esa alegría rápidamente se volvió furia al darse cuenta de lo que el había hecho. "¡Oye, que rayos estabas pensando al traer a mi hermana aquí, acaso no sabes lo pelig... el peligro que corre ella por estar aquí."

Lina opto por no decir lo que quería al sentir el aura de su hermana detrás de ella, a veces Lina sabia bien cuando mantener su boca cerrada.

"Lina, se que tu al igual que yo estas muy emocionada de este reencuentro." Luna le hablo en una boca cariñosa mientras ponía su mano sobre su hombro. "Pero me temo que tendremos que dejar eso a un lado por ahora. Creo que sabe que hay asuntos mucho mas importantes ahora, si vamos a detener esta amenaza, necesitare de toda la ayuda que podamos conseguir."

Lina asintió de una manera automática, ya que era algo que hubiera hecho sin importar lo que hubiera dicho su hermana.

"Esa es una de las razón por la que estoy aquí." Exclamo Sirius, captando la atención de todos en el salón. "Antes de irme, recogí ciertas 'cosas' que quizás nos puedan se útiles."

Con un movimiento de su mano, una breve luz pareció en frente de él y cuando todos levantaron su mirad pudieron ver cinco objetos flotando en frente de él, de inmediato Lina y sus amigos se dieron cuenta de quienes se trataba: La lanza Ravdomezehis, el arco Galveria, el tridente Mezard, el hacha Vodiga, la espada Gorn Nova, las cinco armas creadas por Dark Star y que la final sirvieron para su destrucción.

"Adelante, tómenlas." Sirius exclamo con una sonrisa melancólica. "Espero que sean mas útiles aquí que en mi mundo."

Fue Gourry el primero en caminar adelante y rápidamente tomo la Gorn Nova, dándole un abrazo bastante cariñoso. "Mi espada, como te he extrañado espadita, no sabes cuanto sufrí sin ti."

"Esto es genial." Dijo Amelia mientras tomaba también el Mezard. "Con esto ya me siento un poco mas segura."

"Aun no cantes victoria." Le dijo Luna.

"Mi hermana tiene razón." Replico Lina que ahora sostenía a Galveria, ahora ya estaba un poco menos nerviosa por la presencia de su hermana. "Estas armas son poderosas, pero el enemigo que enfrentaremos probablemente no tendrá comparación con aquellos que hemos enfrentado."

Todos sus amigos comprendieron de inmediato las palabras de Lina, las obras de esta nueva amenaza hablaban por si mismas del poder de su enemigo, algo o alguien que ni siquiera el mismo Señor De Las Pesadillas podía detener.

Fue en ese momento que Zellos pregunto algo que todos habían pasado completamente por alto.

"¿Alguien ha visto a Zelgadis?"

\\\* * *///

Universo Gamma
Un Futuro Alterno
Ruinas de la Ciudad de Tokio-3

La tierra temblaba una vez mas en lo que alguna vez fueron los bosques que rodeaban Tokio-3, mientras Asuka, Shinji y los recién llegados se encontraban en la base de la Torre de Akira cuidándola de todo dañó.

"Es increíble." Murmuro Asuka. "Guerreros de otros universos, seres malignos que buscan nuestra destrucción, es increíble..."

"Si, lo sé." Dijo Shinji. "A pesar de todo lo que hemos pasado, a mi también se me hace muy difícil de entender todo esto."

"No es eso, tarado." Le regaño Asuka. "Me estaba refiriendo a ese tipo de la gabardina verde, mira lo que esta comiendo."

Shinji dirigió hacia ese hombre llamado Bolt y vio como este se encontraba comiendo unos restos metálicos que recogía del suelo casi como si fueran dulces.

"Bueno, si, creo... también me parece algo raro."

Goku y Alita no decían nada, ellos habían visto muchas cosas raras en su vida pero incluso ellos también estaban sorprendidos por como él devoraba el metal con tanta facilidad, aunque Alita sospechaba que tenia mucho que ver con su extraña habilidad de sacar armas de su cuerpo.

"Me da asco el solo verlo como los come con tanta serenidad." Comento Asuka. "Si supiera a lo que pertenecían antes esas piezas ni siquiera las tocaría."

"La niña tiene razón, anciano, no podrías apresurarte y acabar de comer de una vez." Dijo una voz.

Todos se miraron entre ellos y luego miraron a Bolt, ellos habían escuchado claramente esa voz y sabían que provenía de él, pero definitivamente no era la voz del mercenario.

"¿Que fue eso?" Pregunto Shinji.

"Un ayudante bocón." Respondió Bolt mientras se paraba y los miro. Los ojos se todos se abrieron aun mas cuando vieron salir de su hombro lo que parecía ser una pala mecánica, un par de linternas en su parte superior hacían el papel de sus ojos, en conjunto todo su aspecto parecía el de una serpiente con cabeza de dinosaurio con dientes y todo.

"Hola a todos mi nombre es Teromea 2.0." Los saludo el extraño ser.

"¡¿Pero que demonios es esa cosa?!" Grito Asuka, un poco temerosa aunque no tanto ya que después de luchar contra extraños seres gigantes llamados Ángeles ya estaba acostumbrada en alguna forma.

"Oye esta cosa tiene nombre y ya te lo dije." Le respondió Teromea 2.0.

"Es solo un molestia que tengo que tengo que soportar." Contesto Bolt. "Un 'regalo' de nuestro benefactor, si así lo prefieres."

"Vaya, es increíble." Comento Goku. "Nunca he visto algo así en toda mi vida."

"¿Es alguna clase de maquina con Inteligencia Artificial?" Pregunto Alita.

"Ja, soy mucho mas que eso, niña robot." Dijo con orgullo Teromea. "Sucede que puedo comer las cosas mas rápido que este inútil de aquí sin importar su tamaño o composición."

"¿Qué tipo de cosas?" Pregunto Shinji un poco nervioso de hablarle a una pala mecánica.

La maquina lo miro de una forma pícara y en frente de todos comenzó a aumentar de tamaño, Shinji retrocedió muy asustado por lo que estaba pasando y observando como ese ser ahora tenia el tamaño y la semejanza de un Tiranosaurio hecho de acero, el cual sin decir palabra devoro en unos instantes los grandes restos que todavía yacían al lado de la Torre.

"Vaya." Dijo Goku. "Eso si es tener hambre."

"Oye Bolt." Dijo la maquina inteligente. "Ya termine de comer, ya puedes sacarlo si quieres."

"¿Que esta diciendo?" Pregunto Alita.

"Bueno," Replico el ser mecánico. "Como ya se habrán dado cuenta nuestro amigo aquí es capaz de comer cualquier cosa y después sacarla intacta de su cuerpo cuando mas le convenga, pero claro siempre y cuando esta sea de metal o energía, ahí es donde entro yo, ya que soy capaz de absorber todo lo que este bueno para nada no puede, lo que incluye obviamente materia organica y.."

¡¡¡BAAMMM!!!

Todos quedaron boquiabiertos al ver como Bolt le volaba a la cabeza a Teromea con un arma que había sacado en una de sus manos.

"Hablas demasiado." Dijo Bolt. "La próxima vez, limítate solo a los hechos."

"¿Acaso lo mataste?" Pregunto Shinji.

"Si solamente fuera tan fácil." Exclamo Bolt. "En un minuto saldrá a molestar de nuevo."

"¿Que fue lo que quiso decir con eso de que 'Ya esta completo'?" Pregunto Asuka.

Bolt junto su manos y todos pudieron ver como el estaba sacando otra cosa por ellas, pero esta vez, no eran armas personales como las anteriores veces, esta vez era algo grande, muy grande. Con un color rojo escarlata, una forma humanoide, cuatro ojos y dos bocas en lo que parecía ser su cara, solo Shinji y Asuka, supieron de inmediato de que ser se trataba.

"¡Pero es imposible!" Dijo Shiji completamente asombrado por lo que veía.

"¿Pero que es esa cosa?" Pregunto Alita, ciertamente parecía un robot gigante con un diseño que jamás había visto.

"Mi Eva... ¡¡¡Es mi Evangelion!!!" Grito Asuka, apenas pudiendo creer las palabras que estaba pronunciando.

"¿Tu que?" Pregunto Goku, bastante intrigado.

"¡Pero creí que había sido destruido completamente!" Exclamo la chica pelirroja.

"Estaba despedazado por todo el lugar, me tomo un poco de tiempo comérmelo todo." Replico Bolt.

"Pero no tiene un cable de energía." Noto con tristeza Asuka. "Y aun si lo tuviera, tampoco hay generadores para darle poder."

"Ya me encargue de eso." Le replico él.

"Porque tomas todo el crédito," La voz de Teromea se escucho mientras salía de nuevo del hombro de Bolt. "Yo fui el que le pudo esa fuente de energía, claro que fue técnicamente Akira quien lo puso en mis sistemas antes de hacer que tu me comieras, claro que también no habrías podido comer ni la cuarta parte de esta cosas en estos momentos."

Asuka decidió ignorar al ser mecánico y se dirigió a Goku. "¡Oiga usted!"

"¿Quien yo?" Replico el confundido Saiyayin mientras se apuntaba con su dedo.

"Si, usted, ¿Puede volar no es así?"

"Así es." Contesto el Saiyayin.

"Quiero que me lleve hasta allá arriba." Dijo ella apuntando hacía el Eva. "Hasta esa parte de donde sobresale ese cilindro blanco."

"Está bien." Contesto él.

"Llevalo también a el." Le dijo Bolt señalando a Shinji.

"¡¡¿Por qué?!!" Exclamaron los dos jóvenes.

"Es necesario que ambos estén adentro." Les contesto el mercenario.

"¡Es inaceptable!" Reclamo Asuka. "¡¿Porque no simplemente le repara su eva?! El tenia uno por si no lo sabias"

Esta vez hablo Teromea. "Bueno, en primer lugar, si lo sabíamos, en segundo, esta en el espacio flotando quien sabe donde, y tercero, ya hemos modificado los sistemas de esa cosa para que los dos puedan pilotearlo."

"¡Grrr!" Asuka ciertamente no estaba feliz en ese momento.

"Ahh casi se me olvidaba." Exclamo de nuevo Teromea.

"¿Qué cosa?" Dijo Asuka con molestia.

"Mejor se apresuran porque ahí vienen esas cosas otra vez, Chao, nos vemos." Le contesto el y luego se metió de nuevo al cuerpo de Bolt.

Todos miraron por todas partes hasta que por fin vieron a los lejos aun centenar de Kagemusha volando hacia ellos.

"¡¿Qué estas esperando?!" Le grito Asuka a Goku. "Súbenos rápido, si va a ver una batalla quiero estar dentro de mi Eva"

Goku asintió y rápidamente tomo a los dos chicos donde habían indicado, una vez ahí ambos jóvenes vieron con sorpresa que sus trajes para pilotear estaba dentro de la cabina.

"No digas nada Shinji." Le dijo Asuka. "Solo date la vuelta y ponte tu traje, ya sabes lo que te pasara si te das la vuelta."

Shinji no tuvo mas remedio que aceptar y se puso su traje, en menos de un minuto ambos chicos estaban sentados en la cabina en básicamente la misma posición que cuando se enfrentaron al sexto ángel en el océano indico.

"Es increíble, esta todo prácticamente igual." Dijo Asuka con una sonrisa mientras encendía los sistemas y se activaba la sincronización. "Prepárate Shinji, ya sabes que tienes que hacer."

"Estar callado y hacer lo que dices, si Asuka me acuerdo." Contesto Shinji, a pesar de sentirse un poco relegado se alegraba de que Asuka haya vuelto a ser la misma aunque después sabia que iba a lamentarlo.

Una vez mas, el Evangelion 02 se ponía de pie y su escudo AT fue desplegado, su altura apenas alcanzaba la mitad de la Torre de Akira, pero sin embargo era una vista para admirar incluso para Goku y Alita que ya habían visto tantas cosas durante su vida.

Sin embargo todos sabían que no era el momento de quedarse parado a admirar, y rápidamente todos comenzaron a prepararse para la inevitable batalla, con Asuka la que más esperaba volver a la acción nuevamente.

\\\* * *///

Satélite Artificial de Akira

"¿Qué? ¿Dónde estoy?"

Paria no sabia que había pasado, ella generalmente aparecía en un lugar abierto de la Tierra desde donde podía ver toda la destrucción que ocurría, esta era la primera vez que ella aparecía en un sitio cerrado. Examinando el lugar, ella vio que estaba en un lugar con tecnología bastante avanzada la cual nunca antes había visto ¿Seria posible que ella haya llegado a un mundo dominado por maquinas? Luego otra cosa llamo su atención, levantando su vista, vio con asombro varias pantallas que mostraban diversas Tierras, las cuales eran devoradas por la Antimateria.

"Al fin llegas, te he estado esperando." Dijo una voz.

Paria se dio vuelta rápidamente, sorprendida por la voz, pero increíblemente no tenia miedo. Ella pudo ver en frente a un hombre de mediana edad, sus facciones era normales aunque pudo detectar que poseía un gran poder. "¿Quien eres?"

"Mi nombre es Akira." Le respondió él. "Te he estado esperando Paria, llegas tarde."

"¿Llego tarde?" Exclamo ella confundida. "¿Es que acaso me estabas esperando?"

El asintió. "Fui yo quien te puso tu maldición, así que he podido seguir tus movimientos fácilmente."

"¡¡¡¿Qué?!!!" La cara de Paria empezó a mostrar una emoción que no había mostrado desde que comenzó su exilio, furia. "¡Por tu culpa es que veo todos esos horrores! ¡Tu fuiste el culpable de toda mi pesadilla!"

"No, fuiste tu." Replico él con algo de frialdad en su voz. "O es que acaso olvidas lo que tu descuido causo."

"Pero... pero..." Paria siempre creyó que podría desahogar toda su rabia contra aquel que la mando al infierno que ahora conocía como vida, pero ahora que estaba afrenta a él lo único que podía hacer era caer de rodillas y llorar. "Tantas muertes, tanta destrucción, porque me hiciste eso, ¿Por qué no me dejaste morir?"

"Era necesario si es que deseaba detener sus planes." Le contesto Akira mientras ponía una mano sobre su hombro.

"¡Debería matarte por lo que hiciste!" Dijo ella mientras apartaba rápidamente su mano lejos de ella.

"Pero ni siquiera lo intentas ¿Verdad? De alguna manera sientes que ha sido un castigo justo para tu crimen." Akira fue hacia un panel de control cercano y empezó a trabajar en el.

"Miserable."

"Tal vez lo soy." Le contesto él. "Pero es mejor que dejes de sentir pena de ti misma ¿Viste el fragmento verdad?"

Los ojos de Paria se abrieron bastante al darse cuenta a que se estaba refiriendo, el solo pensar en eso le provocaba un nudo en la garganta. "Es horrible, que tal cosa exista me parece inconcebible. Dime, por favor dime que sabes como detener sus planes."

"No hay tiempo para eso." Le replico él mientras enfocaba las pantallas en sus Torres. "Mis maquinas ya están en posición, y mis guerreros las defienden cuando llegue el momento justo las activare."

"He visto una de esas antes." Dijo Paria al reconocer una de las gigantes Torres en las pantallas que iban apareciendo delante de ellos, y luego noto como se desarrollaban batallas a los pies de cada una de ellas, no necesitaba pensar mucho para darse cuenta que eran esas sombras las malvadas.

Por un momento ella vio que esos guerreros usando armas tanto primitivas como modernas estaban de algún modo ganando, haciendo retroceder a las sombras con sus poderes, pero luego para su horror vio como las sombras empezaron a juntarse más y más hasta formar una sombra gigante que se abalanzaba nuevamente sobre los guerreros los cuales empezaban a atacarlos con todo lo que tenían.

"¡Akira, ellos fracasaran!" Clamo Paria. "Tienes que sacarlos de ahí, las fuerzas del enemigo son muy poderosas, porque los obligas a hacer eso, ellos morirán irremediablemente si siguen así."

"Deben resistir," Respondió Akira con algo de frialdad en su voz. "El momento de activa mis maquinas aun no ha llegado."

"¡Pero...!"

"Paria, hay mucho mas en juego de lo que-"

Akira se detuvo como si hubiera sentido algo, una pequeña sonrisa asomo sus labios y luego se turno a Paria. "Por favor no intervengas."

"¿Eh?" Paria no podía comprender a Akira.

"¡¡¡MUERE AKIRA!!!"

Antes de que Paria pudiera reaccionar, Akira fue atacado por una extraña luz carmesí, al darse la vuelta ella vio con horror que allí se encontraba el mismo sujeto que trato de matarla en la Tierra hace poco, de su deforme mano salía un poco de humo prueba irrefutable de que él había sido el que disparo, luego el la miro a ella y Paria retrocedió un poco algo temerosa de que pudiera atacarla ahora, pero el solo sonrió y se desvaneció en el aire.

Por un momento, ella se quedo parada allí, sin hacer nada, hasta que por fin pudo salir de su shock y rápidamente fue hacia donde yacía Akira para tratar de ayudarlo.

"¡Akira! ¡¿Estas bien?!"

Paria toco el cuerpo de Akira, pero rápidamente la saco al darse cuenta de la realidad. Akira estaba muerto.

Paria había sufrido por tanto tiempo ya, siendo testigo de como mundo tras mundo era destruido por la antimateria, todo por su culpa y lo único que la había mantenido cuerda hasta era la idea de que alguien en algún lugar estaba haciendo algo para detener toda esta locura, para detener todas estas muertes, pero ahora esa única esperanza había desaparecido.

Todo estaba perdido.

Ya no había esperanza.

Con horror ella observaba como las pantallas se apagaban una a una mientras la antimateria cubría todo a la vista.

Ella grito y lloro, por primera vez en mucho tiempo.

Una lagrima por cada mundo que había visitado, porque sabía que ahora ya nadie más lloraría por ellos.

Continuara...


Notas del Autor:

Bueno, creo que muchos estaban esperando que hubiera empezado una pelea entre las Domadoras de Papel y los otros grupos de héroes, pero decidí no hacerlo al ver que no encajaba con sus personajes en lo absoluto y una resolución mas o menos pacifica era algo mas creíble.

Como lo prometí en el primer capitulo, aquí esta unas cuantas Biografías de Personajes.

Bolt Crack BOLT CRANK
Nombre Verdadero: Bolt Crack, se cree que antes usaba el nombre de León.
Profesión: Mercenario, aunque también es llamado explorador.
Parientes Conocidos: Ninguno.
Planeta de Origen: La Tierra.
Anime: Eat-man.
Armas: Es experto en toda clase de armas.
Habilidades Especiales: Bolt tiene un poder bizarro, la capacidad de comer cualquier cosa y después recrearlo (mezclando los artículos que comió) de cualquier parte de su cuerpo. Este artículo generalmente se crea en sus manos, aunque a veces también en otras partes del cuerpo, como su cabeza, pecho o piernas. Puede también tiene la habilidad de viajar entre universos supuestamente gracias a un artefacto que comió. Bolt también es un estratega extraordinario que generalmente siempre esta cinco pasos delante de sus enemigos e incluso sus amigos y raramente es tomado por sorpresa.
Historia: Poco o casi nada se sabe de la infancia de Bolt o si alguna vez la tuvo. El nunca envejece y se cree que ha estado desde los inicios de la humanidad, pero no es hasta que se desata una guerra entre la Tierra y otro planeta que él toma el nombre de Bolt Crank, y se dedica a ser Mercenario, su reputación creció tanto que muy pronto fue nombrado el "Mejor Mercenario del Mundo" titulo que aun posee en cada mundo que visita. Una de sus batallas más grandes fue contra Stella una androide que se enamoro de su pasado yo y estuvo a punto de destruir al mundo para tenerlo a él de nuevo, tras adueñarse de los sistemas de defensa de varios países y usar sus armas nucleares. Él es un hombre de pocas palabras y no muestra sus sentimientos. Siempre actúa frío, su cínica personalidad y su actitud de siempre hacer el trabajo y bien puede hacerlo parecer muy frío y oscuro. Pero al final, hace las cosas de manera correcta. Nunca aparece mirando hacia el pasado, ni se arrepiente de nada.

Teromea TEROMEA
Nombre Verdadero: Teromea.
Profesión: Maquina Parasito.
Anime-Manga: Eat-man.
Planeta de Origen: La Tierra.
Armas: Su gran boca.
Habilidades Espaciales: Cuando se fusiono al cuerpo de Bolt, ella pudo usar sus poderes e incluso puede recrear materia orgánica, su cuerpo en si es pequeño pero gracias a la gran cantidad de metal que ha consumido Bolt, Teromea puedo crecer cientos de veces su tamaño original.
Historia: Una maquina parasito creado por Leon (Un clon de Bolt o el original, nuca se supo). Engaño a Bolt para que lo comiera, viviendo en el cuerpo de Bolt como un parásito molestándolo. Su gran objetivo era el de acabar con Stella comiéndosela y el de resucitar a Leon, y convenciendo a Bolt para hacerlo parte de su plan. La resurrección involucro a Teromea comiendo a Leon y usando los poderes de Bolt para recrearlo. Gracias a esto Stella fue detenida de una vez por todas.

Zero ZERO
Nombre Completo: Saber Marionette Zero.
Profesión: Marioneta de Combate, aventurera.
Anime-Manga: Saber Marionette R y Z.
Planeta de Origen: Terra 2.
Armas: Varían de acuerdo al cuerpo que usa.
Habilidades Espaciales: Ella posee dos cables en su nuca que usar para fusionarse con cualquier Marioneta para formar la 'Ultimate Marionette', que generalmente varia de forma y poderes dependiendo del cuerpo que ella use.
Historia: Después de la Muerte del Rey Junior de Romana, Lima y Cereza se pusieron en éxtasis al lado de su tumba, 200 años después Mascara, en un nuevo cuerpo clonado, se lleva el cuerpo de Lima y divide su Otome Caído (Circuito Virgen) en dos partes, con una de ellas crea a Zero y con la otra a su hermana Omega, luego puso a Zero en éxtasis al ver que no serviría a sus planes de conquistar Terra 2. Tiempo después es descubierta por accidente por la profesora Kitajima, que la recluta para que ella y su equipo puedan detener los planes de Mascara. Después de feroces batallas contra las nuevas creaciones de Mascara, Zero tiene que pelear contra Omega y luego logra vencerla tras fusionarse con la doctora Kitajima, que era en realidad era Zarzamora que fue resucitado por el original profesor Kitajima y luego fue adoptada como su hija. Mascara termina suicidándose de nuevo al verse victima de sus propios planes (El mismo era una Marioneta y no lo sabia). Omega y Zero se fusionan para formar de nuevo a Lima y deciden viajar por Terra 2.